¿Para qué sirve el modo desarrollador de tu teléfono? Pocos lo conocen, y es un arma increíble, aunque peligrosa

A lo largo de los años los teléfonos móviles han ganado en capacidades a un ritmo vertiginoso. Han evolucionado sus cámaras, los procesadores permiten disfrutar de juegos exigentes a nivel gráfico y el contenido multimedia se ve mejor en pantallas con una resolución que no ha parado de mejorar.

No obstante, existe un apartado oculto en el sistema de nuestros teléfonos que desata un torrente de posibilidades para mejorar el rendimiento del dispositivo, aunque conviene utilizarlo con suma precaución y sabiendo lo que se toca, porque también expone al riesgo de provocar consecuencias no deseadas en el teléfono móvil. Hablamos del modo desarrollador, también conocido como opciones de desarrollador.

Un modo pensado para usuarios con ciertos conocimientos

El modo desarrollador permite acceder a un apartado de la configuración de los terminales que, por defecto, no se muestra en los ajustes. Con este modo, el usuario puede regular el comportamiento del sistema operativo, depurar aplicaciones y tener acceso a opciones ocultas. En un principio está pensado para aquellos usuarios con conocimientos técnicos o que se dedican a desarrollar aplicaciones, de cara a poder hacer pruebas con él.

Como decimos, alterar algún apartado indebido puede hacer que el teléfono móvil comience a presentar un funcionamiento errático. Para solventarlo, a veces la única solución es acceder al modo de recuperación mediante la combinación de los botones de volumen y encendido que detallamos hace unos días. Algo parecido a la opción de utilizar en el ordenador la combinación Ctrl + Z, que nos puede permitir volver al pasado y recuperar un trabajo que podíamos dar por perdido en otras circunstancias.

Las opciones de desarrollador o modo de desarrollador están disponibles en todos los terminales y para desbloquearlas basta con acudir a la aplicación de ajustes, buscar el apartado llamado “sobre el dispositivo” o “acerca del dispositivo o teléfono” y una vez allí pulsar varias veces el número de compilación o la versión del sistema operativo. Conforme se va realizando el proceso, el sistema indica los toques que quedan para activar las opciones de desarrollador hasta que éstas quedan activadas.

Una vez desbloqueado el modo desarrollador, el usuario tendrá en el listado de sus ajustes un apartado de “ajustes adicionales” u “opciones avanzadas”, que no es más que un almacén con todas esas nuevas posibilidades que se han abierto en la configuración de su terminal y entre las que se encuentran diferentes alternativas de selección de funciones:

• Depuración por USB
• Instalar vía USB
• Mostrar tasa de refresco de la pantalla
• Limitar procesos en segundo plano
• Consumo de energía para acceder a herramientas para monitorear el consumo
• Permitir difuminar ventanas
• Acceso a la escala de animación de ventanas o transiciones
• Mostrar toques para ver la ubicación de los toques en la pantalla
• Limitar búsqueda de redes Wi-Fi para reducir el consumo de batería

Estos son solo algunos de los ejemplos, pero el listado sería casi interminable. Como puede verse algunas de las opciones a las que se accede desde el modo desarrollador ofrecen la posibilidad de modificar de manera sustancial aspectos del propio funcionamiento del dispositivo.

Por ello, resulta conveniente actuar con cautela al acceder a estas funciones avanzadas y no modificar ninguna en caso de duda, puesto que pueden poner en entredicho la estabilidad y el correcto funcionamiento del teléfono.