Cristina Cifuentes: «Votar a PSOE es votar a Podemos»

La entrevista / Cristina Cifuentes, presidenta de la Comunidad de Madrid. Sabe que su decisión de ser la primera Comunidad que da asistencia sanitaria a «sin papeles» ha generado controversia, pero también afirma estar segura de que va a hacerse en toda España

Acaba de cumplir su segundo mes como presidenta de la Comunidad de Madrid. Una fecha en la que Cristina Cifuentes asegura que puso «el reloj a cero». Desde entonces ve la vida pasar desde el balcón de su despacho con vistas a la Puerta del Sol. Dice que le gusta bajar, tener los pies en la calle para escuchar de verdad a los ciudadanos.

–¿Por qué no se va de vacaciones?

–Pues porque no me puedo ir, no llevo ni dos meses y hay muchísimos problemas que requieren estar encima. La Administración funciona sola pero la diferencia entre que vaya por un lado o por otro es que haya alguien arriba que diga «por aquí» agilizando los tiempos. Yo creí que tenía que quedarme y me he quedado encantada. Estar al frente del Gobierno es un privilegio. No creo que apenas llevando un mes y medio me tuviera que marchar. Hay que estar al pie del cañón. No critico a los que se van de vacaciones, pero me parece que hubiera sido una irresponsabilidad.

Balance

–¿Cuál es el problema más importante que se ha encontrado?

–Muchos, la gestión de una Comunidad como Madrid tiene muchos problemas. Había dos cosas que teníamos que hacer ya por las fechas. Abrir los comedores escolares era necesario y hacerlo, desde el punto de vista administrativo, era complicado. La otra decisión fue la bajada de las tasas universitarias que, al margen del problema de las universidades, que ya tienen el presupuesto comprometido y gastado en su mayor parte, se había marcado un periodo de matriculación y hemos tenido que ir contra reloj para que la bajada fuera efectiva en el curso vigente. Está suponiendo un ahorro por estudiante de entre 400 y 900 euros.

–¿Le han dejado una «herencia envenenada»?

–La herencia en términos generales ha sido muy buena. Aquí se ha hecho una gestión muy positiva por parte de los anteriores gobiernos del PP, que han convertido Madrid en la gran Comunidad que es. Con las mejores infraestructuras en hospitales, colegios públicos, una gran red de Metro... Estamos a la cabeza de España en creación de empleo y crecimiento económico y eso evidentemente no es una herencia envenenada. Lo que sí es verdad es que hay cosas que hay que gestionar en el momento y se trata de los problemas diarios de los madrileños, hay que hacerlo sin que haya un periodo de gracia, sin esperar ni un minuto.

–Ignacio González se negó a entrar en los «fondos de rescate» de Hacienda. Él no lo hizo pero usted sí va a aceptar la financiación del Estado. ¿Qué ha cambiado?

–En los mecanismos de financiación de las autonomías por parte del Estado está el FLA, para aquellas que hayan incumplido los objetivos del déficit y hay otro mecanismo, el FFF, que es al que nos hemos acogido. El Fondo de Facilidad Financiera es un mecanismo que para la Comunidad de Madrid es extremadamente ventajoso porque supone que recibimos más de mil millones a un coste cero de intereses. No hay ninguna entidad de crédito que preste dinero a ese interés. Vamos a poder pagar a los proveedores que en algunos casos se estaban cobrando con seis y nueve meses de demora, lo que es una prioridad. Este fondo no supone para nada menoscabo de nuestra propia autonomía financiera y para Madrid no es para nada negativo. Todas las comunidades, excepto las que tienen un régimen fiscal propio, se han acogido. La financiación a la que Madrid ha tenido que acudir en el último año supone casi 35 millones de intereses que hay que pagar.

Partido

–Ha reducido el número de altos cargos, eliminado las retribuciones de los directivos de Ifema que dependen del Gobierno regional... ¿Le han llamado sus antecesores por su intención de suprimir el consejo consultivo?

–Tengo muy buena relación con Leguina, Gallardón, Aguirre e Ignacio González. Todos entienden que cada uno tenemos nuestro proyecto y que las circunstancias y los tiempos políticos son diferentes. Tengo que cumplir un programa electoral, un acuerdo con Ciudadanos y eso conlleva tomar decisiones. No me parece mal que pueda haber alguna diferencia en cuestiones puntuales porque cada uno trata de hacer las cosas de la mejor manera posible. Mis antecesores lo han hecho muy bien, todos, pero yo quiero mejorar las cosas. Ahora los ciudadanos nos piden que hagamos las cosas de forma diferente.

– En cuanto a Inmigración, también ha «liderado» el cambio respecto a la asistencia sanitaria a los inmigrantes sin regularizar ¿se ha sentido más cuestionada que felicitada?

–Cuando adoptas una decisión, se generan opiniones muy diversas. Pero estamos convencidos de que actuamos correctamente, porque consideramos que humanidad y legalidad son perfectamente compatibles. Así va a ser en la Comunidad de Madrid, y estoy segura de que va a poder ser en el conjunto de España, mediante la propuesta que se debatirá en el Consejo Interterritorial por iniciativa del Gobierno, y que espero permita llegar a un acuerdo global.

Pactos de gobierno

–¿Su pacto con Ciudadanos es inquebrantable?

–Por mi parte tiene toda la solidez del mundo. Me comprometí con Ciudadanos con un acuerdo de 76 puntos y voy a cumplir todos ellos. Para mí eso es un compromiso contractual igual que es un compromiso con los madrileños mi programa electoral. Voy a cumplir todos y cada uno de los 300 puntos. Espero que Ciudadanos vea que eso se va cumpliendo y que respete el pacto.

–¿Ve posible un acuerdo en la Asamblea entre PP y Podemos?

–Podemos es de extrema izquierda y el PP es de centro derecha, me parece complicado llegar a pactar con un partido con el que hay tanta distancia ideológica, pero sí me gustaría poder llegar a algunos acuerdos también con Podemos sobre grandes materias. Yo he ofrecido tres grandes pactos: uno sobre corrupción política, transparencia y regeneración; otro sobre Educación y otro sobre Sanidad y me gustaría, por lo menos, llegar a unas bases comunes.

Telemadrid

–¿Qué va a pasar con la televisión pública madrileña?

–En el acuerdo con Ciudadanos pactamos modificar la regulación actual de Telemadrid para avanzar en la profesionalización de la gestión y presentaremos el proyecto de esta ley en la Asamblea en septiembre. Queremos que sea una televisión gestionada con criterios puramente profesionales y que cambien la forma de elección de su Consejo de administración. La televisión pública debe ser rentable, que no cueste dinero a los madrileños y ser capaz de financiarse por sí misma. En este momento no es una prioridad para los madrileños financiar una televisión deficitaria. Si no es viable económicamente, yo no descarto ninguna decisión.

– Necesita el apoyo de la oposición para aprobar el cambio en Telemadrid. ¿Qué hará si le exigen readmitir a los trabajadores del ERE?

– Se tratará de llegar al máximo consenso con los grupos políticos, porque pretendemos que sea un proceso participativo, y eso llevará un tiempo. En cuanto al tema ERE, al margen de la posición de cada partido, vamos a cumplir las resoluciones judiciales.

Corrupción

–¿La corrupción es el mayor problema que tienen los partidos?

–Es un problema que afecta a la sociedad española. Es verdad que corrupción ha habido siempre, pero en un momento de grave crisis económica la corrupción política es algo rechazado de plano por la sociedad. Un rechazo al que me sumo: hay que tener tolerancia cero con la corrupción y combatirla de frente. Yo me pongo a la cabeza de esa manifestación porque no voy a tolerar ningún caso de corrupción en mi Gobierno.

–Se ha presentado como acusación particular en la «Púnica».

–Sí, porque entendemos que ha podido producirse un grave perjuicio patrimonial para los madrileños y nos presentamos para defender sus intereses. Vamos a ofrecer toda la colaboración a la Justicia porque lo que espero es que en el asunto «Púnica» la Justicia actúe rápidamente y que los responsables paguen, devuelvan el dinero y se llegue hasta el final.

–Uno de los cabecillas de esa trama ha señalado a uno de sus consejeros. ¿Confía en su equipo al 100%?

–No es una persona que esté siendo ni formalmente investigada ni, por supuesto, imputada. Claro que confío en Jaime González Taboada y en todo mi Gobierno. Si en algún momento alguna persona de mi equipo resultara imputada por un asunto de corrupción se le cesaría inmediatamente.

–¿Es una de sus líneas rojas?

–Por supuesto. No sólo en el caso del Gobierno sino también de los diputados, y no sólo porque lo haya dicho Ciudadanos, sino porque los diputados del PP nos hemos comprometido voluntariamente a cumplir un código ético que nos obliga a presentar la renuncia al escaño si somos imputados o formalmente investigados en algún caso de corrupción.

–Han presentado también sus declaraciones de bienes. ¿Pedimos mucho los ciudadanos?

–Los políticos debemos tener paredes de cristal. La Administración debe ser totalmente transparente y el primer ejercicio de esa transparencia es decir quiénes somos y qué es lo que tenemos. Hemos publicado nuestras declaraciones de la renta, de bienes, en mi caso de «no bienes» porque no tengo nada que aportar. También lo van a hacer los viceconsejeros, los directores generales... Es un compromiso con la transparencia importante no por el hecho de quién tiene más o menos, sino por el de saber cómo entramos y cómo salimos. No es explicable que una persona entre en política sin nada y termine con determinados bienes.

–¿Usted se hubiera reunido con Rodrigo Rato como hizo el ministro de Interior?

–Yo cuando era delegada del Gobierno me reuní con algunas personas que habían sido amenazadas en redes sociales, algunos periodistas incluso. Obviamente en ese momento no preguntas a la persona ni le pides un certificado de antecedentes, le estás atendiendo por unas circunstancias. Evidentemente el caso del señor Rato es diferente porque se trata de una persona que no sólo tiene una notoria trascendencia pública, sino que además ha sido vicepresidente. No puedo opinar por los demás, creo que el ministro del Interior ha dado las pertinentes explicaciones en el Congreso y que este tema se ha sobredimensionado absolutamente por parte de algunos. Se ha querido convertir en un tema para perjudicar al Gobierno.

Generales

–¿Va a participar en la campaña de las generales?

–Por supuesto. Ofrezco toda la ayuda posible al partido para colaborar en lo que haga falta y ayudar en la medida de lo posible a transmitir el mensaje de lo que se ha hecho y de lo que se está haciendo por parte del PP en las instituciones que estamos gobernando.

–¿Pactarán en el Congreso PSOE y Podemos?

–Si el PSOE tiene oportunidad va a pactar con Podemos, ya lo ha hecho en ayuntamientos y comunidades autónomas. En este momento votar a PSOE es votar a Podemos y ya ha dicho también el señor Errejón que se están planteando un posible pacto con el partido socialista. A mí me parece bien que lo digan antes de las elecciones para que cuando los ciudadanos vayan a votar sepan que si votan PSOE están votando probablemente un pacto PSOE-Podemos igual que si votan a Podemos. Más allá de eso yo creo en la alternancia política, creo que en democracia es sano pero también que en el momento actual que vive España un cambio de Gobierno sería algo realmente negativo para todos los españoles. Más aún si el Gobierno cae en manos de un partido populista como Podemos que más allá de pensar en el bienestar, en el progreso del país, en la creación de empleo, está pensando en otra serie de actuaciones. Ya lo estamos viendo en sitios donde gobiernan como el Ayuntamiento de Madrid. ¿Qué cosas ha hecho la señora Carmena en los menos de dos meses que lleva? Eso es Podemos y no el modelo político que yo quiero para España.

–¿En las generales votar a Ciudadanos será votar a PP?

–Pues no lo sé porque Ciudadanos hasta el momento ha pactado con PSOE en algunos lugares, con el PP en otros... Veremos a ver qué ocurre al día siguente de las elecciones. No es fácil saber lo que va a hacer Ciudadanos, eso lo tendrá que decir el señor Albert Rivera.

Rajoy

–¿Sabe si ha terminado ya Rajoy con la renovación del partido o aún habrá más novedades?

– Para mí la renovación de los partidos debe ser un proceso continuo, que no se termina por el hecho de que haya habido cambios en la estructura. Todos los partidos políticos debemos estar en permanente renovación y no sólo cambiar personas sino también actitudes. Hay que estar en permanente escucha del ciudadano, estar en la calle, pisarla... Estamos en las administraciones para servir al ciudadano, no para servirnos de ellos, por eso debemos estar pendientes permanentemente para solucionar sus problemas.

–¿Si tras las generales Rajoy le llama para formar parte de su Gobierno qué hará?

–He dicho siempre que estoy a disposición del partido y digo lo mismo ahora, pero eso no va a ocurrir. Tengo una responsabilidad fundamental y no contemplo nada que no sea cumplir con mi actual cometido que es presidir la Comunidad de Madrid. Eso es completamente improbable, ni me lo planteo.

–Más probable es que sustituya a Esperanza Aguirre al frente del PP de Madrid...

–Creo que tiene que haber cambios en el partido pero eso ahora tampoco se plantea en estos momentos. En el PP de Madrid ya va a haber cambios porque la propia Aguirre ha dicho ya que no se va a presentar en el próximo congreso regional. Como eso en todo caso será después de las generales y de que haya un congreso nacional... Hasta entonces será el momento para que todos los militantes del PP de Madrid aprovechemos para dar el impulso y la revitalización que el partido necesita.

–¿Se va a presentar al congreso?

–Eso es algo que en este momento ni me planteo.

–¿La convocatoria de ese congreso podría reabrir antiguas guerras en el PP como las que hay en el PSOE-M?

–Desgraciadamente el PSOE de Madrid ha sido una guerra de guerrillas durante los últimos 30 años, no han vivido un momento de tranquilidad por esas luchas, yo no me alegro ni mucho menos, pero en el PP eso no va a pasar. Estoy convencida de que, entre todos, en el próximo congreso elegiremos al mejor equipo para llevar adelante al PP de Madrid con gente capaz de ilusionar a la militancia y volver a movilizar a tanta gente que tenemos en Madrid. Somos el partido con más militantes de España. Hay que aprovechar esa oportunidad para volver a dar un impulso político al partido en Madrid.

Cataluña

–¿El desafío soberanista de Mas perjudica el modelo de Estado?

–Indudablemente. Cataluña es una comunidad autónoma con unas particularidades. Obviamente las tiene pero yo no concibo a España sin Cataluña y tampoco a Cataluña sin España. Creo que es una postura tremendamente perjudicial sobre todo para los catalanes y también para el resto del país en su conjunto. Estas elecciones de septiembre no son unas elecciones plebiscitarias y no se pueden plantear como tal cosa. Son unas autonómicas y hay que elegir un Gobierno que gestione los problemas del día a día de los catalanes más allá de veleidades independentistas. Afortunadamente, el Estado de Derecho tiene muchos mecanismos para que se cumpla la legalidad también en Cataluña.

Reforma de la Constitución

–¿Comparte con el Gobierno la idea de que reformar la Constitución para cambiar el equilibrio de competencias del Estado y las comunidades autónomas?

–En el Partido Popular nunca nos hemos opuesto a cambiar la Constitución. De hecho en los últimos años se ha reformado en dos ocasiones con el apoyo del PP. Las leyes se tienen que ir adaptando al paso del tiempo. La Constitución es la ley marco que ha permitido que España se desarrolle política, social y económicamente, nos ha dado una estabilidad tremenda. Lo que no vale es tratar de partir de cero y dejar la Constitución de lado. Las leyes se tienen que poder adaptar y la Constitución tampoco es inamovible, creo que se puede modificar y adaptar en algunos puntos concretos pero antes de abrir ese melón hay que saber dónde queremos llegar y que en ningún caso deberíamos cuestionar nuestro actual sistema.

Monarquía

–Tras tomar posesión como presidenta estuvo con el Rey en una reunión en la que también participó Carmena. Dijo que había recibido buenos consejos de Felipe VI...

–Fueron reflexiones muy oportunas. El Rey es una persona con una amplia formación y con una gran visión de Estado. Me resultó muy interesante lo que nos contó porque tiene un proyecto de Estado y de país que yo comparto. Creo que tenemos un gran Rey. Ha sido algo importante que se produjera también ese relevo generacional en la monarquía. Creo que los Reyes Felipe y Letizia han vuelto a convertir la Monarquía en una institución ampliamente valorada y reconocida por la sociedad española.

Carmena

–Es obligada una relación estrecha entre la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid. ¿Cómo ha sido su relación con Manuela Carmena estos dos meses?

–He tenido oportunidad de reunirme con la alcaldesa en una ocasión y pudimos hablar de algunos proyectos comunes. He hablado con ella en dos o tres ocasiones más, mis consejeros, la gente de mi equipo también han hablado con los del suyo. Voy a procurar llevarme bien con todos los ayuntamientos sean del color político que sean. Luego obviamente hay discrepancias y con el Ayuntamiento de Madrid hay muchas porque ellos defienden un modelo político que es muy diferente al que defiendo yo.

–Usted ya le ha dado la réplica a varias iniciativas de Ahora Madrid...

–Ha habido diferencias de criterios sobre algunas cosas, por ejemplo cuando dijo que quería poner una tasa al turismo en Madrid. Me parece que eso es tremendamente perjudicial para la imagen de la ciudad. Yo quiero potenciar la marca Madrid y a la ciudad como destino turístico. La creación de la tasa es una cosa disparatada. También mostré mi discrepancia con la página de los desmentidos oficiales, que me parece una cosa que no tiene sentido sobre todo hoy en día, cuando se puede tener una relación directa con los medios para hacer cualquier tipo de rectificación. Tampoco me gustó su idea de ceder los espacios públicos que son de todos para los okupas, de hecho he propuesto que si quiere ceder un espacio en el centro de Madrid se lo dé a la Policía Nacional que necesita una comisaría en Centro. Discrepancias hay muchas, pero creo que sobre ellas siempre hay que buscar un punto en el que nos unamos para hacer cosas comunes. Estoy segura de que los vamos a encontrar en algunas cuestiones como lo hemos hecho en Ifema.

De cerca

–¿Con quién habla más por teléfono Cristina Cifuentes?

–Soy una presidenta que está muy encima de los consejeros y puedo decir que con todos. Tenemos un grupo de chat todos los miembros del Consejo de Gobierno y hablamos todos. Intento no dar mucho la lata, me gusta delegar pero supervisar todo y estar encima de los problemas puntuales. De los problemas grandes y también de los pequeños, que para el ciudadano que lo sufre no lo son. Aunque cada consejero tiene su materia, aprovechamos para que todos tengan una visión general para que sepan qué se está haciendo en el resto de consejerías. Todos tenemos que ir en la misma dirección política y, sobre todo, con la misma actitud. En el momento actual la actitud de los gobernantes es muy importante, debemos escuchar y quiero que transmitamos nuestras ganas, nuestro entusiasmo.

–¿Sólo se hablan de política?

–Hablamos de todo, menos de eso lo justo (risas).

–Es muy activa en las redes sociales y ha tenido algún disgusto. ¿Las carga el diablo?

–Tenemos que ser responsables de lo que escribimos, y yo la primera por eso yo no he borrado todo como han hecho otros. Al final es un problema porque muchas cosas se sacan completamente de contexto. A mí me sacan cosas que dije en 2009 e incluso la forma de decirlas. Yo he ido variando con los años la forma de relacionarme con las personas en Twitter. Eso lo aprendí sobre todo de mi paso por la delegación del Gobierno, porque hay que ser prudente con las expresiones que se utilizan. Pero por encima de todo creo que las redes sociales son un mecanismo muy interesante para que los políticos podamos estar en contacto directo con los ciudadanos y para que los ciudadanos puedan directamente dirigirse a nosotros.

–¿Usted lleva su cuenta en la red social Twitter?

–Tengo dos Twitters, uno que lo lleva el equipo, @cifupresidenta, donde yo también participo. Pero luego tengo el mío, @ccifuentes, que sólo llevo yo y no permito que lo haga ninguna persona. No tengo mucho tiempo pero todos los días, por la noche, de madrugada, cuando tengo un ratito intento contestar alguna cosa y colgar alguna otra. Creo que a pesar de todo, el ver o leer lo que dicen los ciudadanos a través de las redes es un instrumento muy importante para los políticos. Hace unos años cuando defendía el uso de las redes sociales me miraban como si fuera una friki, pero para mí siempre fue parte del trabajo. Eso sí, hay que entender el instrumento, porque el hecho de que te dirijas a alguien en las redes no significa que tengas una relación con ella.

–Por ahí vienen los disgustos...

–Me ha pasado con Alejandro de Pedro, una persona a la que yo no conozco de nada más allá de ser seguidor mío en Twitter, aunque no habría pasado nada si le hubiera conocido. Lo raro es que no le conociera porque era una persona del partido que tenía mucha relación con mucha gente del partido. Me hice una vez una foto con él y me intercambié unos tuits, quizas con un exceso de confianza, pero era la forma en la que me relacionaba con las personas en Twitter en ese momento. Ahora soy más prudente.

–Mire cómo usaba las fotos el Pequeño Nicolás...

–Yo me hago fotos con cualquiera que me lo pida, no voy a empezar a pedir un certificado de penales para hacerse una foto conmigo ni mucho menos. Es verdad que, a lo mejor, un exceso de cortesía o de familiaridad igual no hay que tener demasiada con desconocidos. Pero este tema ha sido demencial, lo han sacado de contexto tratando de involucrarme con el asunto «Púnica» cuando cualquiera que haya leído el sumario sabe que no tenía nada que ver. No tendría ningún problema en decir que conozco a ese señor porque no pasaría nada y, de hecho, lo normal es que lo conociera. También me han sacado tuits defendiendo a Rato que fue un magnífico ministro de Economía y ahora claro que no lo defiendo cuando hemos visto muchas de las cosas que ha hecho. Te sacan un tuit y parece que lo estás diciendo ahora cuando es algo de hace ocho años. Tratar de comparar esto con personas que en Twitter han amenazado con fusilar a uno o emparedar a otra, o mofarse de las víctimas del terrorismo me parece que es una broma de mal gusto.

–¿Qué ha dejado de hacer desde que es presidenta?

–He dejado de hacer cosas sobre todo porque no tengo tiempo; si es que estoy todo el día metida en el despacho trabajando. Los tres últimos años y medio en la Delegación de Gobierno también fueron años de muchísima dedicación, pero yo necesito un poco más de tiempo para mí misma. Para que se haga idea yo hice una mudanza en el mes de abril, cuando dejé la Delegación de Gobierno, y todavía no he podido colgar las cortinas de mi casa ni abrir la mayoría de las cajas. Ahora lo importante es que esto hay que sacarlo adelante; Madrid tiene que seguir funcionando, hay muchas cosas por hacer y yo antepongo a mi tiempo de ocio la obligación y la responsabilidad que tengo ahora, que es muy grande y que además a mí me llena de satisfacción.