Castilla y León

Herrera siempre llega con pactos a las Conferencias de Presidentes

El presidente de Castilla y León es el único jefe de los ejecutivos autonómicos que ha asistido a todas las cumbres que se han celebrado desde que arrancaran en 2004

Juan VIcente Herrera durante su participación en la V Conferencia de Presidentes
Juan VIcente Herrera durante su participación en la V Conferencia de Presidenteslarazon

El acuerdo sobre la financiaciación autonómica y local, sanidad, política de inmigración, educación, industria o Política Agraria Común (PAC) han estado en su cartera, pero también asuntos propios de la Comunidad como la defensa de la minería o l rechazo «caprichoso» al cierre de Garoña.

El presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, siempre ha acudido con propuestas de pactos a las Conferencias de Presidentes. El acuerdo sobre la financiaciación autonómica y local, sanidad, política de inmigración, educación, industria o Política Agraria Común (PAC) han estado en su cartera, pero también asuntos propios de la Comunidad como la defensa de la minería o l rechazo «caprichoso» al cierre de Garoña. Además, Herrera, es el único titular de los ejecutivos autonómicos que ha asitido a todas las cumbres desde que José Luis Rodríguez Zapatero las inaugurara en 2004.

Y, esta vez, no va a ser menos, ya que acudirá está martes a Madrid con una estrategia de despoblación bajo el brazo de índole nacional, uno de los grandes desafíos de futuro no sólo para la Comunidad sino para el resto de España.

Pero en las primeras citas, 2004, 2005, 2007 y 2009, todas ellas bajo el Gobierno de Rodríguez Zapatero, ha salido con un sabor «agridulce», informa Ical. Así, en la cita de 2005, cuando el Ejecutivo socialista puso en la mesa más de 3.000 millones para la financiación de la sanidad, el presidente castellano y leonés declaró sentirse como el «Tío Gilito y sus sobrinos». «El Gobierno ha cosechado un sonoro fracaso por su inadmisible improvisación», afirmó al salir de la última cumbre convocada por el socialista, que resultó la más polémica, porque los presidentes populares, tras más de doce horas de reunión, se abstuvieron en la propuesta del Ejecutivo sobre el modelo económico.

Del «sabor agridulce» pasó a calificar de «contribución muy positiva» la conferencia de 2012, la primera con el presidente Mariano Rajoy, de la que Herrera salió «muy satisfecho» por el acuerdo entre las autonomías para cumplir con el objetivo de déficit y la consolidación fiscal, pero a cambio, en una cumbre de calado económico ante la crisis de España, se decidió retrasar la revisión del modelo de financiación autonómica, que todas las autonomías quieren cambiar y con el que no se sienten cómodas.

El presidente de la Junta ha realizado propuestas de pacto en todas sus intervenciones, pero los acuerdos de la Conferencia han sido escasos y algunos de ellos, como la financiación de la sanidad o el reglamento de la propia cumbre han pasado de una edición a otra.

En la cita de 2009, Herrera propuso pactos de estado por la educación y otro en favor del empleo. Ninguno de los dos se recogió, aunque sí se aceptó la propuesta de Castilla y León de que la agricultura y ganadería sean considerados sectores estratégicos y de que la PAC contara con ayudas más allá del marco de 2013. La Junta consiguió el compromiso del Gobierno para la creación del Centro Nacional del Láser vinculado a la Universidad de Salamanca, pero no se aceptó la propuesta de los de Biotecnología en León y Conservación del Patrimonio en Valladolid. Fue en la Conferencia de 2007, en la que Herrera habló de la «consideración singular» para la cuenca del Duero, recogida después en el Estatuto de Autonomía y tumbada después por el Tribunal Constitucional tras el recurso de Extremadura.

El Gobierno de Zapatero puso sobre la mesa 1.677 millones de euros adicionales para la sanidad y otros 1.365 de anticipos a cuenta de impuestos cedidos en 2005, en total 3.042 millones de euros. Herrera valoró la mejora de esa cantidad sobre los «planes iniciales», pero no dudó en decir que era un «parche» y una partida «insuficiente». «Se equivoca quien crea que es una solución definitiva a la financiación sanitaria», sentenció entonces.

Las conferencias de presidentes se estrenaron en octubre de 2004, tras el compromiso adquirido por Zapatero durante su investidura al ganar las elecciones.