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La no propuesta de rescate de Garicano

El escritor analiza con Luis Garicano, gurú económico de Ciudadanos, la situación política y económica de España

La no propuesta de rescate de Garicano
La no propuesta de rescate de Garicanolarazon

Luis Garicano estudió en Valladolid, su ciudad natal, y acabó haciendo su doctorado en la Universidad de Chicago, donde fue profesor de Economía durante varios años. Hoy enseña Economía y Estrategia en la London School of Economics. También trabaja de consultor para algunas instituciones europeas. Además, es uno de los gurús económicos de Albert Rivera y Ciudadanos. Ha coordinado el grupo que se ha encargado de las 30 propuestas que ayer presentó Rivera en Cádiz. Se ha convertido en una de las personas cuyo criterio puede tener un peso importante, tal vez decisivo, en los próximos años en nuestro país. Acaba de presentar un libro titulado «Recuperar el futuro».

José María Marco - ¿Qué lleva a un profesor a entrar en política?

Luis Garicano - Ilusión por cambiar las cosas en mi país. Veo el cambio posible. La gente está deseosa de cambiar, y creo que Ciudadanos les ofrece un proyecto bien trabado de regeneración con un excelente líder.

JMM - ¿Qué representa que una de sus «alma mater» sea la Universidad de Chicago? ¿Es Milton Friedman su economista preferido? ¿Cuáles son sus influencias filosóficas?

LG - Creo que en Chicago aprendí enorme capacidad de trabajo, a encajar las críticas con buen humor, hasta el punto de disfrutar el combate intelectual. Mi economista preferido es sin duda Sherwin Rosen, mi director de tesis, que falleció desgraciadamente poco después de que yo terminara. Su estudio sobre las causas de la desigualdad y sobre la especialización en el trabajo continúa teniendo una profunda influencia en mi trabajo académico y en mi forma de entender el mundo.

JMM - ¿En qué falla el modelo universitario español?

LG - En el poco caso que a menudo se hace del mérito investigador y docente para la promoción y la contratación de los profesores. La famosa endogamia.

JMM - ¿Por qué propuso en el verano de 2012 que el gobierno pidiera el rescate (no sólo un rescate financiero)?

LG - No, no propuse eso. Escribo docenas de artículos y libros y nunca nadie ha encontrado una línea en la que dijera eso. Tampoco el documento que presenté al presidente Rajoy en Moncloa el 4 de Septiembre del 2012 tiene una sola línea sobre ese tema. Es un documento que es público (de hecho lo tuiteé tras una pregunta idéntica de un tertuliano en el «Espejo Público») fue elaborado por un grupo Europeo de economistas (INET Euro Group), y es un análisis y una propuesta sobre las instituciones necesarias para hacer del Euro una verdadera moneda común.

JMM - Algunas de las reformas de estos años han sido de gran calado... y mal recibidas. De hecho, el PP paga en parte las reformas realizadas, lo que coloca en una situación difícil a quien venga ahora con intención reformista. ¿Se podría haber llegado más lejos en algún asunto? ¿Reforma laboral? ¿Financiera? ¿Reforma fiscal?

LG- Creo que las reformas clave se han dejado sin hacer, y algunas no tienen ningún coste económico. España necesita una justicia independiente y que funcione. EL PP prometió hacer esto en su programa, e hizo lo contrario. España debe luchar decididamente contra la corrupción, tiene que luchar decididamente contra la dualidad, debe repensar la Universidad. Creo que el PP ha hecho las reformas que no ha podido evitar porque le han sido impuesto de fuera.

JMM -¿Si fuera ministro de Economía, cuál serían las tres primeras acciones que tomaría?

LG - En realidad, lo más importante para que nuestro país tenga éxito en la economía moderna del conocimiento no es una medida fiscal, sino la educación. Creo que lo más importante para España es poner en marcha un pacto nacional por la educación para implementar una reforma educativa que dure generaciones y que de verdad nos saque de la cultura memorística y prepare a nuestros jóvenes para la economía del conocimiento. En segundo lugar, hay que poner en marcha una reforma del marco de relaciones laborales que haga posible generalizar los contratos indefinidos. Finalmente, hay que acabar con el ambiente de tolerancia a la corrupción y el capitalismo de amiguetes.

JMM - ¿Cómo puede España crear un centro de innovación y de inversión, algo así como Silicon Valley, salvando (o no) las distancias? ¿Por qué no tenemos niveles superiores de capital riesgo? ¿Qué hace Estados Unidos para conseguir eso y qué no hacemos aquí? ¿Cuál es el papel del gobierno para favorecer algo parecido?

LG- Creo que es posible, quizás no ser Silicon Valley, pero al menos ser Israel en este tema, que tiene el mayor número de empresas en el mercado más «tecnológico» americano, el Nasdaq (tras EE UU) a pesar de su reducido tamaño. Para ello hay que en primer lugar favorecer el capital riesgo. Segundo la educación, como expliqué antes. Tercero, la innovación, tanto en la Universidad, como en la empresa. Nosotros hemos propuesto que la deducción por Innovación la pueda hacer el empresario mismo si la empresa no da beneficios, que es lo que suele pasar en las empresas tecnológicas a veces por largo tiempo. Cuarto, creemos que es crucial incentivar la transferencia de conocimiento de la universidad a la empresa. Para ello hemos propuesto una Red Cervera de Centros de Transferencia Tecnológica, centros dirigidos por un profesor universitario y financiados en función de su capacidad de crear innovación y transferirla.

JMM - ¿Estamos condenados a un desempleo estructural alto?

LG - No. Ningún país lo está. Tenemos el mercado laboral menos funcional del mundo. Hay que reformarlo para acabar con la excesiva rotación, la excesiva temporalidad, que trata a los jóvenes como kleenex. Nuestra propuesta de contrato único generalizará la contratación indefinida

JMM - A partir de los 50 años, y ya entrando en la jubilación, tenemos a grandes cantidades de personas que dejan de aportar a la economía. ¿No se puede cambiar esto? ¿Cómo?

LG - Creo que tenemos que empezar a pensar en una jubilación mucho más activa en muchos empleos. Debemos intentar combinar la pensión con el empleo, y no impedir que los trabajadores sigan activos cuando lo deseen. La vida dura muchos más años, y muchos no querremos dejar completamente de trabajar.

JMM - Pablo Iglesias dice que tenemos que parecernos a Dinamarca... ¿Es el despido libre una solución para España?

LG - No, creo que nadie propone el despido libre. Parecerse a Dinamarca es combinar un alto nivel de protección de los trabajadores, con una economía de mercado que funciona realmente bien.

JMM - Estados Unidos cuenta con un ministerio enfocado exclusivamente a la pequeña empresa... ¿Qué opina del trato que damos en nuestro país a las pymes y a los autónomos?

LG - Terrible. Todo el mundo dice que le preocupan los autónomos, pero lo que vemos es que no hacen más que poner obstáculos. En los próximos tres meses, uno de cada nueve autónomos habrá abandonado su actividad. En Ciudadanos creemos que se pueden hacer cosas para mejorar, en particular dos: eliminar los costes fijos (ahora alrededor de 400 euros) de poner en marcha la actividad de autónomo, incluyendo el alta a la Seguridad Social (no habría que hacerlo por debajo del SMI de ingresos) y eliminar burocracia: la administración no debe pedir a los ciudadanos ningún papel que la administración ya tenga.

JMM - ¿Hoy en día, ¿cuál es el principal riesgo para la economía mundial?

LG - Creo que el parón en las economías en desarrollo, junto con la inestabilidad que producirá la salida de las políticas monetarias no convencionales de la Reserva Federal y, en su momento, en Europa.

JMM - Ha dicho que España tiene que elegir entre Dinamarca y Venezuela. ¿No es un poco tremendista?

LG - No. España puede elegir el camino aparentemente fácil del subsidio, o puede elegir el camino de invertir a medio plazo en educación, en un mercado y un Estado que funcionen para todos. Esto último, el camino de las economías con más éxito del planeta, las del norte de Europa, que combinan muy altos grados de libertad económica con un excelente sistema social, es lo que creemos desde Ciudadanos que España debe construir.

JMM - ¿Qué quiere decir «recuperar el futuro»? Supongo que en Ciudadanos sois conscientes de que mucha gente, en particular la gente joven, siente que ha faltado y que falta autoridad. Hay una paradoja en este asunto que no es fácil de gestionar por un partido nuevo (nuevo por lo menos a nivel nacional).

LG - Hay una generación de españoles a los que se les está robando el futuro. Lo que quiero decir es recuperar la ilusión, la confianza en que el futuro será mejor que el presente, en que el país puede dar un futuro a todos.

JMM - ¿Dónde está su casa, su hogar?

LG - En Pozuelo de Alarcón. Me he empadronado allí recientemente.