Comunitat Valenciana

Puig mantiene 1.300 millones en las cuentas que el PP tilda de «ficticios»

El Consell remarca ahora la distinción entre los 1.329 millones que reclamó al Constitucional por el fondo de suficiencia financiera y los 1.325 de déficit que incluyó en los Presupuestos

El síndic de Compromís, Fran Ferri, puso al presidente Puig una pulsera en defensa de los LGTB
El síndic de Compromís, Fran Ferri, puso al presidente Puig una pulsera en defensa de los LGTBlarazon

El Consell remarca ahora la distinción entre los 1.329 millones que reclamó al Constitucional por el fondo de suficiencia financiera y los 1.325 de déficit que incluyó en los Presupuestos

La Generalitat trató de esquivar la pregunta que la síndica del PP en Les Corts, Isabel Bonig, realizó al jefe del Consell, Ximo Puig, durante la sesión de control de ayer. Los populares quieren saber qué piensa hacer el Gobierno valenciano después de que el Tribunal Constitucional haya negado que el Consell tenga derecho a recibir 1.329 millones más este año. Explicaba Bonig que esta cantidad coincide con la incluida en los Presupuestos como una partida «ficticia», puesto que el Consell recoge este dinero como el déficit de ingresos del Estado y que debe llegar a través de un nuevo modelo de financiación.

Sin embargo, el presidente de Generalitat, Ximo Puig, lejos de admitir el problema financiero al que debe hacer frente el Consell, lamentó que Bonig confundiese los 1.329 millones reclamados al Constitucional y que la Generalitat debe pagar al Estado, tal y como marca del fondo de suficiencia, de los 1.325 millones recogidos en los Presupuestos y que Puig mantendrá como reales a pesar de que existen mínimas posibilidades de que el sistema de financiación autonómica cambie antes de que acabe el año.

Esta distinción, que no se había realizado hasta el día de ayer, sirvió para que la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, se burlase de los errores de los populares y lo achacase a la costumbre que tienen los populares a «las mordidas».

La acusación sentó como un tiro a la síndica popular, quien está harta de escuchar que su grupo parlamentario es corrupto. Pidió la palabra por alusiones para remarcar que Oltra utiliza la «inmunidad parlamentaria» para hacer estas declaraciones.

Como ya viene siendo habitual, en este punto se abrió un debate paralelo a la sesión de control que el presidente de Les Corts, Enric Morera, no tuvo inconveniente en permitir. Oltra contestó a Bonig que mientras que a los populares les molesta que «se hable de mordidas», mientras que los valencianos, les molesta que se haya producido». La vicepresidencia consiguió con esta frase la gran ovación de la mañana.

Corbatas «para anudar sacos de dinero»

Hace tiempo que la corbata dejó de ser un elemento imprescindible en el protocolo de Les Corts. Pero nadie antes había relacionado esta pieza con la corrupción y tampoco de una manera tan indirecta que prácticamente haya que adivinar a qué hace referencia. El síndico de Ciudadanos, Alexis Marí, subió a la tribuna ataviado con una camisa de «leñador» y unas zapatillas de deporte. Su atuendo iba acorde con su discurso. «La dignidad va por dentro», las corbatas se utilizan para «anudar los sacos de dinero que se han quedado». Con esta grave acusación, Marí tomaba parte en la tribuna de Les Corts en contra de miembros de su propio partido que criticaron la manera de vestir del teniente de alcalde del Ayuntamiento de Alicante de Compromís, Natxo Bellido, a quien criticaron por acudir con pantalones cortos y zapatillas a un acto oficial. Marí había avisado al resto de grupos que la cosa no iba con ellos, que no protestasen, por lo que se interpretó como una pelea interna de Ciudadanos.