El desafío independentista

La presión para una lista unitaria aleja a Junqueras de ser número uno

Las entidades independentistas se inclinan por buscar una personalidad del ámbito civil

La normalidad parece haber vuelto a las calles de Barcelona una vez cesado el Gobierno de Cataluña
La normalidad parece haber vuelto a las calles de Barcelona una vez cesado el Gobierno de Cataluñalarazon

Las entidades independentistas se inclinan por buscar una personalidad del ámbito civil.

Una vez asumido el marco constitucional español con la participación en las elecciones convocadas por Mariano Rajoy, el independentismo ahora se enfrasca en un debate sobre cómo afrontarlas y con el apremio de los plazos, ya que debe decidir si reedita un Junts pel Sí antes del 7 de noviembre. Por el momento, ni PdeCAT ni ERC han descartado repetir una coalición, aunque cada uno a su manera: los neoconvergentes han asegurado que están en busca de la mejor fórmula para que ganen los partidos soberanistas, mientras que los republicanos prefieren ampliar el prisma y apuestan por una coalición pero con partidos que defiendan la república –mirando hacia los «comunes»–. Si bien, las entidades independentistas se han convertido en la punta de lanza del «procés» y sus observaciones deben ser siempre atendidas y la mayoría de veces asumidas.

En este sentido, la ANC, reunirá mañana a todos los partidos para abordar esta cuestión, aunque ya ha verbalizado su idea de repetir una coalición. No obstante, aquí se deberán enfrentar a las voces internas de PDeCAT y ERC que no desean reeditar JxSí y a los tiempos de la CUP, que el sábado celebra un Consejo Político pero no decidirá si participa el 21-D hasta el 12 de noviembre.

ERC, con las encuestas a su favor, no puede dejar ver en demasía una actitud electoralista, porque su electorado tampoco lo entendería. Por ello, aunque con recelos y más bien empujado por el contexto político que envuelve a Cataluña, abre la puerta a una coalición aunque juega a la ambigüedad apelando ahora a una de unidad republicana para defendar la república catalana. Y es que sabe que de repetir una coalición separatista obligaría al partido a seguir los esquemas de las entidades, que promueven listas encabezadas por personalidades del ámbito civil (los «Jordis»). Algunas entidades apuestan también por incluir a Puigdemont, lo que dificultaría a Junqueras ser número uno.

El PDeCAT, por su parte, se encuentra ante el debate de escuchar a las voces que gritan por la independencia, más favorables a una candidatura unitaria, y a los que, como el ex conseller Santi Vila, se postulan por recuperar el norte identitario del partido.