Crisis en Podemos

Iglesias pide a su partido que dejen de «tirarse los trastos»

La Razón
La RazónLa Razón

El incendio en Podemos no logra apagarse. La división interna existente entre las familias del partido sigue siendo más que latente de cara al Vistalegre II, y no parece que de momento haya entendimiento entre las diferentes familias del partido. Así el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, se ha visto obligado a pedir «unidad» entre sus filas.

No es la primera vez que Pablo Iglesias vuelve a llamar la atención a sus dirigentes, y les pide contención ante la rebelión surgida en su partido. Iglesias teme ahora cansar a sus inscritos e inscritas por las continuas «broncas» que se están sucediendo y ahora, de cara al congreso refundacional del partido, trata de que las voces críticas en torno a la dirección del partido se apaciguen y se torne de nuevo un cierre de filas hacia él.

Iglesias riñó delante de los medios ayer a sus dirigentes y sectores del partido por llevar el debate interno de Podemos a los medios, y según defendió es necesario que dejen de «tirarse los trastos a la cabeza» en «los medios». Según prometió ante los periodistas, él no lo va a hacer, y defendió que «hace falta un Podemos unido para que sea un instrumento útil para este país», informa Ep.

Esta «llamada de atención» a los dirigentes se produce un día después de que se verbalizara la primera crítica hacia Iglesias dentro del equipo afín al secretario general. El miércoles, la secretaria de Análisis Político y Social, Carolina Bescansa, reconoció que la consulta sobre Vistalegre del pasado mes de diciembre a los inscritos «había debilitado a Podemos». Además, también denunció la «partida de ping-pong» entre Iglesias e Íñigo Errejón. El líder del partido, que no contestó a las críticas de Bescansa, lanzó una recomendación: «Debemos dejar de mirarnos el ombligo y dejar de hablar en los medios de nosotros mismos».

En plena precampaña electoral de cara a Vistalegre II, Iglesias presionaba también con este llamamiento a Errejón, pidiendo un «Podemos unido», y a tres días escasos de la presentación oficial de los documentos de Podemos, (22 de enero), que deberán ser votados a partir del día 4 de febrero. Es decir, que Iglesias y Errejón tienen un tiempo limitado para llegar a un acuerdo: el 1 de febrero. Entre la presentación de documentos y el inicio de la campaña electoral, el 2 de febrero, hay diez días para que los equipos de «errejonistas» y «pablistas» pacten antes de Vistalegre.