Nacionalismo

Nace la plataforma Concordia Cívica para «sumar y no dividir a los catalanes»

Aglutina a diversas entidades contrarias al referéndum y su cara visible es la catedrática Freixes

Dirigentes de PP y de Ciudadanos arroparon ayer el lanzamiento de la plataforma Concordia Cívica en un acto en L’Hospitalet
Dirigentes de PP y de Ciudadanos arroparon ayer el lanzamiento de la plataforma Concordia Cívica en un acto en L’Hospitaletlarazon

Aglutina a diversas entidades contrarias al referéndum y su cara visible es la catedrática Freixes

Cataluña cuenta desde ayer con una nueva entidad contraria a la división de los catalanes y favorable a la concordia con todos los pueblos de España. Se trata de Concordia Cívica, una plataforma que promete combatir con argumentos el soberanismo y dar cabida al mayor número posible de personas. Su puesta de largo se celebró en L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), en un auditorio abarrotado. La catedrática de Derecho Constitucional Teresa Freixes fue la encargada de presentar el acto.

El evento contó con la presencia y apoyo de destacados políticos del bloque constitucionalista, como Albert Rivera, de Ciudadanos, o Xavier García Albiol del PP catalán, entre muchos otros.

Freixes señaló que «los constitucionalistas catalanes han sido un ejemplo» y, sobre todo, destacó que «estamos aquí para sumar, no para dividir», una frase muy aplaudida por la audiencia, como muchas otras a lo largo del acto. Concordia Cívica pretende aglutinar a diversas entidades no soberanistas de Cataluña. Según Freixes, se trata de un proyecto formado por personas que están «presentes en los debates, que quieren una Cataluña abierta y plural».

Respecto a la actual Generalitat, opinó que «se ha gobernado de forma sectaria, todo basado en la confrontación». Un concepto muy recurrente durante todo el acto. Insistió Freixes en que «es mejor lo que nos une que lo que nos separa, ahora tenemos que salir a la luz».

Concordia Cívica nace con el espíritu de aglutinar a las entidades no soberanistas de Cataluña para ayudarlas a estar presentes en la opinión pública catalana «copada por el nacionalismo excluyente». En la rueda de prensa previa al acto de L’Hospitalet, Freixes, que será la cara visible de este movimiento, estuvo acompañada por el presidente de Empresaris de Catalunya, Josep Bou, y el presidente del Grupo de Periodistas Pi i Margall, Sergio Fidalgo, y explicó que Concordia Cívica también la forman personas que provienen de entidades como Sociedad Civil Catalana, Associació per la Tolerància, Convivència Cívica Catalana e incluso perfiles soberanistas contrarios a «cómo se lleva el proceso».

Asimismo, Freixes insistió en que Concordia Cívica «no nace para sustituir a nadie», sino que su objetivo es «ayudar» a que las entidades no soberanistas puedan incidir en la opinión pública de «un modo más organizado», así como ampliar su radio de actuación para conseguir su voz pueda oírse tanto en Madrid como en Bruselas».

«Evidentemente tendremos voz en el proceso soberanista a través de los medios de comunicación, en los barrios, las organizaciones cívicas, la enseñanza, el funcionariado y toda esta Cataluña silenciosa», aclaró.

Freixes también comentó que Concordia Cívica es un movimiento «transversal», sin «afiliaciones políticas ni partidistas», pese a la proximidad de dirigentes como el presidente de Ciudadanos y del PP . Según la catedrática, en la órbita de la entidad también habrá espacio para personas de Tercera Vía y Federalistes d’Esquerres.

Fuentes de Sociedad Civil explicaron a Efe que la entidad aún no se ha adherido a Concordia Cívica, aunque «lo estudiarán» tras el acto de presentación, al que acudió su presidente, Mariano Gomà. Por otro lado, Freixes avanzó que una de las posturas de su entidad es la defensa de que «no se haga» el referéndum planteado por el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ya que «un gobierno legítimo no puede promover un referéndum fuera de la ley». En caso de convocatoria de un referéndum legal, dijo, Concordia Cívica «debería pensar qué defender», aunque «la mayoría no cree que Cataluña deba separarse».