Viajes

Todo el exotismo de Tokio para un viajero primerizo

Templos, rascacielos, gastronomía, tecnología y diversión, son algunos de los contrastes que la capital nipona tiene para ofrecer

Tokio
Vista panorámica de la ciudad más poblada del mundo, TokioREALC

A diferencia de muchos destinos asiáticos definidos por un encanto en particular, al pensar en Tokio, hay tantas imágenes que posiblemente vendrán a nuestra mente que al visitarla por primera vez, quizá no sepamos por dónde empezar, pues la capital japonesa es una combinación de ciudad futurista, cultura milenaria, gastronomía de élite y naturaleza.

Para no perdernos en el trayecto, a través de este recorrido descubriremos las curiosidades y puntos que no hay que dejar de ver en esta aventura al otro lado del continente. Explorar Tokio es posible en cualquier temporada del año, ya que sus temperaturas equilibradas se asemejan a España y, aunque los gustos pueden variar dependiendo de cada viajero, visitarla antes o después de verano siempre tendrá un encanto singular, ya que en primavera florece el cerezo (hanami) y en otoño las hojas cambian de color (momiji).

Buena accesibilidad

Tokio cuenta con dos aeropuertos principales: Haneda, el aeropuerto internacional de Tokio, y Narita, más alejado del centro pero con muy buenas conexiones aéreas. Ambos tienen líneas express y trenes que llegan fácilmente a la ciudad. En nuestra primera aventura lo más recomendable es hospedarse cerca de la estación de Tokio, en barrios como Marunouchi o en Ginza, un área también también cercana, pero de mayor lujo.

Tokio es la capital más poblada del mundo, el último año contabilizó a más de 37 millones de residentes en sus 2.187,08 km2 de superficie. Si bien está conformada por 23 distritos, algunos de los que sí o sí hay que visitar como turistas noveles son: Shinjuku, donde la vida nocturna y los restaurantes reinan. Un segundo distrito imperdible es Shibuya, donde se ubica la estación más grande de Tokio y el famoso cruce peatonal más multitudinario del mundo. Además en este cruce está la estatua de Hachiko, el perro que nunca dejó de esperar a su dueño. El barrio de Akihabara, el paraíso de la cultura pop y la tecnología, los robots y la electrónica son los artículos más habituales del día, cuyas sombras solo se contrastan con los animes en un universo de neones y entretenimiento sin igual.

Después de más de 15 horas de vuelo desde España, está claro que las fotos tienen que ser de portada, para lo cual subiremos a los miradores más altos. Algunos de los más famosos ubicados en el centro de la metrópoli son Shibuya Sky, el Mirador del Gobierno Metropolitano de Tokio, Tokyo Tower y Skytree. Desde estos puntos los visitantes podrán admirar la extensión urbana de la ciudad, sus rascacielos emblemáticos y, en días claros, incluso el majestuoso monte Fuji en la distancia. Cada uno está sujeto a horarios, están habilitados con ascensores e incluso alguno puede ser gratuito.

Gastronomía a pie de calle

Pero este recorrido no estaría completo sin mencionar a uno de los rasgos culturales que más conocemos y disfrutamos de Japón. Sí, nos referimos a su gastronomía, pues la capital nipona es la ciudad con la mayor cantidad de estrellas Michelin del mundo.

Las opciones varían desde restaurantes premiados, tiendas locales, lugares donde se ofrece cena y espectáculo, e incluso espacios de cócteles a la altura de un rascacielos. Posiblemente, lo más típico para nosotros serán los sushis y sashimis, pero hay otro tipo de comida más local que deberíamos probar, como el tonkatsu, ramen, soba, udon y monja-yaki. Asimismo, en Tokio, los dulces son todo un punto y aparte, por su amplia variedad de sabores, texturas y formas. El postre bandera del país es el mochi, pero existen otros famosos que sorprenderán como: los taiyakis, pasteles en forma de pescado, los hot cakes soufflés o pancakes fufosos, los esponjosos cheesecakes japoneses, entre otros. Todos estos platos y especialidades se pueden encontrar callejeando por sus distintos barrios o en los restaurantes de alta gama. La grandeza de Tokio, se puede apreciar en unos pocos días, pero aunque decidamos vivir en la gran ciudad, seguramente siempre nos faltarán horas y días para conocer a detalle todo lo que tiene para ofrecer.

Desconecte de la ciudad en los templos budistas

En la capital japonesa se albergan también varios templos budistas de gran relevancia, entre ellos, el Templo Sensoji, el más antiguo y venerado de la ciudad, famoso por su puerta Kaminarimon y la pagoda de cinco pisos. Aquí reposa la estatua sagrada de la diosa de la misericordia, Kannon. Por otro lado, el Templo Zojoji o Meiji-Jingu, en Harajuku, es un oasis de tranquilidad, rodeado de un exuberante bosque. Por último, el Templo Zojoji, cerca de la Torre de Tokio, es conocido por sus estatuas de jizō y por ser el sitio de ceremonias fúnebres de los shogun Tokugawa.

Satoshi Hirayama, Tokio
Satoshi Hirayama, TokioREALC