Ángel Olivares: "La disuasión es ahora más imprescindible que nunca"

Ex secretario de Estado de Defensa entre 2018 y 2020, cuando el Gobierno dio un empujón a los programas de armamento e inició el aumento del gasto militar, Ángel Olivares preside desde junio la Fundación Feindef, encargada de organizar la Feria Internacional de Defensa y Seguridad homónima. Un evento que, con el apoyo del Ministerio, se ha situado entre los más destacados del mundo. En un momento de conflictos, inestabilidad y rearme, defiende la industria española sin pestañear, aunque reconoce la necesidad de «incrementar nuestra capacidad de producción».

En los conflictos actuales vemos nuevas formas de combatir por las nuevas tecnologías. ¿No evoluciona todo muy rápido?

No diría que esté cambiando. Lo que se ha puesto de relieve es la necesidad de fortalecer todo lo que se refiere a la producción industrial. Se ha demostrado que las reservas existentes en el mundo eran escasas. Desde el punto de vista de avances tecnológicos, se está poniendo de manifiesto la experimentación de productos que no se habían llevado a un conflicto real.

¿Estos conflictos ayudan a que la gente vea la necesidad de invertir en Defensa?

Sin duda. Antes del conflicto de Ucrania, en España solo un 36-37% de los españoles consideraba necesario incrementar el gasto en defensa. Ahora, la mayoría considera que es conveniente.

¿Hay riesgo de que los conflictos se contagien a otros países?

La historia nos enseña que un conflicto bélico se puede propagar por circunstancias a veces muy aleatorias. Pero creo que el mundo tiene la suficiente experiencia y madurez como para poner todos los medios para encapsular los conflictos.

¿España disuade a potenciales enemigos?

Es el objetivo de la Directiva de Defensa Nacional y la Estrategia de Seguridad Nacional. Las principales armas que tiene el mundo son la diplomacia y las normas internacionales, pero cuando son conculcadas, el siguiente eslabón es que exista una disuasión real, eficaz, creíble y que el potencial adversario conozca que hay voluntad de aplicar esos sistemas de armas que se usan como disuasión. La disuasión es ahora más imprescindible que nunca. España tiene capacidad para desarrollar tecnologías avanzadas y está creciendo en cuanto a la modernización de capacidades de las Fuerzas Armadas. Es un país bien dotado, sin perjuicio de que se puede mejorar.

"España tiene capacidad para desarrollar tecnologías avanzadas y está creciendo en cuanto a la modernización de capacidades de las Fuerzas Armadas"

¿Qué carencias tienen las Fuerzas Armadas españolas?

La primera es la principal deficiencia que ha detectado la UE: la necesidad de tener una industria con capacidad para atender demandas crecientes en tiempos muy cortos. En segundo lugar, hay que continuar desarrollando proyectos de avanzada tecnología que incrementen la credibilidad de nuestra disuasión. Y en tercer lugar, los conflictos han demostrado la necesidad de fortalecer aquellos instrumentos de cooperación entre países, es decir, fortalecer la capacidad de la UE para desarrollar una política común de nuevos proyectos, de compras conjuntas y de capacidad de producción.

El presupuesto actual, ahora prorrogado, ¿es suficiente?

Un presupuesto prorrogado nunca es bueno. Otra cuestión es que se puedan solventar los problemas que la prórroga cree. España ha elaborado una senda de crecimiento muy sensible del presupuesto de Defensa para alcanzar el 2% del PIB en 2029, una senda que a veces incluso desborda las posibilidades de la industria nacional. Los graves problemas que hubo para garantizar el sostenimiento, creo que están parcialmente solventados.

Estamos a la cola de la OTAN...

Hay que matizar el dato, porque el PIB español crece más que en el resto de países. Y en los últimos diez años, el crecimiento per cápita del gasto en Defensa en España es el doble del incremento medio de los países de la Alianza.

¿Llegaremos entonces al 2%?

Creo que se conseguirá con dificultades, porque supone un incremento muy importante en números absolutos.

¿Podrían ser los socios del Gobierno, que siempre han demostrado poco interés por la Defensa, un problema para alcanzarlo?

Desde mi punto de vista, los hechos demuestran que esa no es ninguna dificultad. El Gobierno, en materia de política de Defensa ha actuado colegiadamente y ha desarrollado una política que ha supuesto un incremento de los presupuestos de Defensa muy considerable. En el último ejercicio, de un 26%. Los hechos y los datos demuestran a lo contrario.

"Se conseguirá llegar al 2% del PIB con dificultades, porque supone un incremento muy importante en números absolutos"

En su etapa en Defensa se impulsaron grandes programas: 8x8, submarinos... ¿Cómo los ve a día de hoy?

Los veo muy bien. Son proyectos que califico de Estado y estratégicos. Y profundamente innovadores. Creo que el desarrollo de los programas va razonablemente bien y se ha demostrado al mundo la capacidad que tiene España de desarrollar proyectos de vanguardia tecnológica, demostrando que es capaz de participar en cualquier proyecto multinacional por complejo que sea e incluso liderarlo.

Pero siguen los retrasos...

Si España no tuviera clara la importancia de tener una base industrial que dé soporte a las capacidades de nuestras Fuerzas Armadas y que garantice una cierta soberanía y autonomía estratégica, acudiría al mercado. La industria de Defensa es una industria innovadora y si no participara en esos proyectos se estancaría en su evolución o continuaría siendo de segundo nivel. Además, cuando estamos ante proyectos que se fundamentan en la investigación hay muchas incertidumbres y es explicable que haya retrasos y sobrecostes.

¿Cómo ve hoy a esa industria?

Tiene muchísimo mérito. Consiguió crecer y desarrollarse en una época, en el año 2008 y siguientes, en la que había reducciones presupuestarias. ¿Por qué? Porque destinó gran parte de sus productos a la exportación, prácticamente el 70 o el 80% de su facturación. Es una demostración clara de la calidad que tiene. Pero tiene el mismo problema que la industria de Defensa en Europa, que hay un exceso de fragmentación. Es necesario agrupar, concentrar y aprovecharse de las economías de escala, que haya proyectos multinacionales o que nuestros productos tengan capacidad de ser vendidos en mercados exteriores.

¿El ciudadano de a pie conoce la industria de Defensa nacional?

No. Necesitamos hacer un esfuerzo. Los españoles desconocen que crea mucho empleo, de mucha calidad y bien retribuido. El talento español no conoce bien las capacidades que tiene la industria de Defensa. Por eso, en Feindef vamos a intentar desarrollar un proyecto para darla a conocer al mayor número de universidades públicas y privadas.

"El talento español no conoce bien las capacidades que tiene la industria de Defensa"

¿Puede competir de tú a tú con la de otros países?

Como grandes sistemistas o grandes empresas con capacidad para desarrollar un sistema de armas completo, seguramente no, pero tenemos nichos tecnológicos que están en primer nivel mundial.

Ferias como Feindef, ya madura, ¿ayudan a dar a conocer más la industria?

Feindef es una historia de éxito. Se ha colocado entre las primeras ferias del mundo. Es un gran escaparate, pero el marco ideal de desarrollo de Feindef es que sea un lugar en el cual se facilite la cooperación industrial, tanto interna como con las empresas internacionales que nos visitan.

"Feindef es una historia de éxito. Se ha colocado entre las primeras ferias del mundo"

¿Notan el apoyo del Gobierno?

Yo creo que la industria española es consciente que Feindef no se podría realizar sin la colaboración del Ministerio de Defensa.

¿Qué esperan en el futuro?

Que Feindef 2025 continúe creciendo. Ya tenemos las cifras de compromisos y superan a 2023. Y es espero que en 2027 y 2029 sea una feria en la que se desarrollen políticas concretas, con más intensidad, que sea una feria generalista pero que combine la profundización en políticas de atracción de talento, políticas de tecnologías disruptivas...