Pensiones

Los efectos del 10-N: las pensiones suben pero los funcionarios se quedan sin mejora

Sánchez la supeditó a tener «plenas funciones». El socialista acometerá la mejora de las pensiones por la vía del decreto ley

Una funcionaria de correos entrega un paquete con votos a la presidenta de una mesa el pasado domingo
Una funcionaria de correos entrega un paquete con votos a la presidenta de una mesa el pasado domingolarazon

Sánchez la supeditó a tener «plenas funciones». El socialista acometerá la mejora de las pensiones por la vía del decreto ley.

Ad infinitum. Así se puede prolongar la espera de los funcionarios para ver materializada la subida de sus salarios. Siendo todavía presidente del Gobierno Mariano Rajoy, el Ejecutivo y los sindicatos llegaron a un acuerdo para incrementar sus sueldos el 2% el año próximo, subida a la que se sumaría un aumento adicional del 0,3% proveniente de fondos adicionales y otro del 0,55% en función del déficit. A estas mejoras se sumaría un alza adicional que depende del crecimiento económico de este ejercicio y que oscila entre el 0,2% (si la economía crece el 2,1%) y el 1% (si avanza el 2,5% o más).

Pero el acuerdo es, de momento, un mero papel firmado de imposible ejecución. Imposible porque la aritmética parlamentaria salida de las elecciones generales del pasado domingo lo convierte en este momento en inviable. A pesar del acuerdo, el pasado 8 de octubre, ya en plena precampaña electoral, el Gobierno de Pedro Sánchez remitió una carta a los representantes de CC OO, UGT y CSIF en la que les aseguraba que, aunque estaba «firmemente comprometido con el cumplimiento de las condiciones retributivas pactadas con los sindicatos», no iba a cumplir con ellas salvo que tuviera un gobierno «con plenas funciones».

En sus sondeos internos, los socialistas contaban con estar más cerca de los 150 diputados que de los 120 que lograron el domingo. Su retroceso electoral complica todavía más sus posibilidades de formar gobierno y de ejecutar la subida salarial para los funcionarios a partir del próximo 1 de enero. La carta gubernamental, firmada por Iván Redondo, principal asesor de Pedro Sánchez, aseguraba que es «consciente del esfuerzo realizado por los empleados públicos en los últimos años al mantener su compromiso en un contexto de restricciones presupuestarias y de personal». Pero, con todo y con eso, no les garantizaba la subida salarial para el 1 de enero aunque ganara las elecciones, salvo que lo hiciera por mayoría absoluta, cosa que no ha sucedido.

La misiva fue la respuesta a la petición que realizaron los funcionarios al Gobierno de que siguiera la vía de las pensiones para asegurar su subida salarial el 1 de enero. Los socialistas, ya en plena precampaña, anunciaron que, si ganaban las elecciones, subirían las pensiones con independencia del número de escaños que obtuvieran. En el caso de no lograr mayoría absoluta, como así ha sido, se comprometieron a incrementar las pagas mediante la aprobación de un real decreto ley el próximo mes de diciembre.

En los planes económicos remitidos a Bruselas, el Ejecutivo de Sánchez se ha comprometido a incrementar las pensiones el año próximo el 0,9%, lo que se traducirá, de media, en un incremento de apenas 9 euros. Según la documentación remitida a la Comisión Europea, el coste de estas revalorizaciones será de 1.404 millones de euros. La factura mensual de las pensiones ya roza los 10.000 millones de euros, según los últimos datos de la Seguridad Social.