Agricultura

La peor herencia de los cítricos

La temida mosca blanca, hasta ahora sólo presente en naranjas, mandarinas y limones, llega ahora al caqui. La producción de esta fruta se ha multiplicado por siete en catorce años

Los productores han constatado que distintas especies de mosca blanca se han adaptado al cultivo del caqui
Los productores han constatado que distintas especies de mosca blanca se han adaptado al cultivo del caquilarazon

La temida mosca blanca, hasta ahora sólo presente en naranjas, mandarinas y limones, llega ahora al caqui. La producción de esta fruta se ha multiplicado por siete en catorce años

La joya roja de la agricultura valenciana, el caqui, que tantas alegrías está proporcionando a los productores en los últimos años por sus buenos precios, ha heredado lo peor de los cítricos, los reyes de la Comunitat. Las plagas que durante años han asolado estos cultivos están llegando a los recién implantados caquis, cuya producción y superficie de cultivo han crecido exponencialmente en los últimos años.

Sus cultivadores están preocupados por la irrupción en sus explotaciones de una nueva plaga de moscas blancas, unos insectos muy dañinos cuya presencia hasta el momento se limitaba y circunscribía a la citricultura, pero que por primera vez se ha detectado también en estas plantaciones, donde este verano ya han comenzado a causar daños.

Tantos los propios productores como los servicios técnicos del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) han constado que distintas especies de mosca blanca se están adaptando a la perfección al cultivo del caqui y, de hecho, han empezado a colonizarlo en una amplitud que comienza a adquirir proporciones alarmantes.

La mosca blanca identificada como «Dialeurodes citri» es la que se ha implantado y se está extendiendo de forma mayoritaria en las plantaciones de caqui, aunque también se ha observado la presencia, en menor medida, de otras dos moscas blancas denominadas «Paraleyrodes minei» y «Aleurothrixus flocossus».

Los ataques de estos insectos se manifiestan a través de la puesta de huevos en las hojas del arbolado. La larva que allí va creciendo se alimenta de la savia y, con ello, debilita considerablemente al árbol en cuestión, al tiempo que durante este proceso va segregando una melaza azucarada que cae sobre los frutos y causa la aparición del hongo llamado negrilla. La consecuencia directa es la depreciación comercial de los caquis afectados.

Los términos municipales cuyas plantaciones se están viendo más castigados por la mosca blanca son Alginet, Algemesí, Albalat de la Ribera, Carcaixent y Polinyà del Xúquer.

La creciente presencia de esta nueva plaga en los caquis valencianos ha obligado a los agricultores, con el asesoramiento y el respaldo del IVIA, a iniciar tratamientos y a probar diversas fórmulas para intentar eliminar durante el proceso de confección en los almacenes la negrilla que aparece en los frutos.

También se ha identificado un parásito, la «Encarsia streneua», que actúa como depredador natural de este tipo de moscas.

El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, señaló que resulta muy «inquietante» y supone un motivo de preocupación añadido que una plaga que hasta ahora sólo afectaba a los cítricos se haya adaptado al caqui y esté colonizando uno de los pocos cultivos que ofrecen una rentabilidad aceptable a los agricultores. Señaló que es preciso extremar las precauciones, estar muy atentos, y contar con la colaboración de la Conselleria de Agricultura.