Alitas de pollo, manzana y mahonesa de aguacate

Una verdadera delicia. Este es el resultado final de esta sencilla receta.

El pollo es una carne blanca, nutritiva y que suele gustar a todo el mundo. En este caso, cocino unas alitas, una parte especialmente atractiva del pollo. A los niños les encanta y, también, a los mayores. Son muy sabrosas y económicas.

La receta de hoy no tiene mucho secreto, un marinado que potencie sabores y los acompañamientos, diferentes, que le dan chispa a las alitas.

La versatilidad del pollo hace que éste tenga una muy buena aplicación en cualquier cocina del mundo, en los recetarios antiguos o en la cocina más moderna.

Las alitas se comen con las manos y después te chupas los dedos. Como si estuvieras en la Edad Media.

Ingredientes (4 personas)

10 alitas enteras de pollo

2 manzanas tipo Golden

1 aguacate maduro

2 cucharadas soperas (c.s.) de mahonesa

Aceite de oliva

Sal

Pimienta recién molida

El zumo de 2 limones

Elaboración

Alitas crujientes

Precalentar el horno a 180º.

Partir las alitas para que queden dos partes.

Retirar los pelos que puedan tener.

Colocar las alitas en una bandeja. Marinar con el zumo de limón y un buen chorro de aceite de oliva. Salpimentar.

Dejar marinar durante unos 20 minutos.

Hornear, más o menos, unos 35/45 minutos. Dependerá del tamaño de las alitas y de la fuerza del horno.

Dados de manzana salteada

Lavar bien las manzanas. Cortar en dados de 1 cm. (más menos).

Saltear la manzana cortada en una sartén con aceite de oliva. Dale caña al fuego, que esté muy fuerte. Necesitarás unos 7/8 minutos para que la manzana quede en su punto.

Mahonesa de aguacate

Retirar la pulpa del aguacate.

Colocar la mahonesa en un vaso mezclador junto con el aguacate cortado a trozos.

Añadir un chorro de aceite de oliva.

Sazonar.

Triturar hasta lograr una masa con un punto de consistencia.

Servir las alitas crujientes con los dados de manzana y la mahonesa de aguacate.

También la acompañaremos, hoy, con esta pequeña ensalada.

Ensalada de pepino y calabacín

1 pepino

1 calabacín

Unos tomates cherry

Aceite de oliva

Sal

Lavar bien todas las verduras.

Cortar los tomates cherrys por la mitad o a cuartos.

Cortar el calabacín y el pepino en forma de espagueti.

Colocar en un plato como ves en la foto.

Aliñar con aceite de oliva.

Sazonar.

Mordisquitos

Retira la punta final de cada alita. Puedes usarla para añadir a algún caldo que hagas o vayas a hacer. Congélalas y las tendrás cuando las necesites. Aquí no se tira nada.

Para quitar los pelos de las alitas puedes hacerlo de dos formas; Una es quemándolas con un soplete y otra opción será la de ir retirando los pelos uno a uno con unas pinzas o con la punta de un cuchillo.

No te cortes con la pimienta. Que las alitas tengan sabor y aroma a ella.

Coloca las alitas en la bandeja de horno con la piel hacia arriba. De esta manera te quedarán muy crujientes. Esta es una textura muy agradable. Y, además, si sigues la receta como te comento, la carne del interior te quedará muy jugosa.

El indicativo de que las alitas están en su punto te lo dará el color dorado de la piel (no quemado). Veo muchas fotos por ahí de alitas con zonas negras, eso es quemado, no dorado, y no es agradable al paladar, aparte de tóxico.

Yo no pelo la manzana, me gusta el toque más duro de la piel. Por supuesto, si las quieres pelar, no va a ocurrir ningún desastre.

Hay muchas recetas en las que se indica que la manzana la saltees con mantequilla y azúcar para caramelizarla. Personalmente, prefiero saltearla solo con aceite de oliva y sin añadir azúcar. La manzana de por sí ya tiene un dulzor que, para mí, es suficiente.

Para elaborar la mahonesa de aguacate, he utilizado una mahonesa industrial. Claro que puedes, si te apetece, sustituirla por una mahonesa casera.

En este caso, el acompañamiento de las alitas son la manzana y la mahonesa de aguacate. Puedes añadir cualquier otra salsa que te guste, por ejemplo alguna con un toque picante.

El toque refrescante lo pongo con la ensalada. Para aliñarla puedes usar un aceite de sésamo que le va muy bien, o el aliño que más te apetezca. En la foto verás que no está aliñada para que uses tu imaginación. Para conseguir el corte “estilo espagueti” debes utilizar un aparato especial para ello. No es alta tecnología, es muy sencillo y barato. El resultado es súper.

Acompaña esta receta, además, con un buen pan, el que más te guste. Comerás de fábula. Sencillo, nutritivo y apetitoso.

Como siempre, no te olvides de divertirte cocinando. Si es en compañía, mucho mejor.