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Así es Alcalá de Henares

Plaza de Cervantes/Fotos: Miguel Berrocal
Plaza de Cervantes/Fotos: Miguel Berrocallarazon

“Alcalá de Henares, que bien pareces por tus muros, torres y capiteles”. Es la letra de una copla anónima. Reconocida como Ciudad Patrimonio de la Humanidad la urbe ofrece dos mil años de historia para recorrer. Antigua Complutum romana. Ciudad de las tres culturas. Ciudad de esplendor en el Siglo de Oro. La que vio nacer a Miguel de Cervantes.

En Alcalá de Henares convergen vestigios del paso de distintas culturas. Ello se puede observar en los citados muros, torres y capiteles que la caracterizan. Así como en sus calles, plazas y edificios.

La Calle Mayor –una de las más importantes del casco histórico– es testimonio de la existencia de esas culturas. Construida en torno al siglo XII su desarrollo siguió el trazado de la calzada romana Caesar Augusta que atravesaba la primigenia Complutum. Bajo una arquitectura totalmente castellana albergaba el antiguo barrio judío, en el cual siempre hubo una gran actividad comercial situada en los soportales que conformaban la vía. Actualmente es la calle soportalada más larga de Europa.

Al pasear sobre suelo que fue romano, castellano y judío, contemplando las columnas de piedra que sustituyeron a las de madera, se va perfilando el pasado de la urbe.

Ubicado en la Calle Mayor se encuentra el Museo Casa Natal de Cervantes. En esta vivienda el célebre autor del Quijote vivió tan solo escasos cuatro años. Junto a la entrada, asemejando a centinelas, las esculturas de Don Quijote y Sancho confieren al lugar una importancia inexplicablemente fascinante.

Los soportales que antaño alojaron tiendas hoy resguardan en su mayoría restaurantes donde reponer fuerzas cual si fuéramos caballeros andantes. En el nº 75 se encuentra un establecimiento que, quizás por la carta que ofrece, podría decirse que recoge la esencia multicultural de Alcalá de Henares. Es un acogedor local de cocina francesa. Al entrar parece pequeñito, pero en el piso de arriba dispone de un amplio salón que recibe luz natural a través de unos históricos balcones. Es el Panam Restaurante. Su nombre evoca la magia de París, su terraza exterior recuerda la costumbre parisina de las mesas en las calles, y sus platos impiden olvidar el “hambre” de mundo que tenía Don Quijote.

Conocida por el lema “Ciudad del Saber” Alcalá de Henares es sede de la que fue una de las más importantes universidades renacentistas europeas. En sus aulas se formaron reconocidas personalidades como Calderón de la Barca, Lope de Vega o Tirso de Molina entre otros. Compitió en estatus con la Universidad de Salamanca y pasó a la historia por doctorar a la primera mujer que cursó en España estudios superiores.

La imponente fachada y patio interior reflejan sus más de quinientos años de existencia. Sus muros acogen miles de estudiantes venidos de diversos puntos del planeta. Alumnos que habitan en la ciudad dotándola de una atmósfera cosmopolita.

Como embajadores de un trocito de mundo de habla hispana, se halla un lugar que acoge a autóctonos, viajeros y estudiantes que viven en Alcalá de Henares temporalmente. Es el restaurante Pibill Bistro y representa el auténtico sabor de México. En una ciudad multicultural no pueden faltar espacios alternativos. Pibill Bistro es algo más que comida mexicana, es una opción que enseña que el orbe tiene incontables sabores y tienta a descubrirlos. En sus platos cada bocado es una página escrita de un libro elaborado de manera artesana, como si el producto fuera tinta que dibuja letras con matices culinarios y sentido. Sea como sea, Pibill Bistro “escribe” un sabor que merece ser “leído”.

Quizás el vuelo de blancas cigüeñas mientras se recorre la ciudad propicie contemplar el skyline complutense admirando sus muros, torres y edificios; descubriendo los detalles que delatan que fue judía, cristiana y musulmana asentada sobre una antigua población romana.

Junto a una capilla, la del Oidor, una torre-campanario ofrece una panorámica inigualable de la ciudad de Cervantes. Como curiosidad en el interior de la capilla se encuentra la pila donde fue bautizado aquel que creó a uno de los personajes de ficción más entrañables: Miguel de Cervantes. En la plaza que lleva su nombre su escultura recuerda que la locura de la razón en cualquier momento puede adueñarse.

Al terminar la ruta de lo imprescindible, nada mejor que un descanso para tomar perspectiva de todo lo visto. Un local temático, como Mombasa Alcalá, ofrece el ambiente perfecto para relajarse tomando un café, batido, o cóctel. Su decoración africana, su música suave y su luz tenue incitan a dejarse llevar a otra época como hizo Don Quijote, y así sentirse más cerca del ingenioso hidalgo, de Sancho Panza, de Rocinante, de Dulcinea...; de ese “placer que existe en la locura y que solo los locos conocen”; de ese vértigo que se siente ante lo desconocido; de esa fascinación que nos arrastra más allá de los límites del tiempo, del espacio..., de lo seguro. Existen experiencias que despiertan nuestros sentidos, y tras ellas, nunca volvemos a ser los mismos.

Tour organizado por Nattivus.

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