La OMS declara el zika «emergencia internacional»

Por ahora, recomienda restringir los viajes a las embarazadas y controlar al mosquito transmisor

EL Comité de Emergencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se reunió ayer en Ginebra y determinó que la expansión tan rápida que está experimentando el virus del Zika y su posible relación con el incremento de casos de microcefalias entre los recién nacidos cuyas madres han padecido la enfermedad exige la declaración de «emergencia de saludpública internacional», afirmó anoche la directora general de la OMS, Margaret Chan. «Debemos advertir sobre la severidad de la amenaza que representa para la salud pública la posible relación entre el zika y los casos de microcefalia», añadió la directora.

Y es que, desde que se inició en 2015 el brote en Brasil, el número de bebés que han nacido con problemas congénitos de microcefalia –su cerebro no se desarrolla adecuadamente y, por lo tanto, da lugar a retraso mental– «ha aumentado en el espacio y en el tiempo, al igual que el brote de este virus», indicó Chan. A pesar de que no existen, por el momento, evidencias científicas determinantes que relacionen la microcefalia con el virus, Chan insistió en que la posible asociación constituye «un evento extraordinario» y es por eso que se decide determinar el nivel de emergencia.

Declarar el Estado de Salud Pública de Importancia Internacional (Espii) determina el establecimiento de una serie de medidas, dependiendo de la gravedad de la situación, para intentar controlar una epidemia. En este caso, la del zika. Una de las medidas que se pueden abordar es la restricción de los viajes a los países afectados, pero en este caso la OMS no considera que deba ser así. «Los viajes no deben restringirse, así como tampoco cerrarse las aduanas. No existe una verdadera amenaza de salud pública para ello», aseveró la directora general del organismo. Lo cierto es que la decisión de declarar la emergencia está íntimamente ligada a la posible relación entre la microcefalia y el Zika, por lo que, salvo a las embarazadas, a las que la propia Chan desaconseja viajar, el resto de personas no padece problemas de salud graves. Es más, de acuerdo con los expertos en Infecciosas, sólo una de cada cuatro personas que sufren el virus no experimenta síntomas. Y es que, mientras que el porcentaje de mortalidad por ébola supera el 60 por ciento, el del zika representa el 0,01.

Lo que sí ha fijado la OMS son una serie de recomendaciones para intentar que el número de casos no siga creciendo. Ya se han visto afectados 25 países. «La vigilancia de la infección debe reforzarse, con la difusión de los casos y realizando diagnósticos rápidos en las zonas de riesgo», explicó la representante del organismo. Del mismo modo, el doctor David Heymann, subdirector general de Seguridad Sanitaria, insistió en que «se deben estandarizar los sistemas de vigilancia e intensificar la investigación en microcefalia, así como el desarrollo de vacunas», pero el experto se mostró algo pesimista, ya que «no sabemos cuánto tardaremos en encontrar el vínculo entre la microcefalia y el virus del Zika». Y es que Heymann insiste en que «este virus, por sí solo, no representaría ningún tipo de riesgo para la salud pública», pero es su relación con el problema congénito que sufren los recién nacidos es lo que preocupa a los expertos.

«Es la hora de actuar, de ponernos en acción», insistió Chan, en referencia a la capacidad de los países de tomar medidas en contra del mosquito responsable de la transmisión de este tipo de flavivirus. Estos insectos, de la familia «aedes», se encuentran en toda Latinoamérica (salvo en Chile) y también se extienden por Estados Unidos. Y, uno de ellos, el tigre, cada día gana más terreno en nuestro país. Es más, ya se puede detectar desde Gerona hasta Málaga, por todo el Levante español, así como en otros países de Europa como Italia o Francia.

«La existencia de este mosquito en muchos países determina la necesidad de tenerlo controlado y saber dónde está», apuntó el doctor Heymann. «La medida más importante que deben tomar los ciudadanos es la protección. Se deben evitar sus picaduras, especialmente las gestantes», insistió Chan. Del mismo modo, aseveró que las embarazadas «siempre deben ir protegidas con repelente para evitar las picaduras, así como utilizar ropa larga y evitar las actividades al aire libre durante el día», que es cuando el mosquito pica.

Por el momento, en Brasil los casos de microcefalia superan los 4.000 y en Colombia, los 2.000.