Política

Consejo de Ministros

La fórmula tramposa de Mas

La Razón
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A pocos días de la Diada de Catalunya, Rajoy y Mas parecen incapaces de encontrar una salida a un conflicto que no ha hecho sino agravarse. Como si las revelaciones del caso Pujol no hubieran afectado profundamente a su posición política, Mas repite la salmodia del derecho a decidir, y se empeña en defender una fórmula ineficaz pero sobre todo, tramposa. Porque los catalanes, como todos los españoles, llevamos 35 años decidiendo libremente, y esas decisiones se han plasmado en la Constitución, primero, y luego en las leyes. Quebrantar la ley supone, por tanto, no respetar la decisión de los ciudadanos expresada libre y democráticamente; y esa amenaza está implícita en el mensaje de Artur Mas. Como lo está la imposición a todos catalanes a que optemos por una sola de nuestras identidades: que elijamos entre ser españoles o ser catalanes. Los socialistas estamos convencidos de que el presidente de la Generalitat no puede ni debe colocarnos ante esa disyuntiva, ni provocar un desgarro de consecuencias imprevisibles; y no aceptamos iniciativas que vulnerarían la ley y agrandarían aún más las fracturas. Pero también pensamos que Rajoy, como presidente del Gobierno español, no puede seguir instalado en el inmovilismo, como si el aumento de la tensión que se vive en la sociedad catalana, es decir, en una parte de España, no fuera con él. Por ello, estamos empeñados en trabajar por el entendimiento y por la convivencia. Queremos llegar a acuerdos para conjugar unidad y diversidad; para que quienes hemos vivido juntos durante siglos sigamos viviendo juntos; acuerdos que, respetando las normas, sean refrendados por el voto de todos los ciudadanos. Votar, sí. Pero primero acuerdo y luego urnas. En suma, queremos cambiar la Constitución, queremos un Estado Federal (no es por casualidad la forma de Estado más extendida del mundo) y queremos revitalizar los valores que nos han dado el periodo más largo de democracia y paz de nuestra historia: la concordia, la convivencia y la voluntad de todos juntos de vivir en paz.