Universidad

Blázquez llama a la responsabilidad de los políticos para salir de una larga encrucijada

El cardenal inaugura el curso académico de la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA).

El cardenal arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, inaugura el cuso de la UPSA junto su rectora, Miriam Cortés.
El cardenal arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, inaugura el cuso de la UPSA junto su rectora, Miriam Cortés.larazon

El cardenal inaugura el curso académico de la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA).

La situación política actual por la que atraviesa España desde hace casi un año es algo que preocupa también a la Iglesia, aunque como deja claro Ricardo Blázquez, «ésta no entra en cuestiones políticas». Si bien, el cardenal arzobispo de Valladolid, que ayer inauguraba el nuevo curso académico de la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA), aprovechaba las preguntas de los periodistas momentos antes de este acto, para advertir de la «fragilidad» de las instituciones, y apelar a la responsabilidad de los políticos para que puedan aclarar pronto el panorama político y, de esta forma, salir de una encrucijada que, según el prelado, «dura ya demasiado tiempo» en nuestro país.

Monseñor Blázquez hacía suyas unas palabras del papa Francisco, en las que sostenía que la Iglesia no está para entrometerse en temas político sino para promover una cultura de paz, concordia y reconciliación, y pedía a todos los que tengan que contribuir a salir del atasco político actual, que estén unidos y dejen de criticarse por todo los unos a los otros.

También tenía palabras hacia la situación política actual la rectora de la UPSA, Miriam Cortés Diéguez, preocupada por las consecuencias que puede tener para la comunidad universitaria. Al respecto, advertía de que tanto tiempo de inestabilidad puede afectar al funcionamiento de las universidades, pero especialmente a los alumnos que necesitan de una beca para continuar estudiando.

Ya en clave educativa, el presidente de los obispos españoles se mostraba también optimista y lanzaba un mensaje de esperanza ante el nuevo curso recién comenzado. Blázquez invocaba al Espíritu Santo como herramienta en la que los estudiantes pueden apoyarse para hacer frente a sus ofuscaciones y tratar de ser libres para buscar la verdad «sin intereses torcidos». Igualmente, el cardenal mostraba su preocupación por el miedo y la autocensura que ha detectado en la sociedad española, también entre los feligreses, al hecho de nombrar la palabra Dios, y por ello demandaba una cultura «que le nombre» porque, insistía, «pertenece a la cultura, la historia y la fe».

Por su parte, la rectora de la UPSA citaba a la responsabilidad de reforzar los estados de derecho y abanderar la lucha por los derechos humanos, como algunos de los retos que debe asumir la universidad actual en un contexto social que, según decía, «atraviesa una profunda crisis antropológica y de identidad». Asimismo, Miriam Cortés lanzaba un mensaje de ánimo a los alumnos y avanzaba que la creación de un campos virtual es uno de los proyectos de futuro en los que están trabajando en la UPSA.