Agricultura

La Junta regula los nuevos viñedos para producir más vinos de calidad

La nueva normativa que se publica hoy en el Bocyl simplifica trámites y da más libertad de actuación

Imagen de unos viñedos de la Denominación de Origen de El Bierzo
Imagen de unos viñedos de la Denominación de Origen de El Bierzolarazon

Con el objetivo de garantizar un crecimiento sostenible y, sobre todo, con el reto de producir más vinos de calidad, Castilla y León regula las autorizaciones de nuevos viñedos, adaptándolos a la normativa de la Unión Europea y las disposiciones del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. El Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) publica hoy la orden que está llamada a dar un nuevo impulso al potencial de producción vitícola en la Comunidad, después de que desapareciera el sistema de derechos de plantación para convertirse en un régimen de autorizaciones.

La nueva normativa da mayor libertad de actuaciones y simplifica la tramitación, aunque mantiene la prohibición de plantar viñedos hasta 2030 excepto en tres casos: la transformación de los derechos vigentes hasta 2020 en autorizaciones de plantación; el arranque de viñedo viejo propio para lograr el permiso de replantación; y la obtención de nuevas licencias mediante las concesiones que otorga el Ministerio. La principal prioridad para lograr la autorización de nueva plantación es ser joven agricultor instalado pero sin tener viñedo inscrito a su nombre en los diferentes Registros Vitícolas de España. Con este sistema, se evitarán los numerosos trámites burocráticos que conllevaba la utilización de los derechos ya que desaparecen las transferencias de estos entre viticultores. Este procedimiento suponía tramitar cerca de 1.400 expedientes anuales en la Comunidad y un coste adicional para el viticultor. La normativa tampoco interferirá en las recomendaciones de las organizaciones profesionales reconocidas, entre ellas las denominaciones de origen e indicaciones geográficas protegidas, dos de los sellos de calidad que amparan la producción de vino en España. Los gestores de estos marchamos podrán establecer restricciones en sus respectivas zonas para garantizar la calidad y comercialización de sus caldos.

En cuanto a la simplificación de los trámites administrativos para gestionar los permisos, se hará cargo de los mismos la sección vitícola del Registro de Explotaciones de Castilla y León . Se reducirán de seis a tres meses los plazos para la resolución de los expedientes de replantación de viñedo y transformación de los derechos. Actualmente, Castilla y León suma 75.335 hectáreas de viñedos pertenecientes a unos 60.000 viticultores, de las cuales el 86 por ciento está amparada bajo alguna denominación.