Alcaraz se lleva un susto ante Dzumhur, pero se cuela en octavos de Roland Garros con un partidazo

Por mucho que los tenistas traten de ser fríos en pista, de no expresar sentimientos para no dar pistas a los rivales de cómo se encuentran, a veces es inevitable. Eso le sucedió al bosnio Damir Dzumhur en varios momentos de su partido de tercera ronda de Roland Garros contra Carlos Alcaraz. Por ejemplo, cuando en el segundo juego del segundo set corrió para intentar llegar a una dejada del español y se quedó lejísimos. El murciano amenazó cargando el brazo para soltar la derecha, y a la que notó que su rival dio un pequeño paso atrás para prepararse, cambió de idea y recurrió a la sutileza, milimétrica, imposible para su oponente aunque la hubiera leído antes. Dzumhur resbaló y cuando vio que la bola daba el segundo bote, abrió las brazos, en señal de pura desesperación. No pudo reprimir mostrar lo que le pasaba por la cabeza.

La reacción de Dzumhur

Poco después, cuando tenía la posibilidad de hacer un break a Alcaraz, no lo logró porque el número dos del mundo hizo un saque-red, que finalizó con una volea cortita, otra dejada, a la que el bosnio respondió con una sonrisa que venía a significar lo mismo que el gesto de antes. Viendo el juego que estaba desplegando Carlos, Dzumhur decidió que era la hora de pasárselo bien, y si eso le llevaba a apretar el partido, pues mejor; y si no, pues iba a perder igualmente, pero de otra manera. Su tenis y su actitud le condujeron lejos, a dar un susto importante al defensor del título, pero no tanto como para dar la sorpresa: 6-1, 6-3, 4-6 y 6-4.

Por momentos el encuentro se convirtió en un intercambio de golpes de talento. El bosnio le pudo devolver a Carlos varias de las que le había hecho: que si un tiro flojo cuando parecía que iba a hacer un remate, con el correspondiente aplauso del español; que si varias contradejadas a las que llegó... En el juego de habilidad durante un rato largo era mejor el bosnio, que ganó el tercer set y comenzó el cuarto con un break. Después de ser tratado por el fisio por unas molestias, flotaba en la pista, corría, llegaba a todo y si tenía que tirar fuerte, iba a la línea, y si tenía que tirar suave, le salía la delicadeza.

Empezó a frustrarse Carlos, que sufrió lo que tantas veces hace él a los rivales. El rey de las dejadas no podía con las que le hacía su oponente. Le cambió la expresión de la cara, por momentos se empeñó en romper la bola y se le dispararon los errores no forzados, pero supo controlarse y aceptar lo que estaba pasando. Entre puntos de "highlights" de uno y de otro, recuperó el break el murciano en el cuarto set para ponerse 3-3 y cortar la reacción.

Levantó los brazos a un público que vio recompensado con un gran espectáculo el precio que pagó por la entrada. La magia de Dzumhur no se había acabado, pero a Alcaraz le quedaban todavía trucos y muchas piernas, porque la pelota del siguiente break se la generó de manera increíble, en un punto que estaba perdido una vez, pero llegó al golpe desde el fondo, y otro y otra, con la pelota corta, pero también se estiró el número dos para forzar el error del bosnio. Lo concretó con un passing de revés paralelo para ponerse 5-3. Tampoco eso frenó a Dzumhur, que igualó la rotura, pero sucumbió con su saque. Firmó posiblemente uno de los mejores partidos de su vida, pero no fue suficiente ante Alcaraz, que en octavos de final se enfrentará a Shelton, el cañonero estadounidense.

La jornada del sábado 31 de mayo

Carlos fue el único español en pista este viernes. El sábado 31 de mayo buscarán su presencia en octavos de final las dos tenistas nacionales que siguen en el Grand Slam francés en el cuadro individual: Paula Badosa se enfrenta a Kasatkina (a las 11:00 horas), la rusa que representa a Australia desde este 2025, y Jessica Bouzas se las verá con la estadounidense Baptiste (sobre las 15:00 horas). En el cuadro masculino, turno para Jannik Sinner, que tiene una jornada complicada ante el checo Lehecka sobre las 13:00, mientras que Djokovic juega contra Misolic, 153 del mundo, en el turno de noche, 20:15; y Alexander Zverev contra Cobolli alrededor de las 14:00..

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