La CUP acusa a Junqueras de buscar un adelanto electoral

Hoy nadie duda de que el ganador de la aventura independentista es Oriol Junqueras. Su figura no ha sufrido ningún rasguño y todas las encuestas le dan una victoria holgada.

Hoy nadie duda de que el ganador de la aventura independentista es Oriol Junqueras. Su figura no ha sufrido ningún rasguño y todas las encuestas le dan una victoria holgada. Por eso, el PDECAT –antigua Convergència– y la CUP, que han sido los más perjudicados, se han «arremangado» activa o pasivamente para implicar al vicepresidente de la Generalitat y líder de ERC en este pantanoso escenario, donde el proyecto de autodeterminación se encuentra sobre el alambre.

En este caso, los que más abiertos se han mostrado a cruzar reproches con Junqueras ha sido la CUP. Hasta ahora, se habían limitado a reconocer que la negociación de las cuentas –que corresponde al vicepresidente como responsable de la cartera de economía– no había ido bien «hasta el momento». Pero ayer, el diputado de la formación anticapitalista, Benet Salellas, elevó el tono y acusó a Junqueras de estar actuando bajo «cálculos electoralistas» y de haberse inhibido todo este tiempo en el debate de los presupuestos. «Hasta ahora ERC se había puesto de perfil y había dejado que CUP y el PDECAT se fueran peleando», reprochó Salellas.

De esta manera, la incertidumbre que planea sobre el horizonte de los números de la Generalitat para 2017 se intensifica. El diputado de la izquierda anticapitalista explicó que la reunión del pasado viernes fue la primera a la que acudió Junqueras, y sospechó que respondía a la petición que habían hecho 24 horas antes durante la conferencia político que celebró la CUP. «Creemos que fue porque estábamos pidiendo al Govern que se pusiera las pilas y se activase porque esta negociación de presupuestos hasta ahora tenia un perfil muy bajo», consideró en una entrevista en TV3.

El diputado afeó falta de «actitud» al gobierno catalán e insistió en los elementos que distancian al Govern y la CUP para desencallar las cuentas. Según Salellas, que confirmó que la reunión del viernes sirvió para que la Generalitat «se sentara por primera vez a escuchar» las peticiones de los anticapitalistas, estos se limitan a cinco puntos que para su formación son «imprescindibles»: la educación pública, la fiscalidad, la renta garantizada, la contratación pública y un despliegue de once fondos para atender «prioridades en materia de vivienda o cambio climático».

De entre todos ellos, hay dos cuestiones que parecen llamadas a extremar las dificultades de entendimiento. La educación pública, para la que piden aumentar en 150 millones de euros las partidas de gasto, y que ya han anunciado que secundarán las huelgas que promueven los sindicatos educativos. Por otro lado, sin reconocer «líneas rojas», ha deslizado que una modificación de la fiscalidad es indispensbale para dar su plácet a las cuentas.