Drogas

El consumo de analgésicos adictivos se dispara

Un grupo de expertos alerta del «escalofriante» incremento «escalofriante» en la adquisición de este tipo de fármacos

El consumo de analgésicos sin control preocupa a los expertos
El consumo de analgésicos sin control preocupa a los expertoslarazon

Expertos en drogas han puesto de relieve el «escalofriante» aumento del consumo de analgésicos opiáceos que crean problemas adicción y han pedido poner el foco en ello a la hora de abordar el problema de las adicciones, informa Efe.

Así lo han manifestado durante la jornada «El futuro del abordaje de las adicciones», auspiciada por la Organización Médica Colegial (OMC), que han inaugurado este miércoles el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Francisco de Asís Babín, y la presidenta de la Comisión Mixta Congreso-Senado para el Estudio del Problema de las Drogas, Carmen Quintanilla.

«Las abuelitas del optalidón son nuestras madres y nuestras tías del orfidal de ahora», ha asegurado el doctor Gregorio Martín, asesor de Cruz Roja y presidente honorífico de la Sociedad Española de Patología Dual.

Para este experto, el abordaje de la adicción a los psicofármacos no debe realizarse solo desde el punto de vista de las personas que los consumen, «sino que hay que hacer una sensibilización importantísima porque hay una responsabilidad» de los profesionales sanitarios.

También el presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), Serafín Romero, ha alertado del excesivo consumo de psicofármacos y ha alertado de que se puede estar llegando tarde a estas adicciones, al igual que en el caso de la ludopatía, que está aumentando entre los jóvenes a través del juego «online».

Por su parte, la presidenta de la comisión mixta ha asegurado que «estamos decididos a que esta vez el proyecto de ley «Menores sin Alcohol» salga adelante, porque lo demanda la sociedad» y ha explicado que la hoja de ruta será el informe de la ponencia que se está elaborando en el seno de esa comisión.

Quintanilla ha señalado que el proyecto de ley debe abordar la prevención, la educación y poner en marcha medidas que permitan «sacar a nuestros menores del consumo masivo de alcohol los fines de semana» y evitar que vayan al chino a comprar.

A su juicio, los padres disponen de pocas herramientas para luchar contra la permisividad y el consumo de alcohol por parte de sus hijos, por lo que hay dotarles de más instrumentos y «dejarles claro» que la adicción al alcohol de los adolescentes es «tremendamente grave y puede ser tremendamente peligroso».

En el mismo sentido, el portavoz socialista, José Martínez Olmos, ha dicho que hay que insistir en que el consumo en menores produce deterioro de la maduración neuronal y tiene consecuencias para su salud.

El portavoz del grupo popular, Jesús Aguirre, ha explicado que la ponencia tiene de plazo hasta marzo para elaborar el informe y ha confiado en llegar a un consenso de cara a una futura ley.

Las representantes de Podemos, Tania Sánchez, y del PNV, Nerea Ahedo, han mostrado sus dudas, aunque la última ha destacado que «hay cuestiones concretas en las que hay consenso», sin especificar cuáles.

Más crítica ha sido la portavoz de Podemos, quien ha dicho no estar «muy optimista» con la ponencia y ha subrayado que la connivencia generalizada que existe con el alcohol en España «no se resuelve con una ley».

Y aunque ha mostrado la «absoluta» voluntad de su grupo de poder llegar a un acuerdo, ha considerado que no se irá más allá de aprobar una ley que acapare titulares pero que no será efectiva para solucionar el problema.

En su intervención, el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas ha subrayado que el gran reto en la atención de las adicciones es definir mejor cómo debe ser ésta en la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud.

En cuanto al cannabis, Babín ha criticado que «se están utilizando de manera absolutamente preocupante determinados mensajes que no se basan en la evidencia científica» y ha recalcado que ante el reto de las nuevas sustancias psicoactivas, hay que adoptar una actitud «inmensamente vigilante» de su evolución en el futuro. EFE