El Mitsubishi más español

Un nuevo modelo de Mitsubishi está consiguiendo revolucionar el panorama de la marca japonesa en España. Tras varios años con una oferta más limitada, llega el momento de que la firma japonesa incremente de manera sustancial sus ventas en nuestro país con un producto de última generación. Se trata de la reciente evolución del ASX, un SUV del segmento B que presenta distintas motorizaciones, de gasolina y con diferentes tipos de hibridación y que, fruto de los acuerdos entre las tres marcas de la llamada Alianza Renault, Nissan y esta marca nipona, se fabrica en la factoría de que Renault tiene en Valladolid. Su precio competitivo, a partir de 19.490 euros incluidas promociones, auguran un nuevo impulso a las matriculaciones de Mitsubishi en España y, además, incrementa la oferta de esta firma japonesa en los concesionarios. Su red comercial ha recibido buenas noticias en estos últimos meses ya que, al inicio de fabricación de este ASX se une la llegada inminente de la última generación del compacto Colt.

En efecto, con este modelo, Mitsubishi va a completar una gama de modelos que, hasta ahora, se compone del Space Star, el Colt y el Eclipse Cross. El nuevo ASX, que está disponible en los concesionarios desde esta primavera, es un SUV del segmento B, es decir, el sector del mercado más importante en nuestro país y que copa el 28% de las ventas. Un compacto de dimensiones medias, pero con una gran habitabilidad interior. Un modelo que utiliza la misma plataforma que encontramos en el Renault Captur. Es decir, un chasis y una mecánica ya sobradamente probada y robusta. Pero Mitsubishi ha completado el automóvil con elementos distintivos propios. Destaca un atractivo frontal presidido por los tres diamantes que forman el escudo de la marca. Y en la parte posterior, las luces led en forma de C invertida son un acierto estético que encuadran las letras de la firma japonesa en relieve.

Desde el punto de vista mecánico, el conductor puede elegir diferentes alternativas. Desde la opción de un motor de gasolina de tres cilindros turbo de 1,0 litros, que rinde 130 caballos y que es la opción más básica, hasta la mecánica híbrida enchufable con un motor térmico de 1,6 litros, que llega a los 160 caballos y que se beneficia de las ventajas de la etiqueta Cero. Entre medias, están otras versiones, como la de motor 1,3 de cuatro cilindros y media hibridación, con potencias de 140 o 160 caballos a elegir o la de motor 1,6 y mecánica híbrida recargable que ofrece 145 caballos. Tanto esta versión como la Phev incorporan dos motores eléctricos colocados sobre el eje delantero.

En el interior nos encontramos con un coche muy espacioso en el que se acomodan sin problemas cinco adultos y sus correspondientes equipajes. Tras el volante multifunción el conductor ve todos los elementos del funcionamiento mecánico en una pantalla muy accesible y, en posición central del salpicadero, otra pantalla da acceso a los habituales complementos de información y entretenimiento. El conductor puede elegir entre tres tipos de conducción en función de las necesidades que precise en cada momento. Estas tres alternativas son: Eco, Sport y My sense y, en este último caso, puede configurar algunos parámetros a su gusto.

Desde el punto de vista de ayudas a la conducción, cuenta con todos los sistemas habituales en los coches de nivel que nos acercan mucho a niveles importantes de conducción autónoma, tales como control de crucero, adaptativo, aviso de cambio de carril, frenada de emergencia en casos de colisión inminente, detector de ángulo muerto, especialmente útil en los casos en que nos puedan adelantar motoristas o ciclistas, detector de peatones, además de otros complementos como recarga del teléfono sin cables, bola trasera de remolque retráctil, etc.