Arte, Cultura y Espectáculos

En nombre del arte

Barcelona inaugura la nueva sala Pigment Gallery.

Ferran Josa abriendo la puerta de la galería de arte recientemente inaugurada.
Ferran Josa abriendo la puerta de la galería de arte recientemente inaugurada.larazon

Barcelona inaugura la nueva sala Pigment Gallery.

Desde ayer Barcelona cuenta con una nueva galería de arte, todo un reto en un momento en el que parece que ha llegado cierta recuperación en uno de los sectores más afectados por la crisis.

Pigment Gallery, situada en pleno Eixample, es una propuesta artística que cuenta con Ferran Josa al frente y con el apoyo de Miquel Alzueta. Y hace su presentación con una exposición que es toda una declaración de principios de lo que se quiere hacer: apostar por los nuevos valores, aunque sin olvidar a los maestros del siglo pasado, además de contar con el arte figurativo como uno de sus ejes y en todos los formatos posibles.

En esta primera salida al ruedo cuenta con nombres como Manolo Hugué o Joaquín Torres-García –entre los ya más que consagrados– además de incluir algún que otro guiño picassiano. La exposición también cuenta con el buen hacer de Sarah Moon, Lídia Masllorens, Julio Vaquero, Miquel Macaya o Lita Cabellut. Todo ello bajo un título que no deja espacio a las dudas: «El retrato, una reinterpretación de la realidad», una exposición que permanecerá abierta hasta el próximo 25 de octubre. Tras ella será el turno de Hugo Alonso, recientemente premiado en el certamen Art Madrid.

Ferran Josa, en declaraciones a este diario, explicó que «abrir una galería de arte es siempre un riesgo». Josa, quien durante 16 años ha sido el director de la Sala Parés, confía en la recuperación del coleccionismo, aunque hay mucho por hacer. «No creo que los coleccionistas hayan desaparecido. Lo que sí ha habido por parte del público es desinterés, como si fuera un estado anímico. Sucede que hemos vivido un cambio generacional entre los coleccionistas, pero no ha habido un relevo porque coincidió con el inicio de la crisis», agregó Josa.

La fórmula para acabar con este pesimismo la tiene que dar, desde la galería, «exposiciones con las que sorprender al visitante, tanto por los artistas como por las técnicas que emplean. Cualquier persona con cierto interés podrá hallar algo que encaje con sus posibilidades».

Tampoco cree el responsable de Pigment Gallery que se tenga que entrar en el mundo del arte para hacer una inversión. «En todo caso prefiero el disfrute. Lo demás, que un artista aumente o no su valor, es una lotería. Desde la galería lo que queremos es vender ilusión porque yo no me veo como un vendedor de cuadros. La decisión al final la tiene siempre el cliente», dijo Josa.

Cuando se le pregunta al galerista sobre el perfil de quien podría ser cliente de Pigment Gallery, éste recuerda que «el perfil debería ser el de alguien con inquietudes. Alguien que es amante del arte. No me interesan aquellos que simplemente almacenan obras o se mueven por la especulación. Tiene que haber algo más». Ese algo más es lo que puede verse desde ayer en esta nueva galería de arte.