Tribeca, el mar de Sevilla

La carta de este espacio sevillano, con sello de Francisco Barrionuevo, cambia prácticamente cada mes. ¿El motivo? La excelente calidad de las materias primas que ocupan su despensa. Esta es la clave de su éxito. Situado en la zona de La Buhaira, al frente de sus fogones se encuentra Pedro Giménez, quien después de su estancia en Hong Kong decidió inaugurar en 2002 su propio restaurante en el que elaborar una cocina personal. Se deja seducir por los tesoros de la naturaleza y del mar, que alimentan unas recetas modernas en las que los sabores de la memoria se fusionan con nuevas texturas.

La propuesta la componen platos improvisados, ya que hasta el mismo día del servicio no sabe con qué pescados va a contar (seleccionados siempre en las lonjas de Sanlúcar, Rota, Conil y Barbate) ni qué carnes va a ofrecer a sus clientes, que pueden observar al cocinero mientras manipula los alimentos a través de un mueble de madera que preside la sala. Sepa que el pescado crudo es una de las especialidades, así que muy recomendable es el tartar de carabineros y tuétano. Para empezar, raviolo de boletus y lengua de ternera estofada, o vieiras con manzana y jugo de asado. El jarrete de lechazo estofado es una apuesta segura para los carnívoros. Para quienes no perdonan el postre, el tocino de cielo Calbarro.

Restaurante:Tribeca

Dónde: C/ Chaves Nogales, 3. Sevilla.

Tel.: 954 426 000.