Un brindis por José Luis Alcaine

En el festival de Locarno hay muchos homenajes con distintos nombres, e incluso alguno con patrocinio de una marca de champán.

Tributo a Nastassja Kinski en la Piazza Grande de Locarno y proyección hoy mismo de una película titulada «Lola Pater», de Nadir Moknèche. Es una historia que, una vez superada la sorpresa inicial, naufraga miserablemente, ya que, al morir su madre, el protagonista va a en busca de un padre al que no ve hace desde hace mucho, aunque resulta que este se ha convertido en «Lola»; es decir, se ha cambiado sexo.

En este festival hay muchos homenajes con distintos nombres, e incluso alguno con patrocinio de una marca de champán. Se homenajeará a Todd Haynes, a Jean-Marie Straub y a Mathieu Kassovitz, pero también a uno magnífico, un grande de verdad: José Luis Alcaine. Continuamos con los premios que se van a otorgar, uno en memoria de George A. Romero, otro a Adrien Brody y muchos más sin importancia, el caso es crear espectáculo

con el cine.

Muchas secciones, incluso una retrospectiva a un referente: Jacques Tourneur. Las retrospectivas ya no se hacen en casi ningún festival porque se pueden ver en televisión o comprarlas en blu-ray, DVD, etc. Si se restaurara el negativo en 35 mm., si se tiraran copias nuevas y se proyectarán en ese formato sería algo interesante, pero hacer proyecciones en «pendrive», en Blu-ray, en DVD o en lo que sea, es como verla un poco más grande que en casa.

Lo más interesante del certamen es lo que se proyecta en la Piazza Grande, que son películas con tendencia «comercial», es un premio que da el público y un jurado que también premia este «concurso internacional». También hay que destacar en la programación de las películas que hay un cierto caos.