Ofensiva de Netflix contra las cadenas en abierto

Desde que Disney anunciase el lanzamiento de su propia plataforma de cine, series y deportes, ambas compañías han iniciado una guerra sorda, una batalla que ya tiene sus efectos colaterales.

Desde que Disney anunciase el lanzamiento de su propia plataforma de cine, series y deportes –lo que significó que rompía con Netflix, ya que sus contenidos no estarían disponibles en su aplicación en Estados Unidos–, ambas compañías han iniciado una guerra sorda, una batalla que ya tiene sus efectos colaterales. A los pocos días, la empresa de «streaming» hizo público que había fichado a Shonda Rhimes –la creadora de «Anatomía de Grey» y «Scandal»– después de trabajar durante quince años para la cadena ABC que, casualidades de la vida, es propiedad de Disney. El contrato es de exclusividad y, aunque no se han revelado las cifras, no bajará de los 10 millones de dólares al año.

Más zozobra

Este abordaje a un canal generalista que emite en abierto no ha sido el único movimiento. Chuck Lorre, el alma de «Dos hombres y medio» y «The Big Bang Theory», lleva un año coqueteando con Netflix y ya tiene dos series en cartera: la comedia «Disjointed», protagonizada por Kathy Bates y cuya preproducción comenzó en 2016, y «The Kominsky Method». Ambas significan un golpe en la línea de flotación de otra «grande», la CBS, a la que está vinculado desde sus inicios. Para aumentar la zozobra de la cadena generalista, el viernes se hizo público que el protagonista será Michael Douglas. Interpretará a Kominski, un actor de éxito efímero que ahora se dedica a enseñar a jóvenes que quieren probar las mieles del mundo del espectáculo.

A medio plazo, la ABC respira tranquila porque, tanto el melodrama médico liderado por la actriz Ellen Pompeo como la ficción política que tiene a Kerry Washington como máxima estrella, permanecerán en antena. Pero, ¿qué ocurrirá en el futuro? Rhimes le ha procurado a la ABC más de doce millones de audiencia media por «Anatomía de Grey» en su decimosegunda temporada. Por su parte, «Scandal» le aporta 7,2 millones de seguidores. A eso hay que sumar que «Cómo defender a un asesino» reúne una media de 6,2. La productora era su talismán y un seguro de vida para atraer anunciantes. Por ahora, las tres tienen varias temporadas por delante, pero no demasiadas. Después habrá que buscar a otro mirlo blanco.

La CBS vive una situación similar. Aunque Lorre no ha cerrado la puerta a futuras colaboraciones se han encendido las alarmas ante la fuga de su principal cerebro y su máximo valedor para las comedias de situación. La ficción protagonizada por Jim Parsons no hace más que darle alegrías, ya que supera con holgura los 14,8 millones de seguidores en su décima temporada y ya está en la línea de salida su «spin off», «El joven Sheldon». «Mom», con 8, es la segunda ficción de más éxito. «Dos hombres y medio», que finalizó en 2015, le dejaba un rédito de 9,6 millones. La paradoja es que en los próximos años tanto la competencia para la ABC y la CBS vendrá de fuego amigo: Rhimes y Lorre. ¿Quién será el próximo?