Investigación científica

Crean el primer registro de pacientes de cáncer de mama metastasico

Unas 1.300 pacientes serán incluidas en el primer registro por subtipos tumorales, que permitirá hacer un seguimiento durante varios años para analizar la heterogeneidad de los tumores, cómo se tratan y cómo responden a las terapias.

Unas 1.300 pacientes con cáncer de mama metastásico serán incluidas en el primer registro por subtipos tumorales, que permitirá hacerlas un seguimiento durante varios años para analizar la heterogeneidad de los tumores, cómo se tratan y cómo responden a las terapias.

Será el Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (Geicam) el que ponga en marcha este registro, el RegistEM, presentado hoy en rueda de prensa, en el marco de la novena Revisión Anual de Avances en Cáncer de Mama (Ragma 16), que tiene lugar hoy y mañana en Madrid, y que incidirá sobre todo en los avances en la genética de esta patología en el último año. La oncóloga del Hospital Universitario de Donostia Isabel Álvarez ha explicado que el cáncer de mama es una enfermedad heterogénea, que incluye muchas enfermedades y no se tratan todas por igual, por lo que se hacía necesario contar con un registro de pacientes.

El presentado hoy incluirá a unas 1.300 pacientes de 43 hospitales diagnosticadas en la actualidad de cáncer de mama metastásico, bien como primer diagnóstico o que han recaído a pesar de haber recibido tratamiento, que permitirá determinar el impacto de la cirugía y otros tratamientos, o si hay cambios moleculares entre su primera aparición y su evolución a metástasis.

La prevalencia de la enfermedad metastásica en cáncer de mama es elevada debido a que muchas mujeres conviven con el tumor diseminado, según los datos de Geicam, que indican que hasta un 30% de los diagnósticos en un estadio precoz experimentará una recaída a lo largo de su vida con aparición de metástasis a distancia.

El objetivo, ha explicado Álvarez, es ver la evolución de estas pacientes durante los próximos años: "recoger todos los tratamientos que las hacen, y se van a recoger muestras biológicas, vamos a poder tener acceso a sus tumores y muestras de sangre para analizar si aparecen nuevas lesiones en el ADN circulante".

Álvarez ha abundado en que este primer registro facilitará el análisis de la heterogeneidad de los tumores de mama, cómo son tratados, cómo responden a los tratamientos, qué evolución tienen o cuánto dura el efecto de las terapias.

Además de este proyecto, Geicam comenzará un nuevo estudio, el Álamo 4, que durante los próximos dos años y medio incluirá unas 12.000 pacientes diagnosticadas hace más de diez años, entre 2002 y 2005, y analizará su evolución hasta la actualidad.

"Es muy importante porque nos permite saber cómo han impactado los nuevos medicamentos con un seguimiento suficiente y podemos compararlo de forma histórica con los resultados de años anteriores", ha explicado Álvarez, ya que al Álamo 4, le precede el 1, 2 y 3, ya presentados.

El anterior proyecto, el Álamo 3, reflejó que la supervivencia de pacientes tratadas diez años antes había aumentado con respecto al Álamo 2, entre más de un 70% y un 87%.

Por otra parte, en la rueda de prensa, varios expertos han resumido algunos de los aspectos que expondrán en el Ragma 16, como la investigadora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) Ana Osorio, que ha valorado los avances respecto a los nuevos genes implicados en el cáncer de mama hereditario, gracias a la secuenciación genómica masiva.

Aunque estas técnicas permiten analizar muchos genes a la vez en poco tiempo para conocer si una persona es portadora de una mutación, su incorporación al diagnóstico está siendo lenta ya que aún se desconoce en parte la utilidad clínica de esa información.

El experto del Geicam Pedro Sánchez Rovira ha destacado el papel "fundamental"de la investigación clínica que permite la aparición de nuevos fármacos y de forma "cada vez más acelerada", así como la investigación académica. La presidenta de la Federación Española de Cáncer de Mama (Fecma) ha agradecido los proyectos puestos en marcha por Geicam, así como los avances en los últimos años en el conocimiento de la enfermedad y los nuevas terapias para combatirla.

Para el miembro del Comité Organizador del Ragma 16, José Enrique Alés, el objetivo no es tratar el cáncer sino llegar a curarlo definitivamente.