Granada

Una reprobación «estética» al alcalde de Granada

El PSOE califica la iniciativa de «cortina de humo» y reta a Ciudadanos a buscar apoyos para presentar una moción de censura

El alcalde de Granada antes de su comparecencia judicial en Sevilla
El alcalde de Granada antes de su comparecencia judicial en Sevillalarazon

El portavoz de Ciudadanos en Granada, Luis Salvador, exigió ayer la dimisión del alcalde de la ciudad, Francisco Cuenca (PSOE), por mantenerse en el cargo un año después de haber sido imputado en la causa abierta en un juzgado de Sevilla por su etapa como delegado andaluz de Economía e Innovación. El dirigente de la formación naranja anunció que iniciará contactos con el PP para convocar un pleno municipal en el que sea reprobado el regidor socialista, cuyo grupo gobierna en minoría y que fue elegido alcalde en sustitución de José Torres Hurtado (PP), que dimitió tras su presunta implicación en una trama de corrupción.

La petición, explicó Salvador, se produce en cumplimiento del pacto anticorrupción suscrito con el PSOE y para que Cuenca, con la «connivencia» de Ciudadanos, no pueda mantenerse como investigado en una causa judicial y al frente de la administración municipal. En definitiva, un movimiento efectista con una finalidad cuestionable, puesto que la moción de censura es el procedimiento más adecuado para propiciar la salida de un regidor de la Alcaldía.

Salvador insistió en que el acuerdo contra la corrupción firmado con los socialistas lo obliga a «mover fichar» y exigir a Cuenca que deje su acta de concejal. «Si el alcalde se hace el sueco y no asume su compromiso, se hablará con el PP y se pedirá su reprobación en pleno», subrayó, aunque descartó una posible moción de censura junto a los populares porque «parte de ese grupo también está investigado en otra causa judicial».

La exigencia de dimisión de Cuenca no significa que el PSOE deba perder la Alcaldía de Granada, aclaró, al tiempo que negó que pretenda hacer «una pinza» con el PP, sino que su objetivo es llegar a acuerdos para cambiar la gestión del actual equipo de gobierno socialista.

Salvador fue especialmente crítico con el alcalde y lo acusó de gobernar «como si tuviera mayoría absoluta», además de cuestionar que «se envuelva en la bandera de Granada para sus intereses partidistas», en alusión a la visita que hizo a Bruselas para exponer la situación del aislamiento ferroviario.

La actual corporación municipal de Granada está formada por once concejales del PP, ocho del PSOE –que gobierna en minoría–, cuatro de Ciudadanos, tres de Vamos Granada (Podemos) y uno de Izquierda Unida.

Por su parte, el portavoz del equipo local, Baldomero Oliver, cargó duramente contra Salvador y su propuesta, calificándola de «cortina de humo» para «eludir» su responsabilidad ante la «difícil situación económica y política de la ciudad». «Ha demostrado que es muy aficionado a este tipo de efectos especiales en la prensa», por lo que recordó «el anuncio de una hipotética moción de censura» que realizó con el presidente provincial del PP, Sebastián Pérez. En este sentido, Oliver aseguró que la moción de censura es «el mecanismo» que Ciudadanos «sigue teniendo a su disposición si tan cierto es que no quiere al alcalde de la ciudad en el puesto».

El también concejal de Economía reclamó a la formación naranja que asuma la «responsabilidad» que los concejales granadinos tienen para «aunar esfuerzos entre todos» con el fin de «sacar a la ciudad de Granada de la ruina», en vez de plantear lo que ha considerado que es «una postura de cara a la galería».

El PP, de su lado, se mostró abierto al diálogo y recordó que ganó las últimas elecciones municipales obteniendo once de los 27 concejales. Vamos Granada se mostró escéptico con el anuncio de Ciudadanos, no sin antes puntualizar que Cuenca «debe retirarse hasta que se resuelva su situación judicial».