0-1: Obús de Suárez

Y a la tercera, el Barcelona pudo con el Athletic. El cambio de la Supercopa a la Liga dio lugar a un partido similar a los vistos hace apenas una semana, pero con un resultado diferente. Se pareció en la intensidad del equipo local, en los problemas del Barcelona en el movimiento del balón o en que Messi estuvo discreto. Esta vez Leo incluso tuvo la oportunidad de abrir el marcador con un penalti muy discutido de Elustondo a Luis Suárez que lanzó flojo. Iraizoz le adivinó la intención y mandó la pelota fuera. No perdonó, en cambio, el uruguayo en la ocasión más clara que tuvo, al comienzo de la segunda parte. Vio Rakitic la carrera de Jordi Alba por la izquierda, cambió la orientación del juego, el lateral centró de maravilla y Suárez, demasiado solo, enganchó la pelota con la zurda y casi rompió la red. El «9» del Barça se ha convertido en una pieza importantísima del engranaje del equipo, por los goles y por el trabajo: presiona, es un incordio, molesta, recibe de espaldas y no hay quien le mueva... Y el de ayer era un encuentro muy de eso: de pelea. No queda más remedio cuando enfrente está el Athletic, que intentó repetir la fórmula del éxito de la Supercopa: presión arriba en un primer momento y si lograban salir de ella, repliegue, todos juntos y a ayudase para evitar que Messi y compañía maniobraran. Durante muchos minutos le salió bien: se atascaba el Barcelona, sólo iluminado cuando Iniesta entraba en juego, y Bravo, el portero, se convirtió en una especie de «quarterback», lanzando balones en largo. La pelota estaba más por el aire que por el suelo de lo que los azulgrana deseaban.

Las propuestas de uno y de otro se anulaban. No perdía balones en zona peligrosa el Barça, pero tampoco tenía profundidad, a la espera de la inspiración de Messi. Pero Leo se volvió a encontrar con una muralla delante. Balenziaga le tenía atado y cuando se iba al centro siempre encontraba uno o varios jugadores vestidos de rojo y blanco para impedirle moverse. Sólo al final se le vio, después de que Suárez ya había movido el marcador y el Athletic se volcó. Quizá le pesó también el penalti fallado a la media hora. Tiró confiado, pensando que iba a engañar a Iraizoz, pero no fue así. Ya son 14 las penas máximas erradas por el «10» con la camiseta del Barcelona, por 49 marcadas. La temporada pasada también desperdició la primera que tuvo.

Sufrió el Barcelona además de en el partido, con los lesionados. Alves fue el primero en caer al estirar en exceso la zona del abductor. Una mala noticia se convirtió en una buena: salió Sergi Roberto y rindió a un gran nivel en un puesto en el que ya había probado en pretemporada. Tendrá tiempo para seguir mejorando porque el Barcelona se ha quedado sin defensas derechos. Después fue Busquets quien abandonó el campo en camilla y Luis Enrique tuvo que recomponer el equipo: salió Bartra para colocarse al lado de Vermaelen, el central titular por la ausencia del sancionado Piqué. Mascherano se fue al centro. En el Athletic fue Balenziaga el lesionado.

Apretó el conjunto local, poniéndole corazón. Se dedicó a colgar balones al área y hasta en dos ocasiones, con Eraso como finalizador, se acercó al gol. Pero terminó cansado. Había hecho un gran esfuerzo y viene de un calendario cargado. El campeón pasó un mal rato, pero ganó.

- Ficha técnica:

0 - Athletic Club: Iraizoz; De Marcos, Elustondo, Laporte, Balenziaga (Bóveda, m.50); Mikel Rico (Gurpegui, m.62), Beñat; Susaeta, Eraso, Sabin Merino (Ibai Gómez, m.62); y Aduriz.

1 - FC Barcelona: Bravo; Dani Alves (Sergi Roberto, m.19), Bartra, Mascherano, Jordi Alba; Sergio Busquets (Bartra, m.68), Rakitic, Iniesta; Messi, Luis Suárez y Rafinha (Sandro, m.82).

Goles: 0-1, min.54: Luis Suárez.

Árbitro: Del Cerro Grande (Comité madrileño). Mostró tarjeta amarilla a los locales Elustodo (34'), Eraso (36), Ibai (70) y a los visitantes Rakitic (44), Vermaelen (64).

Incidencias: Partido correspondiente a la primera jornada de la Liga BBVA 2015-2016, disputado en un San Mamés cerca del lleno con 45.000 espectadores. En los previos del partido, la plantilla rojiblanca ofreció a su afición desde el centro del campo el título de la Superopa, cuyo trofeo portaba el capitán, Carlos Gurpegui. Además, el campeón manomanista, la especialidad más importante de la Pelota Vasca, el vizcaíno Mikel Urrutikoetxea, de Zaratamo, hizo el saque de honor del encuentro.

EFE