Caso Gürtel

Crespo y «El Bigotes» negocian rebajar sus penas a cambio de una confesión

El juicio se aplaza hasta mañana, mientras sus defensas ultiman un acuerdo con la Fiscalía.

(De izda a dcha) Álvaro Pérez Alonso 'El Bigotes', responsable de la empresa Orange Market; Pablo Crespo, número dos de la trama Gürtel, y Francisco Correa, empresario y 'cabecilla' de la trama
(De izda a dcha) Álvaro Pérez Alonso 'El Bigotes', responsable de la empresa Orange Market; Pablo Crespo, número dos de la trama Gürtel, y Francisco Correa, empresario y 'cabecilla' de la tramalarazon

El juicio se aplaza hasta mañana, mientras sus defensas ultiman un acuerdo con la Fiscalía.

Las defensas de Pablo Crepso y de Álvaro Pérez, «El Bigotes», se entrevistarán hoy con sus clientes en prisión para tratar de «dibujarles el nuevo escenario» que se abrió el martes cuando Francisco Correa señaló –por referencias de Crespo–, a Ricardo Costa como la persona que les indicó que debían cobrar a los empresarios.

Tanto Crespo como Pérez buscarán también un acuerdo con la Fiscalía para tratar de rebajar sus condenas y se prevé que repetirán la acusación que el pasado martes hizo Correa.

Fuentes consultadas apuntaron a que la Fiscalía podría no conformarse solamente con uno de los procesados como posible autor de los ilícitos, sino que buscará que la responsabilidad de los tres delitos electorales y de la falsedad, ataña a más procesados: «La Fiscalía va a pedir más cabezas», comentaba un abogado tras la suspensión de la vista.

Durante la mañana de ayer, los letrados Miguel Durán y Javier Vasallo, defesores respectivamente de Pablo Crespo y de Álvaro Pérez, se entrevistaron con el juez Vázquez Honrubia, y con la fiscal Míriam Segura, y a continuación bajaron a los calabozos de la Audiencia para reunirse con sus clientes, que ya habían sido trasladados al edificio de San Fernando de Henares desde prisión.

Tras varias entradas y salidas de la sala, con sus respectivas visitas a los calabozos, se convocó la sesión en la que, según el guión pactado minutos antes, Miguel Durán pidió la suspensión de la vista para preparar la declaración de su cliente en virtud del artículo 746 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal en lo relativo a «revelaciones o retractaciones inesperadas que produzcan alteraciones sustanciales en los juicios». Vasallo se adhirió a la petición.

El juez, en este punto, quiso dejar claro que si suspendía era para obtener algo, y preguntó explícitamente al abogado de Crespo si su cliente «aportará hechos relevantes a la luz de lo que dijo ayer el señor Correa», a lo que el defensor contestó que sí. Su señoría apuntó que si esa suspensión podía contribuir a encontrar la verdad de la causa, merecía la pena.

La Fiscalía y la Abogacía del Estado, obviamente no se opusieron y la vista se suspendió hasta mañana.

El resto de las partes asistieron no sin cierta perplejidad y nervios a las idas y venidas de los dos abogados, y mostraron su disgusto por el «mercadeo» que, aparentemente, estaban manteniendo con el juez y la fiscal.

Este malestar se unió al que ya se originó por el pacto que en su día alcanzaron la Fiscalía y nueve empresarios por el que estos esquivaban la prisión a cambio de admitir el pago de los actos electorales del PP. En dicho pacto se incluyó que los acusados no contestaran a las defensas de los cinco políticos, por lo que era imposible exonerar a ninguno.

Algunos abogados consultados por LA RAZÓN no descartaron la posibilidad de que tras la declaración de Pablo Crespo y Álvaro Pérez, la vista se pudiera volver a suspender y que fueran, en esta ocasión, los defensores de los cinco políticos imputados quienes buscaran una negociación con la Fiscalía que pudiera comportar beneficios para sus clientes.

Todos los abogados consultados aceptaron que, si se establece algún tipo de negociación, entrarán en ella para tratar de obtener beneficios para sus clientes, si bien criticaron que los pactos auspiciados por la Fiscalía estuvieran alejando el proceso de los cauces normales y convirtiéndolo «en un mercado».