Presupuestos autonómicos

La Junta ya tiene listo el Anteproyecto de Presupuestos y encarrila la aprobación

El PSOE accede a las peticiones de Ciudadanos, que encaró la negociación sin líneas rojas

La presidenta de la Junta, Susana Díaz, y el líder de C’s en Andalucía, Juan Marín, en la Cámara autonómica
La presidenta de la Junta, Susana Díaz, y el líder de C’s en Andalucía, Juan Marín, en la Cámara autonómicalarazon

El PSOE accede a las peticiones de Ciudadanos, que encaró la negociación sin líneas rojas.

La Junta tiene despejado el camino para que el Consejo de Gobierno apruebe antes de que acabe el mes, tal y como obliga la ley, el Proyecto de Presupuestos, que iniciará a partir de entonces su tramitación en el Parlamento de Andalucía. El Ejecutivo envió el lunes el texto al Consejo Consultivo, que dictaminará sobre el articulado de la ley muy probablemente el próximo lunes 24. El año pasado Ciudadanos dio su apoyo a las cuentas antes incluso de que las aprobara el Consejo de Gobierno. De momento aún no se ha pronunciado de manera definitiva, pero desde esta formación señalan a LA RAZÓN que el PSOE está «accediendo» a las peticiones planteadas en la negociación. El principal escollo señalado por el líder de C’s en Andalucía, Juan Marín, son las inversiones.

La Junta, como el resto de comunidades autónomas, ha contado con un problema fundamental para la elaboración de sus Presupuestos: la ausencia de las entregas a cuenta del Gobierno. El Consejo de Ministros aprobó la semana pasada un cuadro macro económico de cara a cumplir con el calendario exigido por Bruselas, pero ha rechazado dar luz verde al techo de gasto, paso previo necesario para componer las entregas a cuenta de las comunidades, ya que de hacerlo vulneraría la ley, según señala un informe de la Abogacía del Estado.

El resultado es que la Junta ha tenido que ir hasta el momento casi a ciegas, ya que las entregas a cuenta no son una magnitud menor: suponen el 75 por ciento de los recursos no financieros de la Administración. Prueba de la provisionalidad de las cifras es que la Junta aprobó el 26 de julio su límite máximo de gasto no financiero remitiéndose al de 2013, ascendente a 21.323 millones de euros.

El panorama se despejará definitivamente si, como todo apunta, Mariano Rajoy es investido presidente la próxima semana, después de que el PSOE acuerde su abstención en el Comité Federal del domingo. El problema es que cuando se despeje el escenario nacional se habrá prácticamente agotado el tiempo de la Junta para aprobar su anteproyecto de ley. El margen es muy escaso. Es probable que la primera votación en el Congreso se produzca el jueves 27 y la segunda –en la que ya bastaría la abstención del PSOE porque sólo se requieren más síes que noes–, el sábado 29. Para evitar la prórroga presupuestaria, el Consejo de Gobierno de la Junta tiene que aprobar el anteproyecto de ley el lunes 31.

Por tanto, el calendario más probable es que la Junta apruebe el anteproyecto de ley el martes 25, un día después de que dictamine el Consejo Consultivo. Pero aquí aparece otro problema que puede modificar las fechas y obligar a un Consejo de Gobierno extraordinario posterior. Los consejeros del Consultivo tienen hasta tres días para la elaboración de votos particulares, tiempo que comenzaría a correr a partir del pleno de este órgano del día 24. No siempre los emiten. De hecho, no se produjo ninguno para los Presupuestos de 2016. Pero si los hubiera –ocurre a menudo con las propuestas de dictamen que llegan a este órgano– difícilmente podría el Consejo de Gobierno aprobar el anteproyecto de ley el martes 25 con el informe del Consultivo.

El apoyo de Ciudadanos, socio natural del PSOE, no es necesario en este momento. El Consejo de Gobierno puede aprobar el anteproyecto de ley, remitirlo a la Cámara, y luego el Partido Socialista recabar el respaldo necesario en la tramitación parlamentaria, acercando posturas con otras fuerzas en la fase de enmiendas. Sin embargo, es otra la ruta probable: que PSOE y Ciudadanos, como ocurrió hace un año, escenifiquen su apoyo en los próximos días y despejen cualquier tipo de incertidumbre.

La estabilidad es uno de los mensajes fuerza de Ciudadanos de cara a su electorado. Por este motivo, no ha tratado en ningún momento de escenificar un «tour de force» con el PSOE para el apoyo a las cuentas. El líder regional de la formación, Juan Marín, ya dijo en una intervención en el Parlamento que no iba a poner ninguna línea roja porque no era la forma de llegar a acuerdos. Ni siquiera es una línea roja la bajada de medio punto del IRPF que ha pedido esta formación. C’s entiende que si no es posible un nuevo descenso en 2017 –la Junta ya ha bajado dos puntos este año– y se compensa con otra bajada en 2018, hay margen para acordar. El objetivo es bajar un 3,5 el IRPF en la legislatura, tal y como queda establecido en el acuerdo de investidura con el PSOE.