Angel del Río

Los vecinos de Franco en Mingorrubio: un cementerio construido para el franquismo

En él están enterrados ex presidentes del gobierno, como Carrero Blanco y Arias Navarro; también varios ministros del régimen y de la democracia: Rosón, Fernández Ordóñez o Nieto Antúnez. Entre sus muertos más ilustres: José Banús, Tomás y Valiente, Vázquez Díaz o Prado y Colón de Carvajal.

Los vecinos de Franco en Mingorrubio: un cementerio construido para el franquismo
Los vecinos de Franco en Mingorrubio: un cementerio construido para el franquismolarazon

Franco vuelve a El Pardo, cuarenta y cuatro años después de que lo dejara, ya en estado preagónico, en 1975. Había sido su lugar de residencia oficial desde 1940, cuando todavía no era barrio, sino municipio independiente de Madrid, hasta su anexión a la capital, en 1951, integrándose en el distrito de Fuencarral. En un núcleo próximo, Mingorrubio, se construyó, en 1969, un pequeño cementerio, ampliado en 1980, del que siempre se ha dicho que ha sido el camposanto del antiguo régimen, aunque Franco quiso que fuera destinado al enterramiento del personal civil y militar que vivía en El Pardo y estaba al servicio del dictador. El panteón familiar, lugar elegido para la inhumación de Franco, fue costeado por el Ayuntamiento de Madrid, cuyo alcalde era por aquel entonces, Carlos Arias Navarro, persona del aprecio personal de Carmen Polo, y por cuya intercesión fue elevado a la alcaldía madrileña.

Hasta 1975, año de la muerte de Francisco Franco, el cementerio estuvo gestionado por Patrimonio Nacional; después, se cedió al Ayuntamiento, aunque Patrimonio conserva la propiedad de la cripta donde se encuentra la sepultura de Carmen Polo, enterrada el 7 de febrero de 1988, y ahora, los restos de su esposo.

En los años cincuenta, El Pardo era un lugar escaso de población, donde todos los habitantes pertenecían a la servidumbre, tanto civil como militar, del Jefe del Estado. Habitaban todos ellos en las casas construidas por Patrimonio Nacional, y que en 1989, al ser asumidas las viviendas por Patrimonio del Estado, fueron vendidas a sus inquilinos a precios muy asequibles, entre las 350.000 y los 6 millones de pesetas.

Cementerio de altos cargos y personal de servicio

Se construyó en 1969, con el ánimo de enterrar en él a los vecinos de El Pardo, la gran mayoría de ellos al servicio de Franco, pero sobre todo, a personajes cercanos al régimen. En la actualidad cuenta con 500 sepulturas, 2.200 nichos, 1050 columbarios y medio centenar de panteones. Entre sus muertos más ilustres relacionados con el franquismo, se encuentran la esposa del dictador, Carmen Franco; Carlos Arias Navarro, ex presidente del gobierno y ex alcalde de Madrid; el almirante Luis Carrero Blanco, asesinado por ETA siendo presidente del Gobierno; el general Camilo Alonso Vega; el dictador dominicano, Rafael Trujillo; Pedro Nieto Antúnez, ministro de Marina, y otros ministros del régimen, o el periodista Emilio Romero. Pero hay enterradas personas que no se identificaron con el franquismo: Francisco Fernández Ordóñez, Francisco Tomás y Valiente, el pintor Daniel Vázquez Díaz, Diego Prado y Colón de Carvajal, Nemesio Fernández-Cuesta, Juan José Rosón, Joaquín Calvo Sotelo, o José Banús. También tienen panteones las familias de Escrivá de Balaguer, Sorolla, Delibes y Oreja Aguirre.

La cripta, un “regalo” del pueblo de Madrid

En el año 1969 se construyó el panteón destinado a la familia Franco, cuyo coste fue de once millones y medio de pesetas, que fueron costeados por el Ayuntamiento de Madrid, por decisión de su alcalde, Arias Navarro, incluso hay quien asegura, que esa aportación había sido detraída de los fondos que tenía el Ayuntamiento para personas desempleadas. Pocos son los que han podido visitar la cripta, y quien lo ha hecho, la describe como “austera”, donde no se aprecia ningún símbolo franquista, y en el techo una leyenda: “Yo soy el Alfa y la Omega”, que figura en la Biblia. Se cuenta también que Carmen Polo, fallecida en 1988 y enterrada en esta cripta, pidió que su marido fuera exhumado algún día del Valle de los Caídos, y trasladado a Mingorrubio, según el deseo expresado por el propio dictador. La cripta ocupa toda la planta con una cúpula abovedada, obra de Santiago Padrós. Tiene capacidad para nueve sepulturas más.

Por cierto, la iglesia parroquial de El Pardo, inaugurada en 1966, en el centro de la localidad, se llama Virgen del Carmen, por deseo expreso del Caudillo y en honor a su esposa, Carmen Polo.

Una anécdota curiosa. En agosto de 2007, este cementerio de Mingorrubio fue noticia por un suceso ocurrido a las puertas del mismo: una mujer de 71 años, moría arrollada por un autobús de la EMT, de la línea 601, que realizaba maniobras de aparcamiento. Fue enterrada en el “lugar de los hechos”; es decir, en este cementerio pardeño.

Por otra parte, los vecinos, pero sobre todo los hosteleros de El Pardo, están encantados con el traslado de los restos de Franco al camposanto de la localidad, porque prevén que eso atraiga a muchos curiosos, especialmente los fines de semana, y con ello se beneficie el sector de la hostelería, que tiene una estimable y variada oferta gastronómica, sobre todo relacionada con la caza.