Venezuela

La MUD lanza otra campaña para adelantar el revocatorio

La oposición venezolana saldrá de nuevo a la calle el 12 de octubre. Sus líderes aceptan recoger el 20% de las firmas si se contabiliza todo el Estado

Henrique Capriles se dirige a los seguidores de la coalición opositora, ayer en Caracas
Henrique Capriles se dirige a los seguidores de la coalición opositora, ayer en Caracaslarazon

La oposición venezolana saldrá de nuevo a la calle el 12 de octubre. Sus líderes aceptan recoger el 20% de las firmas si se contabiliza todo el Estado

David contra Goliat. Es la lucha que enfrenta al clamor democrático en Venezuela contra el autoritarismo del chavismo. El Gobierno de Nicolás Maduro quiere cerrar todas las vías para que el referéndum que promueve la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) no se realice en 2016 y así ganar tiempo para culminar el mandato en 2018 y aferrarse al poder hasta 2019. A pesar de los constantes embistes del chavismo y los órganos oficiales que trabajan a sus órdenes, la oposición no se rinde y sigue su lucha para que el país recobre la dignidad, la democracia y el bienestar. Ayer, la MUD, después de un fin de semana de gestiones tras la decisión del Consejo Nacional Electoral (CNE), aseguró que recogerán el 20% de firmas necesarias para activar el revocatorio contra Maduro y así obligar a que la consulta se realice a finales de año. Además exigen que ese 20% sea a nivel nacional y no en cada Estado, como pretende el CNE.

Aunque internamente la MUD tiene diversas posturas, ayer logró una vía consensuada porque, según sus dirigentes, «ha llegado la hora de no aguantar más, es la hora del cambio» y aceptó llevar a cabo la recogida de casi cuatro millones de firmas el 26, 27 y 28 de octubre tal como lo estableció el CNE. Antes, el 12 de octubre harán una multitudinaria movilización en todas las calles de Venezuela para «obligar» a que se respete la voluntad de la mayoría de quienes quieren expulsar a Maduro.

Jesús «Chúo» Torrealba, secretario de la MUD, dijo que la oposición sólo acatará las condiciones que establece la Constitución . «El referéndum revocatorio se hará este año. No hay razones técnicas ni jurídicas para que no sea así. Cualquier intento de bloquearlo implicará la movilización del pueblo pacífico y firme en la calle para lograr la restitución del hilo constitucional. Activaremos el revocatorio cumpliendo lo que está en la Constitución: la recolección de firmas que represente al menos el 20% del padrón electoral a nivel nacional», dijo Torrealba.

Otros líderes de la oposición, como Henrique Capriles, Henry Ramos Allup, Henry Falcón, Simón Calzadilla y la propia María Corina Machado suscribieron la decisión unitaria de agotar las instancias para que el revocatorio se haga este año. También ayer, el preso opositor Leopoldo López se manifestó a través de su cuenta de Twitter. «La dictadura pretende esconder su gran debilidad abusando groseramente del poder. Se quedaron sin pueblo y por eso no quieren elecciones. El revocatorio puede y debe ser este 2016. No serán cuatro inmorales en el CNE quienes decidan nuestro destino, sino un pueblo movilizado y consciente que quiere y lucha por un cambio», escribió desde el penal militar de Ramo Verde. En esa misma acera de la radicalización de las acciones opositoras está María Corina Machado, quien pidió «rebeldía nacional».

Mientras, la crisis en Venezuela sigue escalando. La cesta de la compra alcanzó los 383.925 bolívares, por lo que son necesarios al menos 17 salarios mínimos para cubrirla. Los productos básicos siguen ausentes en las estanterías de los supermercados y en los ocho meses que lleva en vigor el decreto de emergencia económica de Maduro, la inflación se ha disparado al 800%.

Maduro, sin apoyo del oficialismo

La evaluación sobre la gestión del presidente Maduro ha empeorado ocho puntos en cinco meses. El último estudio del Venebarómetro asegura que al 76,4% de los venezolanos le parece negativo el trabajo del mandatario y el 70,9% de los consultados confiesa que Maduro debe abandonar la Presidencia «lo más pronto posible». Además, el deterioro de su imagen ha crecido, incluso, entre los chavistas. El 27% del oficialismo afirma que su gestión es negativa y el 22,1% lo respalda.