Zika, una amenaza para las gestantes

Los casi 4.000 casos de microcefalia de bebés de madres infectadas y los de aborto y muerte fetal en el centro y sur de América alertan a la comunidad científica internacional

No existe ni vacuna ni tratamiento (salvo el sintomático) para frenar al virus Zika (ZIKV), el último en saltar a los medios de comunicación y que, junto al Dengue y al Chikungunya (todos ellos transmitidos por el mosquito Aedes), amenazan al 40 por ciento de la población mundial.

Y ahora, los casos América Latina, así como los recientes en Londres y Cataluña han puesto en vilo a las autoridades sanitarias. «El verdadero drama de esta infección ha consistido en evidenciar que el mosquito transmisor del dengue, que creíamos controlado, sigue presente en grandes áreas de Colombia y que las estrategias para su eliminación no han sido eficaces», explica a este semanario Jaime Castellanos, director del Instituto de Virología de la Universidad El Bosque de Bogotá (Colombia).

Y es que éste es, junto a Brasil, uno de los países más afectados por esta enfermedad. «El virus de Zika, que fue detectado en Brasil en 2015 y posteriormente en Colombia, es un virus emergente que debe preocuparnos. El Ministerio de Salud y Protección Social de Colombia informó de que, a 20 de enero de 2016, se habían registrado más de 13.000 casos aunque sólo han sido confirmado 800 por laboratorio, por las dificultades para hacer el diagnóstico, ya que es una prueba especializada de biología molecular», añade Castellanos.

Pese a que en España los casos no son autóctonos, sino importados por aquellos que han viajado a estas zonas, no dejan de ser inquietantes. Antoni Trilla, portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc), argumenta que algunos pacientes como los de Cataluña llegaron a España tras viajar a Florida o Hawai, lo que acerca la enfermedad a Estados Unidos. Así que vemos y veremos más casos, aunque pocos con la infección activa, ya que la fase peligrosa «se da durante los dos o cuatro primeros días».

Trilla recuerda que «la infección es benigna y asintomática en el 80 por ciento de los casos», aunque el otro 20 por ciento sí presentan síntomas de distinta índole, como fiebre, conjuntivitis, mialgia, erupción de la piel, entre otros.

Gestantes

Las que son más vulnerables y deben tener una mayor precaución son las mujeres embarazadas o aquellas que están pensando tener hijos, porque «aunque aún no está completamente demostrado, sí que se ha relacionado y cada día se ven más casos de problemas de anomalías fetales y cuadros neurológicos como el síndrome de Guillain-Barré», añade Trilla.

Este último trastorno se desencadena por muchos factores, y en este caso la infección hace que el sistema inmune ataque por error al sistema nervioso y provoque la inflamación de los nervios. «Se manifiesta como debilidad muscular, hormigueos y a veces parálisis de algún grupo de músculos. Una razón más para profundizar en su prevención y diagnóstico», añade Castellanos.

En cuanto a las anomalías fetales, éstas hacen referencia principalmente a la microcefalia. En Brasil han sido ya identificados unos 3.900 casos y además, se han producido 49 muertes de bebés con malformaciones congénitas, de las cuales en cinco se ha podido comprobar la relación con esta enfermedad.

Desde la Organización Panamericana de Salud (OPS) comunicaron que se han notificado tanto en Brasil como en la Polinesia Francesa múltiples casos de anomalías del sistema nervioso central que han sido vinculadas a brotes de Zika. «La microcefalia ha sido el signo que más ha llamado la atención de la comunidad científica. También se han descrito casos de aborto y de muerte fetal. En noviembre de 2015 el Ministerio de Salud de Brasil afirmó que «existe relación entre el incremento de microcefalia en el nordeste del país y la infección por virus Zika tras la detección de genoma del virus en muestras de sangre y tejido de un recién nacido del estado de Pará que presentó microcefalia así como otras malformaciones congénitas» y que falleció a los cinco minutos de nacer. Sin embargo, esta asociación hasta el momento no ha sido confirmada por otros investigadores.

Por su parte, el director del Instituto de Virología de la Universidad El Bosque de Bogotá sostiene que, aunque existe poca experiencia en el mundo con la enfermedad causada por virus de Zika, la epidemia en el Brasil desafortunadamente evidenció que «si la infección ocurre en mujeres embarazadas durante el primer trimestre, el bebé tiene una probabilidad de 1 entre 1000 de que tenga un pobre desarrollo neurológico que se manifiesta como una disminución en el perímetro de la cabeza al momento de nacer. En Colombia, aunque aún no ha ningún caso asociado, se puede predecir que ocurrirá de manera similar, de tal manera que se esperan por lo menos 600 casos de microcefalia en este año».

Protocolo español

En España, en la costa mediterránea abunda «el mosquito Tigre (Aedes albopictus) que también podría transmitir la enfermedad, por lo que no se descartan casos importados y tampoco que casos de transmisión autóctona, aunque no se desencadenarían brotes de importancia», asegura Trilla.

Pese a ello, representantes del Ministerio de Sanidad y de las comunidades autónomas se reunirán en el mes de febrero para ultimar un protocolo de respuesta al virus. «Será para tratar una información técnica centro europea de control de riesgo. Una revisión a nivel político para saber cómo declararlo y ver detalles más técnicos», opina Trilla que concluye que «el riesgo epidémico en realidad es bajo».

Algo que corroboró esta semana el ministro de Sanidad en funciones, Alfonso Alonso. De ahí que, tal y como revelan fuentes del ministerio, el incluirla entre las enfermedades de declaración obligatoria (EDO) sólo se haría en caso de que la enfermedad tuviera una evolución distinta a la que tiene ahora, por lo que de momento, no se baraja esta opción.

Hay que tener en cuenta que el virus no se transmite entre personas (aunque eventualmente pudiera transmitirse por sangre). No obstante es necesario tomar precauciones. Si bien Castellanos aclara que «las recomendaciones del Ministerio de Salud son adecuadas: eliminar los depósitos de agua limpia cerca de las casas para evitar el criadero de larvas, usar repelente, camisas y pantalones de manga larga en zonas de mosquitos e incluso la controvertida recomendación de aplazar los embarazos hasta después de la epidemia, es una recomendación responsable», hay que añadir el uso de mosquiteras cuando viajemos y productos antimosquitos, ya que los hábitos del mosquito Aedes son tanto diurnos como nocturnos y le gusta estar en zonas domésticas.

Otros virus que afectan al feto

El Zika no es el único virus que tiene serias repercusiones, especialmente para las gestantes. En la actualidad existen varios microorganismos que se testan para descartar posibles infecciones. Entre ellos, el VIH (Virus de la Inmunodeficiencia Humana), cuyo riesgo de transmisión al feto, pese a existir durante todo el embarazo, es raro que lo haga durante el primer trimestre. Más bien es el periodo que rodea al parto. También se realizan pruebas para la Hepatitis B, ya que, tal y como publican desde la Asociación Española de Pediatría, entre el 70 y el 90 por ciento de los recién nacidos que se infectan en el parto se convierten en portadores crónicos del VHB.El Toxoplasma gondii es uno de los más curiosos, ya que se trata de un parásito muy pequeño que se transmite por comer carne cruda o a través del contacto con los gatos infectados.Otra infección muy importante a tener en cuenta es la sífilis, producida por una bacteria llamada Treponema pallidum. El contagio de la madre al feto se produce a través de la placenta.Pero si hay un causante principal de transmisión vertical, ese es sin duda el Cytomegalovirus, que se transmite por líquidos corporales como saliva, sangre, orina o flujo vaginal, y es la infección congénita más frecuente. Afortunadamente, menos del 15 por ciento de los fetos infectados presenta síntomas al nacimiento, destacando la sordera neurosensorial como hallazgo mas frecuente.Para todas las futuras mamás lo primordial es llevar a cabo revisiones rutinarias y sobre todo, si sospecha que puede estar infectada, comunicárselo de inmediato a su médico.