Los «susanistas» piden paso: «Es la auténtica líder del PSOE»

Tras cuatro años encadenando debacles electorales, el PSOE se sacudió el domingo el yugo de la derrota y volvió a vivir una noche electoral de satisfacción y alegría. Para la dirección federal semejante hazaña –la lograda por Susana Díaz en Andalucía– debía atribuirse en clave de partido y no personalista, a pesar de que la presidenta de la Junta haya escondido durante la campaña las siglas del PSOE y haya reducido a la mínima expresión el protagonismo de su secretario general, Pedro Sánchez. El riesgo de aquellos que hacen ahora suyo el triunfo en el sur es que no podrán escapar de su responsabilidad cuando la marca PSOE no supere el 20% en los comicios municipales y autonómicos que están por venir.

La contundente victoria de Díaz, lejos de aplacar los ánimos en el partido, ha reabierto el debate sobre el liderazgo en el PSOE. La lideresa andaluza está ahora más legitimada internamente, si cabe, para asumir las riendas de la formación si el próximo 24-M deviene el desastre. Sánchez, consciente de que el suelo de Ferraz se abre de nuevo bajo sus pies, evitó ayer pronunciarse sobre el recorrido de su candidatura a las primarias y quiso poner el foco en las próximas citas electorales que afronta el partido.

En Ferraz hay preocupación y disgusto por el fortalecimiento de Díaz tras las elecciones. «La tristeza que tenían el domingo era manifiesta», confiesa a LA RAZÓN un partidario de Díaz, que reconoce que miembros del equipo de Sánchez intentaron extender entre los periodistas que cubrieron el cierre de campaña una previsión derrotista del desenlace electoral. Una postura contraria al optimismo que desprendían en público desde la sede federal.

El día después de la victoria electoral, los «susanistas» lo tienen claro: «Díaz se ha convertido en la auténtica líder del PSOE». Reconocen, además, que está legitimada para hacer «lo que quiera» –en alusión a las primarias– y cuentan con que levantará la voz en el Comité Federal del próximo sábado.

«Acertó en el tiempo y en las formas», destacan estas mismas fuentes, sobre la arriesgada apuesta de Díaz de propiciar un adelanto electoral que, según el ex líder del PSM, Tomás Gómez, «le ha hecho ganar un año en Andalucía y ha cambiado el signo del ciclo electoral para los socialistas de toda España».

La Ejecutiva del PSOE se reunió ayer en pleno para valorar los resultados en Andalucía. El líder del partido reivindicó el triunfo socialista en Andalucía como un éxito de partido. «Estoy orgulloso de la victoria de Susana Díaz, un triunfo del socialismo andaluz y del conjunto del socialismo», dijo. El secretario general reconoció hasta en tres ocasiones que la victoria correspondía a la presidenta de la Junta, rebajando la euforia triunfalista que expresó su número dos, César Luena, durante la noche electoral en la que hizo partícipe al «equipo liderado por Pedro Sánchez» del éxito electoral. Esto en público, porque en privado, y según un asistente a la reunión, algunos integrantes de la Ejecutiva intentaron deslucir la victoria de Díaz señalando que había perdido algunos votos respecto al resultado cosechado por José Antonio Griñán en 2012.

Una vez finalizada la reunión, reconocidos «susanistas» reivindicaron claramente ante los medios la autoría de la victoria a la presidenta de la Junta. La ex ministra de Defensa Carme Chacón, en la que algunos ven a la «tapada» de Díaz para las primarias de julio, destacó que ésta «sale reforzada» con una «victoria tan clamorosa» y defendió que «liderazgo es tener las cosas muy claras, acertar y ganar, y eso lo ha tenido muy claro Susana Díaz», dijo.

En la misma línea se manifestó Tomás Gómez. El depuesto líder del PSM –que se vio por primera vez cara a cara con Sánchez desde su destitución– calificó a Díaz de «lideresa con mayúsculas» y señaló que está «reforzada para todo» dentro del partido. También el secretario general del PSOE valenciano, Ximo Puig, puntualizó que el «tanto se lo debe apuntar el socialismo andaluz, Susana Díaz y la ciudadanía andaluza», y destacó que el liderazgo de la presidenta de la Junta es «impresionante».