Delito fiscal

Horrach descartó el riesgo de fuga de Urdangarín por su «arraigo familiar»

El fiscal de «Nóos», que esta semana pedirá medidas cautelares contra el ex duque de Palma tras su condena, rechazó en 2013 que se le retirara el pasaporte, como pedía Manos Limpias.

En la resolución en la que el juez José Castro rechazó retirar el pasaporte a Iñaki Urdangarín el 2 de mayo de 2013 se recogen las alegaciones del fiscal Pedro Horrach rechazando la medida que pedía Manos Limpias
En la resolución en la que el juez José Castro rechazó retirar el pasaporte a Iñaki Urdangarín el 2 de mayo de 2013 se recogen las alegaciones del fiscal Pedro Horrach rechazando la medida que pedía Manos Limpiaslarazon

El fiscal de «Nóos», que esta semana pedirá medidas cautelares contra el ex duque de Palma tras su condena, rechazó en 2013 que se le retirara el pasaporte, como pedía Manos Limpias.

La vista que se celebrará previsiblemente esta misma semana para decidir si Iñaki Urdangarín debe o no entrar en prisión, tras su condena a seis años y tres meses de cárcel en el «caso Nóos» no será la primera vez que el fiscal Pedro Horrach tenga que pronunciarse sobre la adopción de medidas cautelares al ex duque de Palma. Hace ahora casi cuatro años, el fiscal de Anticorrupción ya tuvo que posicionarse, en plena instrucción del procedimiento judicial, respecto a la petición de Manos Limpias de retirar el pasaporte al marido de la Infanta Cristina. En aquella ocasión, la pretensión del colectivo de funcionarios no prosperó, porque el juez José Castro desestimó la solicitud de Manos Limpias, pero en sus alegaciones Horrach dejó claro que no apreciaba riesgo de fuga.

Manos Limpias reclamó la retirada del pasaporte al marido de la Infanta Cristina en un contexto muy determinado: ante la posibilidad, aireada en distintos medios, de que Urdangarín terminase aceptando una oferta de la selección de balonmano de Qatar para incorporarse al equipo técnico del ex seleccionador español Valero Rivera.

El fiscal Anticorrupción del «caso Nóos» –que se inclina ahora por pedir el ingreso en prisión del ex duque de Palma sin esperar a que el Tribunal Supremo resuelva su recurso de casación– puso en aquella ocasión cinco argumentos para oponerse a la adopción de la medida cautelar solicitada. En primer lugar, recordó que, desde que comenzó la instrucción del «caso Nóos» en julio de 2010, no se había adoptado medida alguna contra el ex duque de Palma «al no constatarse la existencia de circunstancias de las que pudiera inferirse la posibilidad de riesgo de sustracción a la acción de la Justicia, interferencias u obstaculizaciones a la investigación o probabilidad de reiteración delictiva».

Ahora, Horrach sigue pensando que no se puede esgrimir un presumible riesgo de fuga para sustentar la petición de ingreso en prisión, por lo que si finalmente solicita esa medida, con o sin fianza, lo hará fundamentándola en la gravedad de las penas aparejadas a su condena.

En segundo lugar, el fiscal Anticorrupción recordaba que el marido de la Infanta siempre había acudido «a los llamamientos judiciales cada vez que ha sido requerido para ello».

A continuación, incidía en el «notorio» arraigo «personal, familiar y social» del ex duque de Palma en España. Igualmente, hacía hincapié en que tenía asignada «de forma permanente escolta policial, lo que supone un plus de garantía respecto a la probabilidad de sustracción a la acción de la Justicia».

Asimismo, Horrach hacía notar que Urdangarín no había notificado al Juzgado de Instrucción número 3 de Palma ningún cambio de domicilio, por lo que la solicitud de Manos Limpias de adoptar medidas cautelares contra él se basaba únicamente «en informaciones periodísticas no contrastadas» (de hecho, no se llegó a trasladar a Qatar).

Más contundente se mostró el juez Castro en la resolución en la que rechazaba la medida. El magistrado valoró que el ex duque de Palma, aun barruntando que podía ser llamado a declarar como imputado en el «caso Nóos», lejos de darse a la fuga, «lo que quizá no le hubiera resultado muy difícil dada su economía y contactos en muy diversos lugares del mundo, compareció en el juzgado en las dos ocasiones en que se le requirió».

Castro señalaba en aquella ocasión que, si verdaderamente Urdangarín tenía intención de trasladarse a vivir a Qatar, había tenido «sobrado tiempo» –desde que se hizo pública la petición de Manos Limpias– de trasladarse a dicho país al no estar obligado más que a comunicarle el cambio de domicilio. Por último, el instructor del «caso Nóos» recalcó los «vínculos familiares muy próximos en España» del esposo de la Infanta –que entonces residía con su familia en Barcelona antes de mudarse a Suiza meses después–, lo que hacía «innecesario» la retirada del pasaporte.