Otegi inicia la precampaña como candidato a lendakari, pese a la inhabilitación

Al grito de “independencia” fue recibido ayer en el Palacio Euskalduna de Bilbao Arnaldo Otegi, elegido el día anterior candidato a lendakari por las bases de EH Bildu.

Al grito de “independencia” fue recibido ayer en el Palacio Euskalduna de Bilbao Arnaldo Otegi, elegido el día anterior candidato a lendakari por las bases de EH Bildu. La izquierda abertzale ignoró el anuncio realizado horas antes del acto por la fiscal General del Estado, Consuelo Madrigal, de que informará a la Junta Electoral que Otegi no podrá presentarse hasta 2021 como candidato a lendakari, a tenor de la condena de inhabilitación especial para empleo o cargo público que pesa sobre él y otra de inhabilitación para el sufragio pasivo.

La mirada ayer de Arnaldo Otegi y de su partido, EH Bildu, no estuvo, sin embargo, centrada en la Fiscalía general del Estado, sino en su principal rival electoral, Podemos. En el primer acto de precampaña de Otegi desde su designación por las bases de su partido como candidato a lendakari se habló principalmente de movimiento obrero y se dio la palabra, de entre el público, en primer lugar, a un extremeño de setenta y ocho años que había llegado a Bilbao a trabajar en los años sesenta y que había pasado de militar en el Partido Comunista a hacerlo en EHB Bilbu. Tras esa intervención, realizada en castellano, y la de un trabajador de ACB, también en castellano, que reivindicaba la vuelta del País Vasco a la industrialización, Arnaldo Otegi hizo un discurso de puertas abiertas a quienes “han venido de otras tierras del Estado español”.

“En EH Bildu caben todos”, dijo Otegi, abarcando a “comunistas, anarquistas, progresistas, socialdemócratas y cristianos de base”. “En ningún otro lugar se plantea el acceso a la nacionalidad en términos tan sencillos”, recalcó, poniendo como única condición a quien vive y trabaja en el País Vasco el “querer ser vasco” para ser aceptado en “la lucha por la soberanía nacional” y en la “república socialista” a la que aspira la izquierda abertzale.

Con la independencia como objetivo, Otegi intentó recoger los votos que ha perdido el entorno etarra en las últimas elecciones en el País Vasco, votos que han impulsado a Podemos, hablando de “proyectos de mínimos” y de repensar la coyuntura en términos de post-capitalismo. Hubo también una alusión al PNV, señalando que hay quien está satisfecho porque dice que ha cumplido el noventa por ciento de su programa, pero que no puede haber satisfacción cuando se han perdido en Vizcaya setenta y cinco mil puestos de trabajo industrial, que repercuten cada uno en entre tres y cuatro empleos.

El recién designado candidato a lendakari por EH Bildu, pese a la inhabilitación, ha imitado también el estilo de Podemos al presentarse con camisa blanca y vaqueros, cuando la imagen de la izquierda abertzale y de Arnaldo Otegi en particular está más vinculada a las camisetas negras. Había ayer en el Palacio Euskalduna de Bilbao menos jóvenes y más trabajadores de la margen izquierda de la Ría del Nervión cuya imagen correspondía más con los mítines socialistas en el País Vasco.