¡Manos arriba, esto es un atraco!

Bajo la bandera de la seguridad vial y de la movilidad urbana se está tejiendo en torno a los automovilistas madrileños una suerte de leyenda negra para generar en la opinión pública un enemigo identificable a quién atribuir parte de los males de la ciudad (contaminación ambiental, congestión circulatoria, ruidos) y poder así justificar medidas restrictivas y sancionadoras que, en nuestra opinión, son de dudosa eficacia. En nuestro anterior informe sobre multas de tráfico en Madrid, advertíamos un inexplicable incremento en el número de denuncias de tráfico formuladas hasta el mes de mayo, de más de un 20% respecto del mismo periodo del año anterior, y requeríamos una convincente explicación por parte de los responsables municipales para alejar las sospechas de que se están utilizando las multas de tráfico con fines recaudatorios.

Los últimos datos, relativos al acumulado de denuncias hasta el mes de septiembre, nos obligan no ya a pedir explicaciones, sino a denunciar la posible instrumentalización de las multas municipales con una finalidad recaudatoria. ¿Algún responsable municipal puede explicar a qué se debe, si no, el importantisimo incremento de las denuncias formuladas, que ya supera el 30%? ¿O por qué se han duplicado las multas en las Áreas de Prioridad Residencial, o las de foto-rojo, o las de velocidad? ¿O por qué las denuncias formuladas en agosto por los agentes de movilidad se han incrementado un 1.600%, pasando de 3.489 a 61.270? Quizás, la explicación haya que buscarla en que los presupuestos no cuadran y hay quienes han encontrado en las multas una nueva fuente de financiación municipal con ingresos superiores a los 200 millones de euros. Por eso, si se siguen utilizando las multas de tráfico con fines recaudatorios habrá que gritar eso de ¡manos arriba, esto es un atraco! cada vez que venga el cartero a repartirnos la multa con el aguinaldo municipal.

*Director de Automovilistas Europeos Asociados