Sevilla

San Gonzalo, del sueño a la realidad

El arzobispo de Sevilla corona a la Virgen de la Salud y le pide que «bendiga a España y tutele su unidad»

El arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, rezó unos instantes ante la imagen tras colocarle la corona, obra de Fernando Marmolejo Carmargo
El arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, rezó unos instantes ante la imagen tras colocarle la corona, obra de Fernando Marmolejo Carmargolarazon

El sueño de los hermanos de San Gonzalo se vio ayer cumplido cuando, pasadas las 12 del mediodía, el arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, coronó canónicamente a la Virgen de la Salud, convirtiéndose así en la dolorosa número 18 de la Semana Santa sevillana en recibir esta distinción. Unas 3.000 personas se dieron cita en la Catedral para asistir a una ceremonia que resultó solemne y salpicada de guiños a la actualidad. De hecho, tras colocar la presea sobre la imagen de Luis Ortega Bru y bajar las escalinatas con el himno nacional como telón de fondo, Asenjo se refirió al desafío independentista que ha puesto en jaque al Estado. «Los cristianos no vivimos en una burbuja», dijo el prelado, reconociendo que «atravesamos momentos difíciles, probablemente los más difíciles en los últimos 40 años». Por lo que pidió a la Virgen de la Salud que «bendiga a España y tutele su unidad, que es un valor moral acrisolado a lo largo de cinco centurias que a nadie le es lícito malbaratar, despreciar o destruir».

También pidió el arzobispo por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y por el Rey, para que «el Señor le dé sabiduría, fortaleza y prudencia para regir los destinos de nuestra patria», una palabra de la que «no nos debemos avergonzar».

De entre las autoridades presentes en el templo, destacó la presencia del ministro del Interior polaco, Mauriusz Blaszczak, de visita en Sevilla con motivo de la reunión de ministros del Interior de varios países europeos que se celebrará el lunes en la capital hispalense. También estuvieron presentes el alcalde, Juan Espadas, y varios concejales del PSOE, PP y Ciudadanos.

Ya por la tarde, la dolorosa inició el regreso a su parroquia en una procesión multitudinaria. En el Ayuntamiento la esperaban varios representantes municipales y una alfombra de sal. Posteriormente, recorrió las calles Tetuán y Rioja, donde visitó el templo del Santo Ángel. La entrada en Triana fue triunfal, con las calles engalanadas y abarrotadas de público. Una noche de Lunes Santo en pleno otoño.