El déficit por cuenta corriente cae un 18,7% hasta marzo

En marzo salieron de España 500 millones de euros, pero en el acumulado de los tres primeros meses llegaron un total de 7.900 millones

El déficit del Estado alcanzó los 13.981 millones de euros entre enero y abril (el 1,25% del PIB), lo que supone un 15,7% más que los 12.089 millones de euros (1,12% del PIB) registrados en el mismo periodo de 2015. Este «agujero» de 1.892 millones no pudo ser subsanado por la caída del gasto público (1.595 millones menos), y vino provocado principalmente por la pérdida de recaudación de 4.945 millones en el impuesto de Sociedades, en el IRPF y en Patrimonio, según datos del Ministerio de Hacienda.

Según publicó ayer la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), el Estado central registró unos ingresos totales de 52.483 millones de euros en los cuatro primeros meses del año, 3.487 millones menos que los 55.970 millones del mismo periodo de 2015. La caída más acusada se produjo en la categoría de impuestos sobre la renta, que incluye IRPF, Sociedades y Patrimonio, y que cedió los citados 4.945 millones en comparativa interanual (desde los 19.658 millones de abril de 2015 hasta 14.714 millones).

La Agencia Tributaria (AEAT) explica que entre enero y abril «la causa principal de la caída es que en este mes se concentran unos mayores efectos de la reforma de la imposición directa», es decir, de la rebaja del IRPF y Sociedades. «En los cuatro primeros meses, el impacto negativo de esos cambios se cifra en 2.556 millones», destaca el informe de recaudación correspondiente al cuarto mes del ejercicio actual.

El organismo que dirige Santiago Menéndez destaca que el tributo que grava los beneficios empresariales se situó en terreno negativo (-1.802 millones de euros) en abril por «las medidas transitorias que afectaban a los pagos y a que hace un año hubo un ingreso extraordinario ligado a la salida a bolsa de AENA. A medida que avance el año se irá suavizando el impacto de estos elementos».

Hacienda ya ha informado de esta situación del impuesto de Sociedades a la Comisión Europea y no espera que tenGa un impacto prolongado en el conjunto del ejercicio. De hecho, apuntan que las bases imponibles siguen creciendo.

El secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, explicó ayer, por su parte, que la fuerte caída registrada hasta abril en la recaudación de Sociedades es algo «transitorio y coyuntural», que tiene que ver con factores como la reforma fiscal y los extraordinarios por la salida a bolsa de AENA, cuyo efecto se va a ir diluyendo a lo largo del ejercicio, según informa Efe. El IVA, según la AEAT, recaudó un 3,2% más y aportó 802 millones de euros adicionales.

Por el lado de los gastos, el Estado central desembolsó 66.464 millones de euros, 1.595 millones menos que los 68.059 millones del mismo ejercicio del año anterior. Con estas cifras, el déficit se situó en el 1,25% del PIB, frente a un objetivo del 2,9% de todo el ejercicio, cifra a la que habrá que sumar el «agujero» de la Seguridad Social.

El conjunto de la Administración Pública (la central, las comunidades autónomas y la Seguridad Social) registró un desequilbrio de 8.916 millones de euros (0,8% del PIB) entre enero y marzo, un 1,4% más que los 8.796 millones (0,81%) registrados en el mismo periodo del año precedente. La principal razón de que aumente la «brecha» reside en la Seguridad Social, cuyo superávit descendió desde los 2.755 hasta los 1.813 millones.

No obstante, los cálculos con la ratio de PIB ofrecidos por la IGAE se realizaron con una previsión de crecimiento de la economía del 3,7% en el presente ejercicio, lo que da una producción total en nuestro país superior a los 1,12 billones de euros, mientras que el pronóstico oficial es del 2,7%. La décima de diferencia entre ambas estimaciones arroja un desfase de aproximadamente 11.000 millones que, obviamente, favorecen las estadísticas.

Respecto a las comunidades autónomas, el déficit se redujo hasta finales de marzo en un 24,7% con respecto al mismo periodo de 2015 y se situó en 1.486 millones de euros, lo que supone un 0,13% del PIB, cinco centésimas menos que en el mismo trimestre del año anterior. El objetivo para el conjunto del ejercicio es del 0,7%, por lo que estarían en condiciones de cumplir los límites pactados con Hacienda.

Sólo tres regiones (Madrid, Extremadura y Comunidad Valenciana) tuvieron hasta marzo mayor desvío que en el mismo periodo de 2015, mientras que Navarra y La Rioja registraron menores superávits en comparativa interanual. Todas las demás autonomías redujeron sus desequilibrios en el primer trimestre del ejercicicio.