Cultura

Conciertos

Bryan Adams, el príncipe del "mainstream”

El rockero canadiense mostrará su repertorio para todos los públicos en el cierre de su gira por España

Sevilla.- Bryan Adams llega este jueves al Pabellón San Pablo dentro de su gira 'Shine a light'
El músico canadiense Bryan Adams arranca este domingo en Granada su gira 'Get Up Tour' con el que será su único concierto en Andalucía. Será a las 21,30 horas en el Palacio de Deportes, adonde está previsto que acudan unas 4.000 personas, el 50 por ciento del aforo que permite este recinto deportivoYOUTUBE (Foto de ARCHIVO)23/01/2016larazonYOUTUBE

Bryan Adams es puro “mainstream”. Hace música para todos los públicos y sin ofender. Es cierto que una vez estuvo cerca de dar el salto, pero su conformismo le dejó en lo que estaba: ganar mucho dinero sin pretensiones artísticas más elevadas. Que no es poco, por otra parte. El rubio picado de viruela cerrará su gira española con conciertos en Madrid (9 de diciembre), Bilbao (10) y Barcelona (11). Recuerdos generacionales y garantía de pasar un buen rato.

Lo cierto es que la vida de Adams es mucho más interesante de lo que sugiere su imagen. Nacido en Kingston, Ontario, un 5 de noviembre de 1959, pronto sintió inclinación hacia el rock. Su padre, diplomático de profesión, lo odiaba. El camino le quedó diáfano con el divorcio de sus progenitores. Adams elegiría vivir con su madre en Vancouver para dar rienda suelta a su devoción. “You want it, you got it” (1981) se llamó su anodino debut discográfico, pero mucho más certero sería “Cuts like a knife”, dos años después, en el que comenzó a definir su sonido: riffs sencillos y directos junto a melodías distintivas que casaban con su voz ronca no se sabe cómo. "Reckless” (1984) sería su consagración con un tipo de sonido tan distintivo de los 80, pura radiofórmula. Eso sí, con fantásticas canciones y exitazos como “Summer of 69”, “Run to you”, Somebody”, “It’s only love” con Tina Turner y eso de “Heaven” que en la época se calificaba como “baladón” por parte de los rockeros brutos pero nobles. La gira mundial no haría otra cosa que aumentar la popularidad de Adams, incluida la grabación de un estupendo y lluvioso concierto en Werchter, Bélgica, transmitido en televisión y publicado años después por aclamación popular. Ahí hacía hasta el “I fought the law” en homenaje a los Clash, una de sus grandes influencias.

El canadiense inauguraría la década de los 90 con “Waiking up the neighbours”, otro pelotazo, al que siguió una nueva gira triunfal. Aquel disco fue grabado por Robert “Mutt” Lange, el principio y el fin de todo para Adams. El ingeniero era poseedor de un estilo definido –a veces costaba diferenciar a sus artistas entre sí- y entre ambos facturarían una tremenda serie de éxitos. Adams estaba en la cima, él era parte de aquella época, de aquella generación, de aquel sonido tan característico, de la radiofórmula, de la MTV y todos los clichés.

Y como en aquella época uno no estaba en lo más alto si no colocaba un éxito en una banda sonora, Adams coló la melosa “(Everyting I do) I do it for you” en “Robin Hood: príncipe de los ladrones”. Y en 1994 llegaría el triple salto mortal con “All for love”, para “Los tres mosqueteros”, con la reunión del trío compuesto por Rod Stewart, Sting y el propio Adams. Casi nada. Y como al muchacho no había nada que le detuviera, pues siguió colaborando con mucha gente, desde Paco de Lucía hasta Luciano Pavarotti. Otra cosa eran los resultados artísticos, claro.

Luego sucedería algo consustancial a tanta sobreexposición: el muchacho se secó, se sucederían las recopilaciones para disimular la falta de creatividad y poco a poco el fervor por el norteamericano se iría disipando. Lo que ocurrió es que Adams encontró dos ocupaciones que le convirtieron en alguien muy interesante más allá de su faceta musical: abrió la Bryan Adams Fundation, con múltiples actividades benéficas, y se hizo fotógrafo. Y muy bueno, especialmente con los retratos. Así, para él posarían figuras de la talla de Mick Jagger, The Who, Shania Twain, Ray Charles, Arcade Fire, Rod Steward, Robert Plant, Billy Idol, Celine Dion, Amy Winehouse, Bryan Ferry, Lenny Kravitz, Lana Del Rey, Morrisey, Peter Gabriel, Annie Lennox y más.

Regresando a lo musical, lo más interesante que ha publicado últimamente es el estimable “Get up”, con el que cumplió uno de sus sueños: ser producido por el ELO Jeff Lynne. En este tiempo también grabó versiones de sus canciones favoritas y hasta villancicos, para continuar con el “mainstream”. Sus últimos conciertos por España se enmarcan dentro de una gira mundial en la que no faltarán abundantes guiños a la época dorada de la radiofórmula. Él formó parte sustancial de todo aquello.