Federico Quevedo: «Nos protegemos más del sol que antes»

-«El negocio del poder. Así viven los políticos con nuestro dinero». Un título atractivo para un libro de denuncia. ¿Cómo surge la idea?-Surge de un libro escrito por dos periodistas italianos que se llama «La Casta» y en el que se denuncia a esa clase política que se instala en el poder y lo considera como algo propio, como una especie de herencia absolutista. El éxito de ese libro hizo que la editorial nos encargara algo similar pero con políticos españoles. -Pero los políticos españoles y los italianos son distintos.-No. Por desgracia las clases políticas en los países latinos son muy parecidas. Si este libro se hubiese hecho en Inglaterra o en Alemania sería otra cosa porque los políticos anglosajones son más conscientes de que su poder viene delegado de la soberanía popular. -Yo no me imagino a un presidente del gobierno español montando un escándalo como el de Berlusconi.-Ni yo, pero a Berlusconi habría que analizarlo aparte porque tampoco en Italia se han dado casos parecidos. Aquí también ha habido escándalos sexuales, con cargos de menor importancia, no se olvide de aquellos concejales que se iban de pingoneo con fulanas y les pagaban con dinero público porque, según ellos, les daba vergüenza pagarlas de su bolsillo. -¿Será que aún no somos conscientes de que el dinero público es de todos?-Eso es lo que decía la ex ministra Carmen Calvo, que el dinero público no es de nadie. Precisamente uno de los objetivos del libro es recordarle a la sociedad que el dinero público sale de nuestro bolsillo, no de la nada. -Me llama la atención el toque que le dan a la Casa Real. -Porque no hemos querido hacer excepciones con nadie. El libro no pretende ser una crítica contra la monarquía, ni mucho menos, pero no olvidemos que ellos también forman parte del sistema. Mire, si las cuentas de la clase política son poco transparentes, las de la monarquía son totalmente opacas. Los españoles no tenemos ni idea de dónde va el dinero asignado a la casa real. -¿Los políticos también se aprovechan del cargo para irse de veraneo por la cara?-La mayoría no, aunque no debemos olvidar el escándalo que se montó en la primera legislatura de Zapatero cuando decidió hacerse la pista de baloncesto y tirar la casa por la ventana para acondicionar el palacio de la Mareta en Tenerife. -¿Usted es de los que se embadurna de crema para no quemarse?-Es curioso porque en ese tema hemos cambiado mucho. Ahora los padres solemos cubrir a los niños con crema, miramos el factor de protección, incluso lo consultamos con el médico, pero recuerdo que cuando yo era pequeño no nos ponían nada, en todo caso Nivea cuando volvíamos a casa. Y de jovencitos peor porque nos poníamos bronceadores y aceites para quemarnos y ponernos morenos, recuerdo algún amigo que se echaba Coca-cola por el cuerpo para coger color. Y ahora es todo lo contrario.

A VUELA PLUMAFederico Quevedo es de los pocos periodistas que dominan a fondo el mundo de la economía, un campo árido y complejo que espanta a la mayoría. Esto y sus conocimientos del entramado político actual le ha empujado a escribir un libro junto a su compañero Daniel Forcada en el que denuncian y cuentan los muchos casos de despilfarro que ocurren en la política española. Después de su lectura creo que serán pocos los políticos que le llamen para darle las gracias.