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Sanidad autoriza la venta en farmacia de la vacuna contra la meningitis B

Bacteria de la meningitis
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El Ministerio de Sanidad confirma que «en los próximos meses» este fármaco podrá adquirirse en las boticas españolas.

Han sido varios meses de lucha, sobre todo por parte de las familias de Galicia, pero ayer, por fin, el Ministerio de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad dio el paso que le reclamaban y anunció su reconsideración sobre la dispensación de la vacuna contra la meningitis B. Sanidad confirmó a LA RAZÓN que este fármaco va estar disponible en las farmacias de toda España: «La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) evalúa de forma continua los medicamentos autorizados. En el caso de la vacuna de la meningitis B, calificada como de uso hospitalario, la Aemps, a la vista de los datos disponibles, va a tramitar el paso de esta vacuna a la oficina de farmacia en el menor tiempo posible». Fuentes sanitarias no saben determinar aún cuándo van a empezar a llegar a las farmacias de nuestro país, pero, como aseguró en la tarde de ayer el ministro de Sanidad, «será una cuestión rápida» en cuanto «termine el trámite y se autorice».

Con esta decisión, Alfonso Alonso atiende la petición que la Xunta de Galicia lleva realizando desde hace varios meses después de que aparecieran varios casos de meningitis en colegios gallegos. El pasado mes de agosto la Aemps autorizó la primera vacuna que existe contra el meningoco B, la causa más frecuente de meningitis bacteriana y el responsable de siete de cada diez casos de esta enfermedad en nuestro país. En 2013, de acuerdo con los datos del Instituto de Salud Carlos III, se registraron más de 300 casos. A pesar de que en casi todos los países de la Unión Europea determinaron que esta vacuna se podía dispensar libremente en farmacia –con la preceptiva prescripción médica–, España decidió que sólo se daría en las farmacias hospitalarias para ciertos grupos de riesgo con inmunodeficiencias o en caso de brotes epidémicos. Así lo aseguró ayer el Ministro: «La política del Ministerio ha sido hasta ahora garantizar la vacuna cuando existía un brote», aunque él mismo ha reconocido que se podía adquirir en boticas de «países del entorno». Con estas palabras admitía que familias gallegas cruzaban la frontera a Portugal para adquirir el medicamento. La Fundación Irene Megías que lucha contra la meningitis, se ha implicado directamente en la batalla de estos padres, «aunque no somos una entidad especialmente reivindicativa. Es más, solemos trabajar codo con codo con el Ministerio, pero esta situación nos parecía absurda», afirma a este diario el director general de la entidad, Santiago Blanco. «Todos los colegas europeos aprobaron su venta en farmacia y esto ha producido un perjuicio de los padres españoles. No es lógico», insiste. Blanco es médico y conoce de cerca esta enfermedad: «Mi hija falleció en 2006 por meningitis. Sé que ninguna vacuna es cien por cien efectiva pero todo lo que se pueda hacer para prevenirla es bienvenido». Su movimiento no ha sido aislado y han conseguido recoger «más de 5.000 firmas en papel y 95.000 a través de la plataforma on-line».

José Carballo es uno de los cientos de padres gallegos que han cruzado la frontera para comprar la vacuna. En un primer viaje a Valença do Minho adquirió la primera dosis para su hijo y su ahijada, y dentro de un mes tendrá que volver a esta localidad portuguesa que limita con Galicia para la segunda. José conoce a muchos otros padres que han hecho lo mismo. De hecho, en la clase de su hijo sólo quedan unos ocho niños sin vacunar. Reconoce que las dos dosis «cuestan 200 euros», que él ha tenido que recortar de otra cosa para comprarla porque «vivimos al día». Asimismo, explica que los pediatras con los que ha hablado están «indignados» porque esta vacuna no esté disponible en España y que todos ellos le han recomendado su administración, aunque él ya lo tenía claro ante una enfermedad tan letal: «Yo, por la salud de mi hijo, voy a Portugal y a China si hace falta».

El presidente de la Xunta insistió ayer en que «la prioridad» de su Gobierno es «evitar el desasosiego» de los ciudadanos y que tuviesen que «acudir a Portugal» a comprar la vacuna. Además del de los padres, el primer frente que se le abrió al Ministerio con la decisión de restringir la venta del fármaco, fue el de los pediatras que, en agosto de 2014, se posicionaron en contra de esta decisión: «Este comité (asesor de vacunas) considera que la vacuna presenta un perfil de vacuna sistemática a incluir en los calendarios de todas las CC AA. Es recomendable y debería estar disponible libremente para la administración a todos los niños a partir de los dos meses de edad». Ayer, ante el nuevo posicionamiento, desde la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención primaria (Sepeap) sostenían que «se van a beneficiar muchos niños».