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España registrará la mayor caída del paro en la OCDE hasta finales de 2015

Angel Gurría, secretario general de la OCDE.
Angel Gurría, secretario general de la OCDE.larazon

España es el país de la OCDE donde más disminuirá el paro en términos relativos hasta finales de 2015, aunque en esa fecha, con un 23,9 %, seguirá siendo el que tenga la segunda tasa de desempleo más elevada tras la de Grecia.

España es el país de la OCDE donde más disminuirá el paro en términos relativos hasta finales de 2015, aunque en esa fecha, con un 23,9 %, seguirá siendo el que tenga la segunda tasa de desempleo más elevada tras la de Grecia.

El paro en España disminuirá en 2,2 puntos porcentuales entre el último trimestre de 2013 y el último de 2015, según las proyecciones publicadas hoy por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en su informe anual sobre el empleo.

Es una rebaja superior a los 2,1 puntos de Irlanda, que se sitúa en segundo lugar, pero en el caso irlandés la tasa de paro se quedará en el 9,9 % al terminar el año próximo.

El recorte en esos dos años también será significativo en Estados Unidos (1,1 puntos al 5,9 %) y en Eslovaquia (1,1 puntos al 13 %).

El porcentaje de desempleados en España, no obstante, triplicará con creces a finales de 2015 el 7,1 % de media en la OCDE y duplicará ampliamente el 11,2 % que se espera para la zona euro en su conjunto.

Además, la brecha con respecto al 8,7 % de desempleo que se constataba en el último trimestre de 2007, antes de que la crisis hiciera sentir sus efectos (15,2 puntos porcentuales), continuará siendo la segunda más alta después de la de Grecia (18,4 puntos), y muy por delante del tercer país en esa clasificación, Portugal (6,9 puntos).

Por si fuera poco, a finales de 2015 en España sólo un 42,9 % de la población mayor de 15 años tendrá un empleo, lo que significará un diferencial en la tasa de ocupación de 10,6 puntos porcentuales respecto a la que había al terminar 2007.

Ningún otro miembro del "Club de los países desarrollados"tendrá un diferencial tan elevado (Grecia viene detrás con 9,3 puntos y Portugal con 7 puntos) y en sólo dos la tasa de ocupación será inferior: Grecia con un 38,3 % e Italia con un 42,1 %.

El ajuste funciona

El ajuste que se ha llevado a cabo en España para afrontar sus problemas de competitividad derivados de un modelo centrado en la construcción, y que entre otras cosas ha supuesto recortes salariales, "está funcionando"pero los resultados significativos, sobre todo en empleo, tardarán años.

Éste es el diagnóstico hecho hoy por el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Ángel Gurría, que consideró "una buena noticia"y "alentadora"el dato del desempleo de agosto, ya que "fue el mejor agosto en 20 años, lo que confirma una inflexión"en el mercado de trabajo.

En declaraciones tras la presentación del informe anual de la OCDE sobre el empleo, Gurría insistió en que "el ajuste"laboral, junto a las otras reformas estructurales que se han puesto en marcha "está funcionando", pero recordó que ese proceso obligado por la crisis "empezó tarde y, por tanto, tuvo que hacerse con mayor urgencia".

Además, -argumentó- España no sólo tiene que afrontar "la normalización"de la situación macroeconómica, sino el "cambio del modelo económico"que consiste en "pasar del ladrillo a la neurona", de un sistema productivo focalizado en la construcción a otro en el que se tendrán que explotar las capacidades intelectuales.

Y ahí el problema es que muchos de los trabajadores de la construcción que se han quedado en paro -en muchos casos inmigrantes que llegaron cuando había demanda de mano de obra en ese sector- no tienen las cualificaciones necesarias para los puestos de trabajo emergentes y necesitan reciclaje, añadió.

Por todo eso, Gurría previno de que "tienen que pasar varios años de un crecimiento sostenido y vigoroso"para que haya resultados, en particular en el empleo, y admitió que "el desafío es muy serio", a imagen del reto de modificar la estructura productiva.

Preguntado sobre si España es uno de los países europeos en los que la política de bajar salarios ha llegado al límite para mejorar la competitividad -como señala la OCDE en su informe-, el secretario general insistió en no dar nombres.

Su línea es que "hay un límite porque llega un momento en que la caída de salarios pasa a ser un problema en sí mismo"puesto que "quita músculo a la recuperación"y "en algunos países hemos llegado a un punto en que esta solución ha llegado al límite"y "continuar puede ser contraproducente".

Tampoco quiso entrar a la cuestión de si se ha abaratado demasiado el despido, al señalar que de lo que se trata es de aumentar la productividad para crear empleos que así van a tener un nivel de remuneración superior.

En el estudio, la organización recomienda a España que se equiparen los costes de despido para los diferentes tipos de contrato, y sugiere reducir las indemnizaciones para los fijos o subsidiar una parte con la reintroducción de la aportación de Fogasa o con un sistema equivalente.

Sobre el problema de los bajos salarios, la OCDE estima que "subsidios al empleo y salarios mínimos pueden garantizar unos ingresos adecuados y limitar el impacto del ajuste económico para esos trabajadores y reducir así su riesgo de pobreza".

España es, de los 34 miembros de la organización, el país con la proporción más alta de contratos temporales, una tendencia que ha aumentado desde el inicio de la crisis.

También es uno de los que se destacan por las caídas de los salarios en términos reales, en concreto un 1,8 % anual desde 2009, "un ajuste mucho más importante que en el total de la zona euro"que "ha ayudado a España a restaurar la competitividad de su economía".