El Rey reclama la España que «nos une y vincula como nación»

Felipe VI, que hoy cumple sus primeros 1.000 días de reinado, se ha comprometido a continuar al servicio de todos los españoles “aprendiendo con humildad”, porque, “aunque uno esté en la cúspide del Estado, hay que mantener los pies bien pegados a la tierra, a la base”.

El día en que Felipe VI cumplió 1.000 días de reinado, el Museo Reina Sofía fue el escenario de reivindicación de valores patrios y reconocimiento hacia aquellas personas que con su nombre posicionan la nación en el mundo llevando un «pedacito de tierra» por el mundo, que dijo la bailaora Sara Baras, una de las galardonadas. Antes de que comenzara la séptima edición de la entrega de acreditaciones de «Embajadores Honorarios de la Marca España», el Alto Comisionado para la Marca España, Carlos Espinosa de los Monteros, felicitó a los Reyes por su gestión en sus 1.000 días al frente de la Corona desde su proclamación en junio de 2014, recibiendo una sonora ovación por la que Felipe VI se levantó en señal de agradecimiento. Con el discurso previsto en la mano, Don Felipe sorprendió con unas palabras improvisadas, o al menos eso pareció, en las que aseguró no haber reparado en la señalada efeméride. «Como piloto», aseguró, «uno valora mucho las horas de vuelo, pero no sabía que dentro de la función institucional se estilara contar los días». Don Felipe no supo valorar si «son mucho o poco», pero para el Jefe del Estado lo indudable es que «estamos en los inicios y en un compromiso de larga duración, es una carrera larga y queda por delante mucho tiempo». Como declaración de intenciones respecto a su actitud en los años venideros, aseguró: «Sólo puedo prometer continuar con el esfuerzo de estar al servicio de todos los españoles». Porque, en una insólita y muy personal afirmación, destacó que «aunque uno esté en la cúspide del Estado hay que mantener los pies en la tierra y seguir aprendiendo con humildad». Ya dentro de su discurso oficial, las palabras del Monarca sonaron con mayor fuerza al reivindicar, un día después de la condena al ex presidente de la Generalitat, Artur Mas, «la España que a todos nos une y nos vincula como nación». El objetivo de las acreditaciones a los Embajadores Honorarios de la Marca España es señalar a quienes con su ejemplar trayectoria profesional han contribuido al fortalecimiento de una imagen positiva de España en el exterior. Don Felipe destacó el «orgullo» que le produce la entrega de los premios, así como lo que «todos juntos, como pueblo, hemos sabido y logrado alcanzar».

Los obsequiados: en la categoría de gestión empresarial, Francisco Martínez Cosentino; deportes, Andrés Iniesta; turismo y gastronomía, Gabriel Escarrer; cultura, Sara Baras; relaciones institucionales, Real Instituto Elcano; acción social, «La Caixa», y Ciencia e Innovación, Juan Ignacio Cirac. «este grupo de ciudadanos y de instituciones que hoy reconocemos», aseguró Don Felipe, «nos muestra el camino de la excelencia que es el que, juntos, debemos recorrer los españoles con la mira puesta siempre en un futuro mejor para todos».

El Monarca puso especial énfasis en la imagen de nuestro país que relanzan al exterior, ya que uno de los principales objetivos de Don Felipe durante este reinado es la proyección de nuestro país fuera de nuestras fronteras tras el bloqueo político, y apostar por los valores de integración europeos. En este escenario, reservó un mensaje para cada uno y razonó su elección: de Martínez-Cosentino destacó haber «edificado un grupo empresarial líder en el mundo a partir de un pequeño negocio familiar», de Sara Baras, no sólo su éxito, si no también su «esfuerzo, sacrificio, ganas de aprender y arriesgar». Hacia «La Caixa» tuvo palabras de agradecimiento por su «solidaridad», mientras que de Iniesta destacó «ser uno de los grandes del mundo» porque «representa el valor del talento». De Cirac, destacó su capacidad para liderar en la actualidad «un campo tan complejo como la teoría cuántica de la información», y del Instituto Elcano «sus exhaustivos análisis globales».