Literatura

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Imma Monsó: «Hablar puede ser una cosa terrorífica»

Imma Monsó presentó su más reciente libro, «El aniversario», a la vez un drama doméstico y una oda a la literatura y al lenguaje

Imma Monsó: «Hablar puede ser una cosa terrorífica»
Imma Monsó: «Hablar puede ser una cosa terrorífica»larazon

«Es una de estas novelas que se te van haciendo en las manos mientras las escribes, y que te van dando sorpresas», dice Imma Monsó de «El aniversario», su más reciente libro. La escritora catalana había permanecido cuatro años sin publicar y ahora vuelve a la escena literaria con una novela que también asombra al lector. «En mi trayectoria, cada historia responde a una pregunta que me obsesiona en un momento dado, y la novela consiste en plantearla, aunque no necesariamente darle respuesta», explica. En «El aniversario», una pareja que ha llevado un matrimonio estable durante décadas y que ahora enfrenta una crisis trata de recuperar su relación. Por su parte, dos niños salen al bosque a interpretar su propia versión de «Moby Dick». La literatura y el lenguaje son claves en ambas historias y aparecen como forma de liberación. La protagonista, por ejemplo, juega a traducir versos en silencio cuando se siente abrumada: «En ese momento la palabra poética es liberadora. El ritmo y la forma, también», dice Monsó, y añade: «Para mí, escribir es una cuestión de forma y de voz. A veces me dicen que he escrito novelas muy diferentes, pero que se me reconoce por

el estilo. Eso es lo que quería conseguir. Me gusta esa voz que reconoces en un autor y que sabes que no importa tanto lo que te cuenta, sino cómo te lo cuenta».

– El libro ha sido presentado como un «thriller», pero no lo es en el sentido más tradicional.

– Depende de lo que consideres «thriller». Es verdad que a veces el escritor tiene la nostalgia de ese género, pero en este caso, aunque el suspense está ahí, es más del tipo «hitchcockneano», del qué pasa con el otro; suspense doméstico. Es decir, hay elementos, pero desde luego no es un «thriller».

– Después de cuatro años sin escribir, ¿cómo nació la historia de «El aniversario»?

– Me pidieron una pieza de teatro para el festival Grec de Barcelona, y tenía dos condicionantes: que fuera breve, de quince minutos, y que sucediera dentro de un coche. Lo que me animó a seguir con el encargo fue que ocurriera dentro de un vehículo. Ese espacio claustrofóbico me resulta inspirador. Ahí aparece esta pareja que intenta superar una crisis de relación. Él le entrega un regalo más bien terrorífico. La escena de la novela en que esto sucede era la pieza de teatro. Pero, claro, me quedé colgada de esa historia. Necesitaba averiguar qué iba a pasar y, sobre todo, qué había sucedido para que dos personas que se habían querido llegaran a ese extremo. La novela parte de una indagación psicológica de lo que ha pasado para llegar a algún punto. Como cuando leemos noticias terroríficas y pensamos: ¿Cómo está la gente tan loca?, y todo se explica a la perfección cuando escarbas en la historia de las personas.

– Efectivamente, en la novela la infancia de los personajes es clave para entender su relación y su situación actual...

– A menudo el pasado lo explica todo, y especialmente la infancia. Ellos se han atraido por ser muy distintos: la mujer es muy imaginativa, es casi autosuficiente en los límites de su imaginación, y él, más pragmático, transparente, simple. Han pasado veinte años juntos en una vida agradable, estable y, sin embargo, de pronto, ella tiene un «click», algo la irrita y él le resulta demasiado predecible, repetitivo. Empiezan un periodo de discusiones que resuelven callando; un recurso original, porque acostumbramos a decir: «Sentémonos a hablar». Pero a veces es una cosa terrorífica, sentarse a hablar. Ese periodo de silencio ya de por sí es inquietante, porque no se dicen si quiera trivialidades. Hasta que él la convoca a celebrar un aniversario y ella, que está ávida de romper la rutina, accede. Entonces se van a la excurisón donde él le va a entregar el regalo y va a empezar la historia, pero también ese grado de angustia, inquietud y extrañeza que tienen el uno con el otro, y que creo que es donde radica el miedo del lector (no tanto en el regalo, aunque también es siniestro).

– El lenguaje tiene un papel importante en la novela, a la vez como creador y como destructor de realidades.

–El lenguaje crea mundos. En gran medida, esta novela es una historia sobre el poder creador del lenguaje y sobre qué hacemos con él, qué tipo de artificios, ficciones y mentiras estructuramos. Y, lo que para mí es muy importante, la diferencia entre mentira y ficción. Creo que, más allá del suspense, «El aniversario» es una novela sobre estos temas. El poder creador del lenguaje está claro en lo que se nos cuenta de la infancia de los personajes, en cómo los niños del libro viven e interpretan las historias que leen y, en definitiva, en cómo vemos que adivinamos cosas por el modo en que habla cada personaje. Y, además, está la contraposición entre silencio y discusión, o lo destructivo que puede ser el lenguaje en una pareja.

– La diferencia entre ficción y mentira es uno de los elementos que une las dos historias de la novela y que obsesiona a los personajes, ¿por qué es tan importante separarlos?

– Un pacto de ficción es muy diferente a una mentira, pues en la ficción hay un consenso, mientras que la mentira es una tiranía unilateral, como dice la protagonista en el libro. Parece muy evidente, pero tampoco lo es tanto en la vida cotidiana. Cuando un niño te pregunta si un personaje de un libro es real, ¿qué le contestas? A mi hija le decía que sí, porque hay un mundo de ficción que es suficiente por sí mismo y que tiene una realidad que le es propia. Esa realidad paralela nos ha dado tantos personajes que son más reales para nosotros que otros de carne y hueso. Eso es posible por el consenso que hay en la ficción, a diferencia de la mentira, aunque a veces se intenta desprestigiar la ficción en función de que no se corresponde a la verdad.

Titulo: El aniversario

Autor: Imma Monsó

Editorial: Destino

254 páginas

20 euros