Miami

Dudan de la eficacia del cloro en las aguas residuales

En primer término, una planta de aguas residuales en Miami
En primer término, una planta de aguas residuales en Miamilarazon

El cloro, un desinfectante de uso común en la mayoría de las plantas de tratamiento de aguas residuales, puede estar fallando a la hora de eliminar por completo los productos farmacéuticos de los residuos, de forma que trazas de estas sustancias se liberan desde las plantas a las vías fluviales de Estados Unidos. Ahora, científicos informan de estudios preliminares que muestran que el tratamiento con cloro puede estimular la formación de nuevos antibióticos desconocidos que también podrían entrar en el medio ambiente, contribuyendo al creciente problema de la resistencia a los antibióticos, informa Europa Press.

La investigación, cuyos resultados se publican en la 249 Reunión y Exposición Nacional de la Sociedad Americana de Química (ACS, por sus siglas en inglés), sugiere que es necesaria una nueva evaluación de las prácticas de tratamiento de aguas residuales y de desinfección. «Los productos farmacéuticos que quedan en el medio ambiente pueden dañar la vida acuática, reaccionando lentamente en el medio silvestre e interrumpiendo los sistemas hormonales de las especies», señala Olya Keen, de la Universidad de Carolina del Norte, en Charlotte, Estados Unidos.

Esta experta advierte que el aumento de la exposición a antibióticos, incluso en niveles bajos en el medio ambiente, puede conducir al desarrollo de microbios resistentes a los antibióticos y un debilitamiento general de las capacidades de los antibióticos «para combatir las infecciones bacterianas en los seres humanos».

«Las aguas residuales tratadas es una de las principales fuentes de productos farmacéuticos y antibióticos en el medio ambiente --afirma Keen--. Las instalaciones de tratamiento de aguas residuales no fueron diseñadas para eliminar estos fármacos. Las moléculas son típicamente muy estables y no fácilmente se biodegradables. En cambio, la mayoría pasa a través de la instalación de tratamiento y al medio acuático».

Pero además de no eliminar todos los medicamentos de las aguas residuales, las instalaciones de tratamiento de aguas residuales que emplean cloro pueden tener las consecuencias no deseadas de fomentar la formación de otros antibióticos en el agua liberada. Keen y otros miembros de su equipo realizaron varios experimentos de laboratorio y vieron que la exposición de la doxiciclina, un antibiótico común, al cloro en las aguas residuales aumenta las propiedades antibióticas de sus muestras.

«Sorprendentemente, se detectó que los productos que se forman en la muestra de laboratorio fueron antibióticos, incluso más fuertes que la doxiciclina, el compuesto de partida», añade. Keen y su equipo aún no han identificado todas las propiedades de estos «productos de transformación», por lo que la investigación está en marcha. Ella señala que estos compuestos podrían llegar a ser los antibióticos no identificados previamente.

Keen explica que la mejor solución puede ser disminuir la cantidad de estos medicamentos que llegan a una planta de tratamiento en primer lugar, pero, actualmente, la eliminación de productos farmacéuticos no está regulada. Así, esta investigadora insta a un mayor énfasis en la recolección e incineración de productos farmacéuticos caducados, en lugar de tirarlos por el desag~e o dejarlos en la basura, lo que puede llevar a exposiciones ambientales dañinas.

Además, esta investigación tiene aplicaciones para los sistemas de tratamiento de agua potable, la mayoría de los cuales también utiliza el cloro como desinfectante, según esta experta. Para purificar el agua potable, el cloro debe permanecer en el sistema de tuberías de distribución durante horas, bloqueando el crecimiento de microbios, pero esto también proporciona tiempo suficiente para que el cloro interactúe con los productos farmacéuticos que pueden estar en el agua, fomentando el desarrollo de nuevos compuestos antibióticos.

Europa Press