Delincuencia

Robos: las sucursales en fin de semana, el objetivo más frecuente

Madrid es la región preferida por las bandas especializadas en reventar bancos, con el 43% de las incidencias, pero los locales comerciales siguen siendo el blanco preferido de los delincuentes, seguido de las viviendas.

Desde que España está en nivel 4 de alerta antiterrorista, los agentes de Subsuelo revisan con frecuencia los 2.000 kilómetros de galerías que discurren bajo tierra
Desde que España está en nivel 4 de alerta antiterrorista, los agentes de Subsuelo revisan con frecuencia los 2.000 kilómetros de galerías que discurren bajo tierralarazon

Madrid es la región preferida por las bandas especializadas en reventar bancos, con el 43% de las incidencias, pero los locales comerciales siguen siendo el blanco preferido de los delincuentes, seguido de las viviendas.

No es que la mayoría de los robos que se producen en la Comunidad sean en bancos, es que Madrid es la región española con mayor número de incidencias registradas en sucursales bancarias, muy por encima de la media del resto de España. El objetivo preferido por las bandas siguen siendo los pequeños establecimientos y, por su puesto, las viviendas particulares; éste último, vía crucis de las comisarías locales y de distrito de la Policía Nacional los últimos dos años.

Pero según el informe anual sobre actos delictivos en 2016 elaborado por Techco Security, en España registraron 49 incidencias en sucursales bancarias y 21 de ellas fueron en la Comunidad de Madrid, lo que supone casi un 43 por ciento del total. Si bien no son cifras absolutas o extrapolables, pueden servir para hacerse una idea global de la situación.

De estos 21 ataques a bancos, cinco de ellos (el 23,8 por ciento) se produjeron en agosto, siendo el mes más repetido. Once de ellos, además, (el 52,3 por ciento) fueron a durante el fin de semana.

La mayoría de los delitos, según la empresa, fueron cometidos con las sucursales bancarias cerradas al público, normalmente en horario de madrugada.

Aunque es lo más frecuente, no siempre ha ocurrido así: de todos los hechos delictivos, tres fueron atracos; es decir se produjeron con la sucursal abierta al público y mediante el uso de la intimidación. Sin embargo, en cuatro de los delitos, el objetivo era directamente el cajero automático.

En tres, habían realizado un butrón y en el resto de ocasiones se accedió a la sucursal mediante las puertas o cristales de la fachada.

Y aunque Madrid se lleva la palma, con 10 delitos, le sigue muy de cerca Alcalá de Henares con 9 delitos. Alcobendas y Camarma de Esteruelas completan la lista. El verano y los fines de semana y la madrugada son, en términos generales, el momento escogido por las bandas delincuenciales para «trabajar» no sólo en sucursales bancarias. Así, según el mismo informe, el 40,6 por ciento de los delitos perpetrados en Madrid se registraron entre las 00:01 y las 4:00 horas de la madrugada. El 37,5 por ciento se produjeron durante el fin de semana y el 28 por ciento durante los meses de verano.

Las preferencias de estas bandas no han cambiado. Su blanco más habitual sigue siendo las pymes (acaparan el 39 por ciento), seguido de las viviendas no habituales (34%), las sucursales bancarias (16,4%) y estaciones de servicio (5,4 por ciento).

Todos estos datos sitúan a Madrid como al quinta comunidad autónoma con mayor número de hechos delictivos detectados en 2016. Además, según el informe anual de esta empresa, los delitos detectados en la región han aumentado un 12 por ciento con respecto a los de 2015.

Según los datos del Ministerio de Interior en su último balance de criminalidad (de septiembre a diciembre de 2016) se produjeron 374.184 delitos y faltas (casi 10.000 más que en el mismo periodo del año anterior). Los hurtos (150.543) siguen siendo los más numerosos.

Pero el gran incremento de los robos en vivienda desde 2014 han traído de cabeza a los responsables policiales, especialmente en periodos vacacionales. A la vuelta de las vacaciones de Navidad, Semana Santa y verano la oleada de denuncias en las comisarías dejaba en cuadro a los grupos policiales encargados de estas investigaciones. En ocasiones, no había suficientes agentes de Científica disponibles para ir a realizar las inspecciones oculares a los domicilios y las víctimas tenían que esperar sin tocar nada incluso varios días, según fuentes policiales. Pero tras el Plan Domus, creado ad hoc contra el robo en viviendas, y las operaciones Aikon (I y II) en las que la Policía Nacional ha golpeado a la mafia georgiana encargada que un alto porcentaje de los asaltos a viviendas que se producían en Madrid, se ha notado un considerable descenso en este tipo delictivo.