Mossos d'Esquadra

UCRO: La «Gestapo» de los Mossos

La Policía catalana intentó quemar documentos que probarían que esta unidad de agentes afines al «procés» espiaba a políticos no independentistas, empresarios y sindicatos

El ex presidente del PP catalán, Xavier García Albiol teme ser víctima de un espionaje político
El ex presidente del PP catalán, Xavier García Albiol teme ser víctima de un espionaje políticolarazon

La Policía catalana intentó quemar documentos que probarían que esta unidad de agentes afines al «procés» espiaba a políticos no independentistas, empresarios y sindicatos.

La guerra sucia no es un fenómeno extraño en Cataluña y, según las investigaciones de la Policía Nacional, tampoco es lejano, ya que los papeles que varias unidades de los Mossos d’Esquadra trataron de quemar el pasado mes de octubre en una incineradora, en vísperas de la aplicación del artículo 155 de la Constitución, contienen datos de la desaparecida Unidad Central de Respuesta Operativa (UCRO) de la policía autonómica, según pudo confirmar este periódico. La UCRO ha llegado a ser conocida como la «Gestapo catalana» por su presunto control de las actividades de partidos, sindicatos, empresarios o cualquier otro grupo contrario al separatismo. Ayer la UCRO saltó al primer plano después de que la Policía concluyera que entre sus trabajos pudo haber realizado espionaje de dirigentes del PP catalán, extremo no confirmado.

La desaparición (o cambio de nombre) de la UCRO –que no figuraba en ningún organigrama policial– es un tema llevado con tanto secreto como su creación. Era tan desconocida como temida muy pocas personas sabían dónde tenía su sede, el número de personas que la integraban y las actividades que realizaban.

La Brigada de Información de Cataluña (BIC) de la Policía Nacional elabora, desde el pasado 26 de octubre, un informe sobre los papeles que se incautaron y que los Mossos querían reducir a cenizas. El mutismo en esta Brigada es total por el carácter secreto de las investigaciones.

Las fuentes consultadas han señalado que la UCRO se dedicaba, entre otras cosas, a controlar a personas pertenecientes a partidos y organizaciones no nacionalistas y a realizar los correspondientes informes. Lo cierto, es que cuando aparecieron las primeras noticias sobre su existencia, «alguien que tenía el poder para tomar esta iniciativa» decidió su desaparición o bien su camuflaje. Sin embargo, una cosa era hacer desaparecer la unidad (o darle otra denominación) y otra muy distinta destruir todo el material que habían acumulado a lo largo de años de investigaciones.

Hasta que la BIC no entregue su informe en la Audiencia Nacional no se podrían confirmar o matizar estas sospechas. «Lo que está claro es que iban a destruir material muy sensible para los Mossos en vísperas de su intervención», tal y como adelantó LA RAZÓN en su edición del pasado 27 de octubre. «Si no tenían nada que ocultar, a qué tantas prisas», se preguntan las referidas fuentes.

Fuentes de la investigación informaron a Efe de que la UCRO pudo haber realizado labores de espionaje sobre dos dirigentes del PP: el presidente del PP catalán, Xavier García-Albiol, y el delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo. Y que para llevar a cabo estas tareas los Mossos d’Esquadra usaron una doble identidad. Fuentes del Ministerio del Interior aseguraron que no había constancia de ello.

Escandalizado ante este presunto espionaje, García Albiol se apresuró a salir ante los medios para acusar al antiguo gobierno de Puigdemont de haber usado a los Mossos como a «la Gestapo». «Esto de espiar a los partidos políticos rivales y a quienes nos molestan con dinero público lo veíamos en la Gestapo (la policía secreta de la Alemania nazi), en los regímenes totalitarios y en las dictaduras, pero no en la práctica normal de las democracias», deploró el presidente del PP catalán, que anunció que está meditando interponer una denuncia contra el ex presidente de la Generalitat a falta de obtener una confirmación definitiva por parte de los investigadores que, al cierre de esta edición, no había llegado a producirse.

El candidato del PP para el 21-D confiaba en que no sea verdad que los Mossos le espiaron a él y al delegado del Gobierno en Cataluña, el popular Enric Millo: «Yo espero que no sea cierto. No me consta que lo sea». El líder del PPC reconoció a preguntas de los periodistas que el Gobierno no le había confirmado que esa información fuese cierta. En cualquier caso dijo que del independentismo espera cualquier cosa, ya que el candidato de JuntsxCat y ex presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, «ha sido capaz de desviar dinero de servicios sociales para el referéndum».

Entre la documentación que los Mossos d’Esquadra pretendían calcinar en la incineradora, la Policía Nacional también halló archivos relacionados con la extinta agencia de detectives Método 3, que elaboró centenares de informes sobre los principales personajes de la vida política, económica y social de Cataluña a petición de sus clientes.