Valls dice que en Francia «solo existe una nación», frente a las demandas corsas

El primer ministro francés, Manuel Valls, aseguró hoy que en Francia «solo existe una nación», y consideró que la pertenencia de Córcega a la República francesa «no es negociable ni lo será nunca», tras la histórica victoria de los nacionalistas corsos en las elecciones regionales.

El primer ministro francés, Manuel Valls, aseguró hoy que en Francia "solo existe una nación", y consideró que la pertenencia de Córcega a la República francesa "no es negociable ni lo será nunca", tras la histórica victoria de los nacionalistas corsos en las elecciones regionales.

En una entrevista hoy con el diario "Le Parisien/Aujourd'hui en France", Valls dijo que no pide a nadie renunciar a su propia identidad, pero recordó que "no puede haber lugar en el debate para todo aquello que haría salir a Córcega de Francia".

En esa misma línea, agregó que el Estado "no retrocederá nunca"en la isla, escenario los últimos días de tensiones xenófobas con el telón de fondo del primer triunfo nacionalista en las regionales.

Para Valls, Córcega "no es una zona sin ley"después de que en Nochebuena un grupo de jóvenes tendiese una emboscada a bomberos que habían acudido a apagar un fuego, lo que a su vez generó una manifestación popular que acabó con proclamas antimusulmanas y el incendio de una mezquita.

En la entrevista, Valls se mostró contrario a la cooficialidad del corso en Francia -"solo hay una lengua oficial, el francés"-, aunque explicó que el país ya lo reconoce y lo enseña en la escuela pública.

También negó que en Francia haya "presos políticos", como argumentan ciertos sectores nacionalistas corsos sobre los independentistas condenados por terrorismo, y cerró la puerta de manera tajante a una eventual amnistía para estos.

"Nadie está detenido por sus opiniones o sus compromisos. Si hay personas que han cometido crímenes, matado a gente o asesinado a un prefecto, su lugar está en la cárcel después de que se haya hecho justicia", dijo.

Sin embargo, abogó por continuar la descentralización de ciertas competencias, especialmente económicas y agrícolas, y por mantener un diálogo constructivo con el recién elegido presidente de la región corsa, el nacionalista Gilles Simeoni.

El ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, viajó hoy a Ajaccio, la capital corsa, para mostrar su apoyo a los funcionarios públicos agredidos y para visitar el lugar de culto que fue atacado por descontrolados.

En declaraciones allí a la prensa, sostuvo que "no hay lugar en Córcega ni para la violencia ni para el racismo", ya que esa es "la voluntad de sus habitantes".

Cazeneuve se reunió con vecinos del popular barrio de Jardins de l'Empereur, donde tuvieron lugar las tensiones xenófobas, en las que se profirieron gritos de "Arabi fora"("Fuera los árabes", en corso).

El ministro expresó su "reprobación mas firme frente a quienes han cometido actos antimusulmanes, que no se corresponden a la cultura de Córcega", al tiempo que aseguró que empleará toda su fuerza en que los autores de los hechos sean identificados y detenidos.

Además, destacó los avances en la lucha contra la inseguridad callejera en la isla a lo largo de los tres años de presidencia de François Hollande.

Ayer, la justicia francesa imputó a dos jóvenes de 19 y 18 años por su supuesta implicación en los incidentes que generaron como respuesta las manifestaciones xenófobas. Efe